Diferencias entre armar la luna de miel con y sin agencia de viajes

Siguen más que emocionados por la entrega de anillo de compromiso y todo lo que eso implica. Desean que todo en su celebración salga perfecto, desde las invitaciones de boda hasta las flores más pequeñas del ramo de novia. Y al pensar en su luna de miel, además de valorar cada uno de los destinos en su lista de deseos, es lógico preguntarse cuáles son las ventajas de armar su itinerario solos y las de contratarlo con una agencia de viajes.

Como la luna de miel no es un viaje cualquiera, es totalmente comprensible ponerse exigentes. Querrán disfrutar de todo lo que el destino seleccionado pueda ofrecerles, pero desde la perspectiva de lunamieleros. A continuación tienen los cinco factores en los que puede diferenciarse un primer viaje de casados organizado por una agencia de uno que armen ustedes mismos.

1. Conocimiento del destino

Las empresas profesionales tienen experiencia en organizar viajes complejos y un amplio conocimiento de la oferta turística de muchos destinos. Conocen las temporadas para viajar y disponen también de gran cantidad de información útil para el viajero. Pero, además, las agencias de viajes especializadas en lunas de miel saben qué actividades cubren mejor las expectativas de los recién casados. 

Si van con un esbozo de ideas de lo que quieren hacer, pero no tienen tiempo de desarrollar el itinerario detallado, un profesional les podrá sugerir recorridos de acuerdo a sus gustos y preferencias. Así, podrán vivir la experiencia completa sin descuidar la organización de la boda.

Asimismo, manejan paquetes con muchas opciones de hospedaje, entre las cuales elegir en función de los servicios a los que se quiera tener acceso, la ubicación en la que se desee estar o el presupuesto de que se disponga. Más allá del alojamiento, también podrán apoyarlos para contratar los desplazamientos y apartar lugar en atractivos turísticos que precisen una reservación anticipada. Estos servicios son especialmente útiles si nunca se les dio bien encontrar los vuelos más económicos o no dominan el idioma local. 

Ahora bien, si deciden planear su viaje ustedes mismos, el abanico también puede ser muy amplio. La tecnología siempre da acceso a mucha información. Investiguen en páginas especializadas, averigüen cómo moverse de manera segura, vean documentales, pregunten a otras parejas de lunamieleros y, sobre todo, no vayan a ciegas. Si ya decidieron qué rumbo tomar después de la boda, pregunten en la Comunidad de Bodas.com.mx quiénes de nuestros usuarios ya viajaron a ese lugar y qué recomendaciones les pueden dar.

2. Comodidad y tiempo

Si son más prácticos y desde el principio decidieron contratar un wedding planner que les resolviera hasta la entrega de sus invitaciones de boda elegantes, contratar a un organizador de viajes es una estupenda idea. Se ahorrarán tiempo, esfuerzo y, probablemente, cierto estrés. Aquí solo deberán estar al pendiente con su agente para que los mantenga actualizados y agreguen o quiten puntos del itinerario final, siempre según sus gustos.

Por otro lado, si, como buen equipo, desean tener la experiencia de armar su viaje desde cero, tendrán que consultar cada una de sus alternativas de hospedaje y transporte para aclarar todas sus dudas. En temporada alta, la demanda también sube y los vuelos y los hoteles suelen estar a tope, por lo que hace falta monitorear constantemente la disponibilidad y reservar con tanto tiempo como sea posible. 

Lo mismo sucederá con los recorridos que quieran realizar o las actividades que quieran descubrir en el destino. Ir preparados les evitará algún contratiempo al llegar o lo que, a veces, es peor: regresar a casa y descubrir que les faltó conocer muchas cosas. 

3. Precios

Derivado de lo anterior, cobra sentido que aquello que les ahorra tiempo tendrá un precio más elevado, aunque no siempre se cumple. Si bien las agencias de viajes obtienen un margen de beneficios por que ustedes contraten con ellas sus servicios, también es cierto que recurrir a ellas, en ocasiones, puede resultar algo más económico que hacer su programa de viaje por su cuenta.

