Cocinar en pareja: 6 consejos para hacerlo aún más divertido
¿Necesitan actividades? ¿Algo que puedan compartir, disfrutar y además repetir consecutivamente? Entonces es momento de cocinar juntos. Es hora de hacer el mandado y después, a lavarse las manos y ponerse los mandiles, que esto apenas comienza.
Los meses de planeación de la boda se resumirán en un evento excepcional. Pero en el camino terminarán siendo unos expertos en comida, moda y decoración. Serían capaces de escribir toda una investigación sobre el color de sus centros de mesa para boda, las flores suspendidas del techo o lo que debe reunir la mesa de bienvenida y enumerar las principales tendencias en vestidos de novia. Asimismo, tienen el paladar perfectamente entrenado y saben distinguir los ingredientes de calidad cuando se trata de degustar los pasteles de boda. ¿Pero qué tal se les daría cocinar todos esos manjares juntos?
Si disfrutaron la experiencia de unir fuerzas en un proyecto común y extrañan pasar el tiempo revisando imágenes de invitaciones de boda, piensen en los beneficios de cocinar en pareja. Estos consejos para abordar la sesión culinaria les hará darse cuenta de que pasar tiempo juntos en la cocina puede ser divertido y los ayudará a mejorar su relación de pareja. El hecho de elegir su propio menú y prepararlo juntos les enseñará cómo trabajar en equipo, podrán compartir sus gustos y mantendrán una sana conexión.
1. ¡Que viva la cocina creativa!
Cocinar estimula la creatividad y hará que sus mentes se despejen por completo. Pero además de ejercitar la mente y alimentar el estómago, cocinar cultiva la concentración y la memoria. Una actividad completísima.
Únicamente estarán atentos de cortar bien los ingredientes, revisar los tiempos y temperaturas de cocción, degustar y revisar que nada se queme. Será un momento en el que los sabores y olores conectarán todos sus sentidos para crear deliciosos platillos.
Podrán cocinar cientos de recetas, adaptar algunas a aquello que les guste y presentar como más atractivo se les haga. ¿Por qué no pedirle a su proveedor que les comparta algún consejo de su decoración del pastel de boda?
2. Competencias culinarias
¿Qué les parece si hacen su propio ring en la cocina? ¡Sí, organicen su propia competencia! Por ejemplo: pongan un límite de ingredientes para que cada uno se invente una receta nueva o vayan al supermercado y cada quien le comprará los ingredientes a su contrincante. Con lo que se tenga, cocinen algo, el punto será que se sorprendan entre ustedes y que gane el que mejor lo haga.
Podrán tener jueces como sus papás, algún familiar o hasta amigos, todo con tal de que se conozca quien es el mejor chef. O si se comprometen a ser honestos con sus puntuaciones, ustedes mismos pueden valorar el trabajo de ambos. El ganador se librará de lavar el montonal de platos o se llevará un mandil personalizado. Si optan por lo segundo, busquen a su proveedor de recuerdos para boda útiles, ¡será de gran ayuda!
Sin duda, es una divertida actividad que disfrutarán bastante y querrán repetir varias veces si no es que todos los fines de semana.
3. La música, un ingrediente indispensable
Por nada puede faltar la música mientras cocinan. Esta podrá sacar sus mejores pasos mientras pican unas cuantas verdurillas o hacen un dueto rockero mientras uno lava los platos y el otro verifica que la pasta esté bien cocida.
La música los mantendrá alegres y complementará esa parte creativa de la cocina, así que trabajen una buena lista de reproducción. Tengan por seguro que presentarán coloridos y exquisitos platillos que podrán degustar a la hora de la comida o en la cena.
Incluyan la canción con la cual la novia sorprendió al novio en la pista cuando cambió su vestido corte sirena por un vestido de fiesta corto para bailarle y cantarle frente a todos sus invitados. O esa canción con la que sus damas y best men irrumpieron en modo flashmob. Aunque sea en privado, estos momentos siempre se pueden repetir, ¿no?
4. Cocinas del mundo en sus platos
En sus consecutivos viajes y en la luna de miel se dieron la oportunidad de probar los platillos típicos del lugar que conocieron. Algunos les habrán gustado tanto que pidieron la receta y hasta se trajeron productos locales en la maleta pensando que podrían cocinarlos. ¡Ahora es cuando!
Dense a la tarea de buscar aquellos ingredientes esenciales para elaborar platillos internacionales. Conocerán más sobre esas culturas y podrán seguir las recomendaciones de sus gentes; con el tiempo ese platillo quedará integrado en su dieta habitual. También será todo un reto, especialmente para los paladares perfeccionistas, pues querrán que ese platillo se parezca al original.
No se olviden de la parte más dulce de los alimentos: los postres. Si visitaron distintas ciudades y les agradó algún pastel, helado o pan, investiguen la receta y disfruten de la comida nacional e internacional desde casa. ¡Tip extra! Reúnan todas las recetas que más les gusten, también inventen algunas propias y encárguenle a su diseñador de invitaciones de boda originales que les diseñe un recetario de edición exclusiva. ¿O tal vez quieren regalarlo a sus familias y amigos?
5. ¡Sano y divertido!
Todos tenemos debilidades, el punto es saber manejarlas. Así que si son aficionados por comer alimentos fritos, salados o azucarados (¿algún merodeador de las mesas de dulces para boda?) será mejor no consumirlos frecuentemente; pronto sentirán cambios.
Encuentren un balance en su alimentación con frutas, verduras, carnes magras, cereales, legumbres... ¡Nada de excesos! Empiecen buscando un ingrediente saludable que no coman habitualmente e investiguen cómo lo pueden preparar para integrarlo a su dieta de la manera más satisfactoria.
Por ejemplo, cocinen albóndigas de avena o soya, berenjena rellena de verduras, tacos de lechuga rellenos de atún con zanahoria, rábano rallado y alguna salsa dulce. O también lasaña vegetariana, pan de zanahoria, chocolate amargo con pistache y granada, ¿ven que la lista es interminable?
6. Un poco de planificación
Si no saben cómo comer correctamente, acudan con un nutriólogo: ¡será lo mejor! Un profesional es la mejor guía para tener una buena alimentación. Recuerden que no necesitan agendar un evento importante en el calendario para cuidar su cuerpo.
Cada fin de semana, elijan el menú del día o de la semana. Si han decidido cocinar juntos, también hagan las compras juntos, pues será otra actividad que compartirán. Además, podrán sustituir algún ingrediente por otro con el consentimiento de ambos. Y si son de quienes disfrutan de comer fuera de casa, ¿por qué no preparar un picnic con alimentos caseros?
Cocinar juntos es una de las tantas actividades que disfrutarán bastante, así como aprender cómo hacer recuerdos para boda. Cocinar en pareja los unirá aún más, será un bienestar para ambos y los ayudará a tener mejor organización dentro de casa. ¡Inténtelo! Solo no se olviden de quitarse las argollas y el anillo de compromiso para que no se dañen. ¡Disfruten de su amor en la cocina!