La boda de Manuel y Mary: equilibrio entre intimidad y romanticismo
Una celebración íntima con sus familiares y amigos más allegados fue la forma en la que Manuel y Mary decidieron darse el “sí, quiero”. Tecate se vistió de fiesta para celebrar el amor de esta pareja, ¿listos para conocer los detalles?
Manuel y Mary decidieron unir sus vidas en una íntima ceremonia en la que sobraron las palabras porque las emociones y el ambiente ¡lo dijeron todo! Disfruten su enlace con las imágenes capturadas por Fidel Virgen Fotografía, ¿listos para suspirar?
La historia de Manuel y Mary comienza hace poco más de cinco años, cuando las vidas de estos dos enamorados originarios de San Luis Río Colorado, Sonora, se cruzaron por primera vez para no separarse nunca. El destino confabuló para que se unieran, ya que, aunque se conocían por amigos en común, Mary estuvo a punto de cancelar su primera cita. Sin embargo, no tardaron en descubrir que se complementaban y no podían vivir el uno sin el otro.
La confianza y el respeto son los pilares de su relación y ambos son sinónimo de diversión, así que los momentos juntos son irreemplazables. Disfrutan cada día y son conscientes que con buen humor y risas todo es mejor.
Una pedida inesperada ¡para la familia!
Cuando llevaban tres años de noviazgo, Manuel y Mary comenzaron a conversar sobre formalizar su relación y casarse. Ambos lo tenían muy claro, así que decidieron sorprender a sus familias con la pedida de mano y organizaron una comida familiar en la que los invitados no tenían idea de lo que iban a presenciar.
En medio de la convivencia, apareció Manuel con un hermoso ramo de flores. Se puso frente a Mary y comenzó a expresar unos hermosos pensamientos sobre ella dirigiéndose a sus suegros. De pronto, se arrodilló e hizo la emocionante pregunta: "¿Te quieres casar conmigo?" Fue un momento muy especial porque, aunque Mary y Manuel sabían lo que iba a suceder, ver a sus familias tan conmovidas y alegres por su compromiso, lo convirtió en algo único.
Pareja clásica y romántica
Mary se veía radiante en un vestido de novia de corte A con detalles de encaje. Algo curioso del vestido es que lo eligió a última hora por un imprevisto que tuvo con el original. Afortunadamente, le encantó en cuanto se lo midió porque parecía hecho especialmente para ella.
El maquillaje resaltó sus expresivos ojos y para el cabello optó por un peinado recogido que adornó con un brillante y discreto tocado. Unos elegantes aretes de perla y un pequeño brazalete completaron su delicado estilismo.
Manuel esperó a Mary en el altar con un traje gris claro de corte clásico con una camisa blanca y corbata a cuadros en tonos azules. Usó el cabello peinado de lado y barba bien recortada para enmarcar la sonrisa que no se le borró en ningún instante. Su boutonniere era de una flor a juego con las del ramo de novia natural de Mary.
Celebración íntima y emotiva
El lugar en el que se llevaron a cabo tanto la ceremonia como la recepción fue el Rancho Tecate Resort. Un espacio con mucho encanto que fue el escenario perfecto para la boda íntima y romántica que Mary y Manuel anhelaban.
La ceremonia fue al aire libre entrada la tarde. El paisaje fue la mejor decoración junto con las flores y los pétalos que guiaban el camino de los novios al altar. La madera y las flores en tonos rosas y blancos fueron los elementos perfectos para crear una atmósfera en la que solo se respiraba romanticismo. Sin duda, la ceremonia fue uno de los momentos más emotivos e inolvidables del evento. Las sonrisas de los novios lo decían todo y, por supuesto, las lágrimas que se les escaparon a alguno de los invitados, ¡eran inevitables!
Para la decoración de la recepción mantuvieron el tono minimalista y romántico. Dos barriles con las iniciales de madera de los novios, algunas velas y una linda foto de la pareja en una cascada, daban la bienvenida a los invitados. De las mesas resaltaban velas con bases de cristal de diferentes formas y tamaños, así como unos vistosos centros de mesa de rosas en tonos blancos y rosados.
Unos novios muy atentos
El baile no faltó en toda la noche y, por si alguien se cansaba, los novios tenían preparadas sandalias de regalo que fueron unos ideales recuerdos para boda que las mujeres especialmente agradecieron mucho.
Los sabores también conquistaron paladres y una mención especial la tuvo la mesa de dulces para boda, que incluía variadas delicias y postres miniatura como tartas, donas, cupcakes y brownies. Además, un hermoso pastel de fondant para boda de tres pisos muy acorde con toda la decoración resaltaba en la mesa.
Aunque los novios confesaron que tuvieron muchos imprevistos, nadie se percató de ninguno de ellos. Los familiares y amigos se sintieron muy consentidos y celebraron con mucha ilusión la unión de Mary y Manuel. Ellos deseaban una boda de ambiente romántico y fue justo el resultado que obtuvieron.
Los compromisos laborales les han complicado planear su luna de miel. Esto no ha sido ningún impedimento para que Manuel y Mary disfruten su amor todos los días, ¡que dure para siempre!