10 tips para cuidar el busto y lucir espectacular en la boda

Recuerda que la belleza que proyectamos va de la mano de la seguridad que nos distingue, así que no dudes en elegir un vestido de novia que acentúe el busto o una sexy lencería cual cereza del pastel de boda tomando en cuenta la siguiente lista de consejos. Aplícalos y luce espectacular el día que lances tu ramo de novia y siempre. 

Tengas mucho o poco, el busto es un atributo del que cualquier mujer puede sacar provecho para verse increíble en innumerables ocasiones, pero como todo nuestro cuerpo, requiere un cuidado especial y sobre todo constante. Aunque parece increíble, casi todas las decisiones que se toman día a día influyen en su apariencia, desde la forma de pararse y sentarse, hasta la alimentación, por eso estos tips te servirán para lucirlo con toda la seguridad del mundo.

1. Cuida tu postura

Esto podría parecer muy obvio, pero es común que te encorves, a veces muchas más veces de las que llegas a imaginar. Ya sea por el peso del busto o simplemente porque te sientes incómoda cuando se nota mucho, también ocurre cuando usas por primera vez un escote y estás un poco intimidada.

La clave es que siempre, sin importar la circunstancia, vayas bien erguida y con la cabeza en alto. Lo esencial es estar segura de ti misma y valorar los atributos que finalmente te harán lucir especial en ese vestido de novia corte sirena que ya espera el gran día.

2. Usa el bra adecuado

Encontrar la talla correcta de brasier es crucial, pues usar la indicada te ahorrará gorditos laterales a la larga, así como dolores e incomodidades el día B. Para descubrirla, mide en pulgadas la circunferencia que forma tu cuerpo debajo del busto y súmale 5 pulgadas al resultado; al redondear la cifra buscando el número más alto, verás cuál es la indicada para ti.

Luego, para saber la copa, mide la circunferencia que forma tu espalda pasando por la punta de tus pezones; a esa cifra le restarás la primera. Tu copa ideal será la A si la diferencia es menor a 1; la B, si queda entre 1.5 y 2; la C, de 2.5 a 3, y así sucesivamente.

Tanto la tela como el broche de esta prenda también son importantes, pues resultará muy molesto andar todo el día con una textura que te deje marcas o lastime y además te cause altercados constantes. Claro que se vale pedir ayuda a un profesional para definir qué tipo de bra es el mejor para ti.

Si ya elegiste un vestido de novia corte princesa con escote corazón, no te esperes al gran día para estrenar el bra. Intenta usarlo con antelación, de esta forma podrás decidir si es el indicado.

3. Piel limpia y humectada

Los cuidados de higiene en esta zona, como en todo el cuerpo, se verán reflejados primeramente en la piel, por lo que se recomienda mantener humectado el busto con aceites de coco, almendras o argán, de preferencia al salir del baño cuando la piel continúa mojada y elástica. Luego de que sean totalmente absorbidos y, si aún necesitas secarte, hazlo a toquecitos con una toalla evitando dejar humedad en los pliegues y pezones. Este proceso puede ser el doble de productivo si al aplicar los humectantes realizas una autoexploración (¡muy importante!) desde la axila hasta la mama para descartar la existencia de alguna bolita extraña.

4. Mantén la firmeza

Como cualquier otra parte del cuerpo, con el tiempo, la actividad y los cuidados, el busto no lucirá como hace algunos años. Sin embargo, es posible combatir la gravedad hasta cierto punto y lucir un bonito escote.

Al bañarte todos los días trata de pasar el agua tibia o casi fría por encima del pecho para cuidar la elasticidad del músculo y la piel. Tampoco están demás las vitaminas fortalecedoras de tejidos que te pudiera recomendar un profesional. 

5. Acude con un especialista

La piel del pecho es una de las más sensibles y vulnerables a los cambios bruscos de temperatura, a las infecciones y a las reacciones del cuerpo por los hábitos que tengamos. Si te ocurre algo anormal en esa zona o simplemente quieres que tu piel brille tanto como las luces, considera consultar a un dermatólogo y así descubrir qué has estado haciendo bien o mal, para mejorarlo.

6. Lidia con las marcas permanentes

El sol, los cambios de peso, el mismo estrés y hasta la mala alimentación promueven la aparición de manchitas y estrías en el busto o marcas que te hagan sentir un poco insegura. La mayoría tendrá una solución muy práctica como emparejar el tono de tu piel con exfoliaciones amigables. Sin embargo, puede que haya cicatrices que podrás disimular con maquillaje o bien someter a un tratamiento dermatológico, siempre y cuando lo hagas suficiente tiempo antes de entregar las invitaciones de boda originales, más vale prevenir.

7. Experimenta con los accesorios

Un collar, gargantilla o dije pueden hacer lucir tu busto de manera totalmente diferente, por ello es importante saber combinar cada accesorio y sacarle el mayor provecho para disimular algunas zonas o dar más volumen a otras. Si utilizas algo muy ostentoso, las miradas se centrarán ahí, pero si eliges algo más sutil probablemente las desvíes a otro punto de tu cuerpo como tu rostro. Trata de cuidar el equilibrio entre el tamaño de tu pecho y el de tus accesorios para no generar impresiones ópticas poco favorecedoras.

8. Sé la mejor amiga del bloqueador solar

Para muchos, el uso de bloqueador solar diario y bajo estricta disciplina suele ser muy tedioso. Sin embargo, no imaginas la cantidad de problemas cutáneos que te ahorrarás a la larga, sobre todo en zonas tan sensibles como el pecho, sin mencionar que cuidarás el tono parejo te tu piel y su sensibilidad para recibir otros tratamientos si lo crees necesario. Además, tendrás la libertad para elegir el escote de tu vestido de novia moderno sin el temor de lucir un muestrario de tonalidades en tu piel.

9. A prueba de maternidad

Si casualmente acabas de tener a tu bebé, seguramente el asunto de los derrames de leche te tiene preocupada. Pero existen tantos protectores que puedes elegir entre capacidad de absorción, forma y materiales, todo lo que se adecúe a tus necesidades.

Una vez cubierto el tema, lo que sigue será elegir un escote que resulte cómodo, si es que el tamaño de tu busto aumentó, y que sea fácil de reacomodar en caso de que tengas que amamantar. Lo ajustado del vestido también juega un papel importante, así que cuida los excesos para que no te sientas ahogada con tu propio busto.

10. Escote según tipo de busto

No solo hay senos grandes y pequeños, están clasificados según su tamaño, forma y otras características. Ubicar los tuyos facilitará la tarea de seleccionar el escote más favorecedor para ti.

Si tienes senos redondos tal vez te siente bien un escote corazón, si son "este-oeste"  —conocidos por apuntar hacia el exterior y dejar un espacio entre ambos— un escote en V puede estilizar tu figura. En cambio, si son estilo "conjunto lateral" —cuando hay un amplio espacio entre los dos— quizás puedas sacar provecho a un tipo halter. También hay pechos atléticos o relajados que son más amigables con los escotes pronunciados, pues se mantienen en su lugar y no llaman demasiado la atención.

Ya que sabes cómo cuidar mejor tu busto, te invitamos a adoptar nuevos hábitos que no solo te ayuden a la hora de lucir tu vestido de novia de encaje, sino en cualquier ocasión, ¿quién sabe si pronto usarás un vestido de fiesta? Todo dependerá de la amiga que atrape tu ramo.