La boda de Luis y Mari: el comienzo del viaje más dulce

Aquí tienes un reportaje gráfico que, bajo la impecable lente de Joaquín, de Bulbo Fotografía, deja claro que en la boda de Luis y Mari reinó el amor. Pero ¿a que no imaginas todo lo que se esconde tras bambalinas? ¡Te invitamos a descubrirlo!

El radio pasillo no siempre tiene la razón

Hay quienes dicen rotundamente “no” al romance de oficina. Ya sabes, por aquello de los rumores que circulan en los pasillos. Sin embargo, Luis y Mari llegaron hasta el altar. Ellos trabajaban en la misma empresa, Mari estaba muy enfocada en sus metas personales, ejercicio, estudios, desarrollo profesional y ¡zas! Por azares del destino, conoció a Luis cuando tuvo que solicitar servicios en el área donde él estaba. Y amablemente la atendió.

"Je t'aime, veux-tu m'épouser?"

Tras ocho meses de noviazgo, es en París, la Capital del Amor, donde se alberga una idílica pedida de mano. Esta urbe fue el primer destino del viaje a Europa que Mari planeó junto a sus padres para festejar su cumpleaños. El tercer día de estancia, cuando visitaron la Torre Eiffel, entonces Luis encontró “el momento”. La oportunidad la adjudicó a una última foto.

Nervioso, Luis dirigió a Mari a la posición ideal y a sus padres les soltó sus verdaderas intenciones. Como era de esperar, se quedaron sin palabras y casi tan petrificados como las gárgolas que verían en la Catedral de Notre Dame. Finalmente, se acercó a ella, se arrodilló ¡y le pidió matrimonio! La respuesta ya la sabemos y, por supuesto, los padres de Mari tomaron fotos y video del gran acontecimiento, tal como Luis les solicitó.

Unidos por todo, menos la dieta

Mari es de Puebla y vegana de corazón. Luis, de Monterrey, 100% carnívoro, trabajador, perseverante, ingenioso y con un gran sentido del humor. Ambos mexicanos, pero, según cuentan los novios a Bodas.com.mx, las diferencias los unen porque basan su relación en el equilibrio, anteponiendo su felicidad en pareja. Para ellos, lo más divertido es su divergencia en las aficiones culturales, la gastronomía, etc. Disfrutan escuchar desde los Ángeles Azules y salsa, hasta Ramón Ayala y huapangos norteños. Por eso, durante su boda DJ Burbuja se encargó de hacer que el ritmo no decayera en ningún momento con temas de lo más variado. 

¡Vivan las tradiciones!

Siguiendo las tradiciones familiares, la abuelita de Luis confeccionó el artesanal vestido de novia corte princesa que Mari portó y que fue bordado todo a mano. Para ella fue un honor ser parte de eso y reconoce que fue un detalle sumamente especial. Oponiéndose a las insistencias de Luis, no dejó que la viera hasta su camino al altar, ya que era un deseo personal que quería cumplir. Los nervios de Luis se elevaban mientras los violinistas tocaban. El cortejo hacía su entrada y, cuando por fin Mari llegó hasta él, sintió cómo su mano temblaba. Algo que ella conserva vívidamente en su memoria.

La familia de Luis se trasladó desde Monterrey hasta Puebla para acompañarlos, quienes en suma de las amistades y familiares de Mari, compartieron sonrisas, bailes y fotos con la feliz pareja para llenar de magia la celebración. Uno de los momentos más emotivos fue el brindis que les dedicó el papá de Mari. Satisfecho y orgulloso de la mujer que hoy es, la entregó a su esposo escoltada de los mejores deseos para su nueva etapa.

Juegos y acertijos

Algo en lo que Mari quiso innovar y salirse de la tradición fue en el lanzamiento de su ramo de novia. ¡Porque no lo quiso aventar! La novia resguardó su bouquet, confeccionado por Detallarte, en una caja bien, bien cerrada. ¿Quién sería la afortunada en conseguir sacarlo y ganar el juego? ¡No te lo pierdas en la fotogalería!

Los recién casados, que disfrutaron muchísimo de este día que tanto tiempo llevaban esperando y que con tanto esmero les organizó Casamento Fest, se decantaron por la riqueza cultural y gastronómica de Tailandia para su luna de miel. Desvelados, cansados y más que dispuestos a disfrutar su primer viaje como esposos, partieron al día siguiente de la boda. ¡Enhorabuena, Luis y Mari!