Debido a que la mayoría de las agencias tienen convenios directos con aerolíneas, cadenas hoteleras y, en ocasiones, empresas locales, suelen conseguir los servicios a precios mucho más competitivos de los que puede obtener un particular. Esto hace posible que sus tarifas se equiparen (o, a veces, sean inferiores) a los precios que ustedes mismos podrían conseguir sin intermediarios. Así que, destierren esa idea de que los viajes siempre salen más caros por agencia.

Los paquetes de viajes para lunamieleros que manejan los operadores turísticos también son atractivos para muchas parejas. Pueden adaptarse a su presupuesto casi tanto como lo deseen. Recorriendo unos días la fecha del viaje, cambiando un alojamiento por otro o modificando el tipo de comodidades podrán conseguir variaciones de varios miles de pesos entre un paquete y otro al mismo destino. 

Si eligen tomar el camino solos, sin duda, fortalecerán su capacidad para cazar buenas ofertas. Puede que la experiencia de buscar vestidos de novia de todos los precios también les sirva en esta nueva misión. Eso sí, para salir de dudas, pidan cotizaciones para su luna de miel. Solo así podrán comparar qué le conviene más a su bolsillo.

4. Proceso de investigación

Una agencia de viajes hará, prácticamente, todo por ustedes. Bastará con plantear la luna de miel que imaginan y ellos se ocuparán de hacerla posible de varias maneras. Si llevan una idea concreta, todo será mucho más fácil, pero si no, tendrán la oportunidad de adaptar y personalizar el viaje a su medida según lo que mejor les parezca. A veces solo es necesario definir el lugar y todo lo demás llega por añadidura, pues ellos ya tienen ubicados los atractivos de cada sitio y sabrán entrevistarlos para dar con aquello que será de su agrado.

Para formar un itinerario de viaje por cuenta propia hace falta investigar un sinfín de detalles. Desde el lugar, cómo llegar a él, su clima, requisitos para ingresar en caso de ser extranjeros, restriciones de equipaje, protocolos de salud, seguridad, costumbres, tradiciones, puntos turísticos, temporadas recomendadas, calidad en hospedaje, confiabilidad de los guías en diversas áreas y un largo etcétera.

Es todo un proceso que requiere una gran inversión de tiempo y, sobre todo, un entrenado ojo de viajero. Si ustedes son una pareja de trotamundos, indudablemente disfrutarán esta parte e, incluso si externalizaron el servicio a una agencia, se dedicarán a estudiarlo todo para exprimir al máximo su viaje.

5. ¿Una fórmula mixta?

No hace falta complicarse, el punto de la luna de miel es que disfruten todo el trayecto, desde la planeación hasta el día de su regreso. Tal vez combinar las dos opciones sea la fórmula más equilibrada de apegarse a sus necesidades y su presupuesto. Así que, si no se pueden decidir o uno de ustedes es más aventurero y el otro más metódico, vayan por una alternativa que los complazca por igual.

Por ejemplo, el hospedaje y los servicios de primera necesidad pueden contratarlos a través de una agencia. Y si fueron “el cerebro” de su celebración nupcial hasta el punto de aprender cómo hacer recuerdos para boda, organicen ustedes el resto del viaje. Busquen por su cuenta las actividades populares, sitios emblemáticos, excursiones y pregunten entre locales cuáles son los lugares tradicionales, esos donde se conoce realmente una ciudad, su gastronomía y a su gente.

Si después se agobian o ven que no llegan a tiempo porque los desbordan los pendientes y todavía no tienen ni el pastel de fondant para boda, pueden ampliar el paquete por uno que lleve todo incluido. ¿Como qué? Traslados desde y hacia el aeropuerto, excursiones, boletos para espectáculos y hasta seguros de viaje.

Sin importar cómo decidan llegar al destino deseado, preocúpense por que supere sus expectativas y pasen momentos inolvidables y sumamente románticos. Si el viaje será a un destino muy exótico, encargar unas invitaciones de boda originales con formato de pasaporte o de pase de abordar y algo de gastronomía típica del lugar para entregar con los recuerdos para boda serán formas divertidas y consentidoras de presumir su primer viaje de casados. ¿Ya decidieron dónde pasar su luna de miel?