Cómo les explico a mis hijos que me caso: 10 consejos
Que tu boda sea una oportunidad de fortalecer la unión y el amor de toda tu familia. Te damos algunos consejos para transmitir a tus hijos este mensaje tan importante. Toma nota de la mejor forma de anunciarle tu boda a los invitados más especiales.
Una boda cambia la vida de muchas personas. Las familias de ambos novios se enfrentarán a circunstancias muy distintas a las que conocían, incluso si la pareja ha vivido junta durante algún tiempo. Especialmente para los hijos de los novios, la boda se convierte en un evento muy significativo, y puede generar toda una variedad de sentimientos. Sin embargo, una boda es la celebración del amor, por lo es la mejor oportunidad para acercar a las familias. Antes de publicar las fotos de tu anillo de compromiso, lee estos consejos: ¡quizás tus hijos quieran ayudarte a elegir tu vestido de novia!
1. Encuentra el mejor momento
Esta noticia requiere tacto y sensibilidad. La mejor manera de comunicarla a los hijos es en un momento privado, con tiempo disponible para charlar largo y tendido. Introducir poco a poco el tema puede ayudarlos a asimilar mejor el cambio, pero también puede causarles ansiedad, por lo que la sutileza es importante. Por ejemplo, pídeles su opinión sobre tu pareja, pregunta si les gustaría pasar más tiempo con él o con ella… Si se muestran esquivos, no los presiones, pero toma en cuenta que tarde o temprano tendrán que platicar.
2. Una nueva familia
Es fundamental que tus hijos sepan que no te perderán: tu pareja y el amor que sientes por él o por ella no afectarán en nada el amor que sientes por ellos. Al mismo tiempo, puedes hacerles saber la felicidad que tu pareja te hace sentir, y lo trascendental que es para ti la formación de su nuevo hogar. Lo más importante es que tus hijos sepan que siempre serán la parte más importante de tu vida y que deseas su felicidad tanto como la tuya. Poco a poco, y sin presionar, los hijos deben pasar tiempo con los nuevos integrantes de su familia. Se sugiere que el contacto empiece cuando la relación se vuelva seria, o cuando se formule el compromiso, de la forma más natural posible. Quizás después de un tiempo, todos juntos puedan elegir las invitaciones para boda civil.
3. Habla sobre el futuro
En la medida de lo posible, trata de eliminar la incertidumbre sobre su futuro: plantea con claridad los cambios que habrá en su familia después de la boda. Concéntrate en las cosas positivas y procura no usar oraciones impositivas.
4. Lecciones importantes
Aunque hacerlos sentir seguros es primordial, esta puede ser una oportunidad para transmitirles un poco de tu sabiduría. Por ejemplo, que la vida siempre esté cambiando es algo natural, pero no todos los cambios son malos y hay que aprender a manejar las circunstancias con sensibilidad. Aprendemos sobre el amor y sobre la felicidad observando a nuestros padres, por lo que tu boda es la ocasión perfecta para hablarles de estos temas. Abrir tu corazón es la mejor manera de conectarte con tus hijos.
5. Escúchalos
Un diálogo sólo es posible si ambas partes se expresan y se escuchan. Lo más importante en toda relación es el respeto mutuo. Eso significa no juzgar lo que el otro dice. Escucha lo que tus hijos tengan para decir, y haz un esfuerzo por comprender lo que sienten. Sin presionarlos, procura mantener viva la comunicación, y sé paciente con sus comportamientos y sus pensamientos.
6. Únicos y especiales
Tú conoces a tus hijos mejor que nadie y sabes cómo es su temperamento. Al hablar con ellos, toma en cuenta su susceptibilidad. No pierdas de vista que tus palabras son importantes: hablar con un adolescente no es igual que hablar con un niño pequeño, aunque el mensaje sea el mismo. De ser necesario, consulta con un profesional: la terapia es de mucha ayuda para aprender a comunicarnos y a sentirnos tranquilos. Toma en cuenta que, en el caso de los niños pequeños, su vida gira alrededor de la de sus papás, por lo que debes darles tiempo para comprender la situación. Si tus hijos son adultos, plantea la situación en un ambiente familiar, como una cena, y escucha lo que tengan que decir.
7. Sus inquietudes merecen respuestas
Debes responder, con honestidad, todas sus dudas. Quizás algunas preguntas sean difíciles de responder, o haya cuestiones de las que te cueste trabajo hablar. Si se da el caso, debes explicarles a tus hijos tus razones y tus sentimientos, y apelar a su paciencia. Pero, sobre todo, no dejes ninguna duda sin responder. Nunca es tarde para aprender a comunicarnos. Ayúdalos a expresar con sinceridad lo que sienten: sus emociones son tan válidas como las tuyas, por lo que no deben desarrollar ningún tipo de culpa, y escucharlos es la mejor forma de apoyarlos.
8. Respeta sus tiempos
Cada persona necesita tiempos diferentes para asimilar los cambios en la vida. Respeta los cambios de ánimo de tus hijos, sus procesos y sus acercamientos (y distanciamientos) a ti y al tema de tu boda. Recuerda que el amor no consiste en pertenecer, sino en permanecer: hazles saber que son libres y amados. Mientras asimilan la idea, puedes aprender cómo hacer centros de mesa para boda sencillos, cómo preparar un botiquín para el banquete, o cómo hacer recuerdos para boda originales.
9. Explica la boda
Explicar cómo será la boda, sus símbolos y su importancia puede servir para ayudarles a entender este cambio de vida: cada parte de la boda, desde en qué mano va el anillo de compromiso hasta la iluminación y las flores para boda, representa el amor, la alegría y el inicio de una nueva etapa. Además, la idea de una gran fiesta o de una celebración íntima puede emocionar a tus hijos. Si, por el contrario, la celebración les produce nervios, recuerda no presionarlos ni angustiarlos. Asegúrales que no están obligado a asistir, pero que su presencia te hará muy feliz. En caso de que no quieran ir, no los angusties: respeta su decisión y hazles saber que tienen toda la vida para celebrar la unión de su hogar.
10. Inclúyelos en la boda
Si ellos están de acuerdo, involúcralos en la organización de tu boda y dales protagonismo. En el catálogo de Bodas.com.mx encontrarás ideas para su participación en tu celebración. Los más pequeños pueden ser pajecitos en tu boda y ayudarte a repartir recuerditos, y los grandes pueden leer pasajes en la ceremonia o supervisar tu peinado de novia. Recuerda mencionarlos en tu brindis y no dudes escribirles una carta con pensamientos de amor y agradecimiento por su presencia en tu vida.