Cómo limpiar los anillos de compromiso y de casados
Las alianzas y los anillos de compromiso simbolizan su enlace matrimonial; son un recuerdo que portarán por el resto de sus vidas. ¿Ya saben qué hacer y qué no para que luzcan siempre limpios y evitar que se deterioren? ¡A desempolvar esos consejos!
Todo salió de maravilla, la ceremonia en la que se dieron el “sí” fue mágica y en la recepción bailaron durante horas rodeados de distinguidos vestidos de fiesta largos y elegantes trajes. Todos los invitados pasaron momentos inolvidables y ustedes recibieron cariñosos pensamientos de amor para esta nueva aventura que emprenden juntos. Pasadas algunas semanas, ya con el vestido de novia y el traje en la tintorería, regresarán a la vida cotidiana. Para mantener sus alianzas de boda luzcan tan lustrosas como el primer día, denles los cuidados adecuados.
Si son cuidadosos, estas joyas los acompañarán toda la vida, incluso podrían heredar el anillo de compromiso Tiffany a la siguiente generación. Sin embargo, al estar expuestos constantemente a la contaminación, distintos tipos de químicos y uso diario pueden hacer que se opaquen o se rayen, por lo que es recomendable una limpieza profunda al menos una vez año.
Cuando compren los anillos, pregunten al proveedor por la garantía y qué tipo de mantenimiento ofrece, muchos incluyen limpieza anual o reparaciones por ciertos periodos.
Anillos de plata
Aunque podría considerarse que son de los anillos de compromiso baratos, la plata fina es muy resistente y pueden usarse diariamente sin tener mucho daño. Tiende a mancharse en ambientes húmedos y salinos y no debe exponerse a productos con azufre.
Los anillos de este material se pueden lavar con agua tibia y un detergente suave cotidianamente para sacar las grasas o ácidos del ambiente. Para nada se recomienda dejar remojando, pues las marcas de agua son difíciles de quitar. Después de esta limpieza, se deberán secar perfectamente y no dejar rastro de humedad.
Para una limpieza profunda, bastará con emplear una crema pulidora y frotar suavemente con una tela suave, así retomarán su brillo y quedarán como nuevos. Hay que tomar en cuenta que algunos elementos decorativos suelen estar oxidados a propósito para dar relieve y generar contrastes, por lo que es importante que no se borren para no perder el diseño.
Una vez pulidos, deberán lavarse nuevamente con agua y jabón, secarlos perfectamente y... ¡Listo! Tendrán los anillos tan relucientes como el día que comieron el dulce pastel de fondant para boda. Si se los quitarán en algún momento, por ejemplo, practicando deportes de aventura o remojándose en un trash the dress acuático, resguárdenlos en una bolsita de franela para su buena conservación, pero no olviden después en qué mano va el anillo de compromiso.
Anillos de oro
Si bien el oro es el metal más utilizado en la joyería nupcial, suele tener un desgaste mayor con el uso cotidiano. Esto incluye la pérdida del brillo y que se pueda rayar su superficie. Para una limpieza habitual, se recomienda colocar los anillos durante 10 minutos en una solución de agua tibia y jabón quitagrasa para remover los residuos. Inmediatamente después, convendrá secarlos y pulirlos con un paño.
Así como fueron muy cuidadosos cuando aprendieron cómo hacer centros de mesa para boda, deberán serlo con sus alianzas. Esto implica evitar realizar actividades manuales que puedan dañarlos, tales como la ferretería o la jardinería; también manténganlos lejos de químicos abrasivos y procuren no llevarlos a la playa, ya que pueden desgastarse.
Para la limpieza anual, existen algunos líquidos limpiadores por inmersión, pero deberán leer muy bien las instrucciones. Son segundos los que deberán estar los anillos en esta solución, ya que contienen agentes abrasivos. Sin embargo, este método no se recomienda para piezas con gemas o monturas, ya que podrían contribuir a que estas se desprendan.
Si en la pedida te entregaron un anillo de compromiso de oro blanco, las manos de su joyero de confianza serán las más convenientes para hacer una inmersión ultrasónica. Después, ajustará las monturas para que no se desprendan las gemas y, de nuevo, anillo a dedo.
Anillos de platino
Actualmente, están muy en tendencia las alianzas de platino debido a son mucho más resistentes que el oro y requieren menos cuidados. Para limpiarlos, es necesario preparar una solución de agua, jabón y cinco gotas de amoniaco. Sumerjan la pieza por 10 minutos y después, púlanla con una gamuza para sacar el brillo a ese anillo de compromiso Tiffany.
Para el mantenimiento anual, mejor lleven las alianzas a la joyería donde las compraron para que, dependiendo del diseño, se haga la limpieza adecuada. Esto se debe a que, igual que sucede con los demás anillos, el proceso será diferente si los anillos de platino tienen incrustaciones de brillantes o si son lisos.
Las piedras preciosas
Los brillantes más preciados por las novias son los diamantes. Si bien son sumamente duraderos, si tienen algunas impurezas, pueden dañarse al contacto con metales u otras piedras preciosas e incluso astillarse. Eviten guardarlos con otras joyas para evitar la erosión, así que será mejor conservar cada gema en un caja por separado.
También pueden limpiarse con un paño suave y una solución ligera de amoniaco, pero lo ideal es llevarlos al especialista cada seis meses para limpieza y ajuste de las monturas, algo que es muy importante para que no se desprendan del anillo. Así, en todo momento el anillo de compromiso y las alianzas con diamantes lucirán como cuando las intercambiaron el día de la boda.
Este método también funciona para otras gemas como zafiros, zirconios o rubíes: al momento de guardarlos, siempre deberán limpiarlos con una tela o microfibra. Y jamás rocíen perfume o lacas sobre las piedras para mantenerlas relucientes.
Con estos prácticos consejos, no habrá pretexto para que sus anillos luzcan siempre impecables. Podrán conservarlos por muchos años para que se vean como el día de la entrega del anillo de compromiso. Si antes del gran día notas que tu anillo se ve un poco opaco, no dudes en limpiarlo con anticipación para que tus manos brillen y destaquen al portar el ramo de novia durante la ceremonia. ¡Pero sin experimentos arriesgados!