Luna de miel en Islandia: amor en el país del hielo y el fuego

Durante meses han planeado una celebración nupcial única. Habrán elegido cuidadosamente las invitaciones de boda y todos los detalles con estilos y colores fieles al tema de su recepción nupcial. Incluso en sus invitados han dejado sembrada la emoción de escoger los mejores vestidos de fiesta para lucir impecables en esta experiencia, que será inolvidable para ustedes y para ellos. Entre todos los preparativos, encuentren el momento de definir el destino de luna de miel que arrebatará sus pensamientos de amor, pero que también tendrá chispas de adrenalina y encanto. Descubran si Islandia es ese lugar; si es así, ¡hagan sus reservas ya, que el tiempo vuela!

Hay muchas razones para voltear a ver a Islandia como uno de los destinos lunamieleros más románticos. Sus panoramas de naturaleza impactante, la relación entre precio y calidad, así como la tranquilidad de la que presumen sus habitantes, lo convierten en uno de los favoritos de los viajeros en los últimos años. Si tienen la mirada puesta en este lugar o simplemente están abiertos a nuevos destinos, aquí encontrarán más destinos y buenos pretextos para ir.

Reikiavik

La capital de Islandia cautiva a las parejas de recién casados con sus más de 15 piscinas geotérmicas y sus vistas a la laguna y a las montañas, propias de un cuento nórdico. Déjense sorprender también por su altísima iglesia luterana de Hallgrímur y por el Rúntur, una ruta nocturna por sus bares. Eso sí, dadas las temperaturas, será buena idea empacar un vestido de noche con manga, un abrigo impenetrable y familiarizarse aún más con la música de Björk y otros muchos artistas islandeses.

Como está enclavada en un magnífico escenario natural, también podrán contratar un tour para hacer avistamiento de ballenas. Las más comunes en la región de Reikiavik son las jorobadas, pero con un poco de suerte es posible ver orcas, ballenas de aleta y hasta ballenas azules. ¿Se imaginan este espectáculo?

Kirkjufell

No se pierdan la oportunidad de hacer una excursión a lomos de un caballo islandés por los campos de lava que se encuentran cerca de la capital o en las inmediaciones de la montaña Kirkjufell, ubicada a poco más de dos horas en carretera de Reikiavik. No los verán en otro país del mundo porque la importación de otras especies de equinos está prohibida para proteger y preservar su raza.

Laguna Azul

Este balneario de agua geotermal es una mezcla única de elementos a los que se les atribuyen beneficios corporales. Sus componentes, que son algas azules, sales y minerales y sílice, generan descanso y relajación a quienes gozan de un baño en la Laguna Azul, el cual tiene un gran efecto nutritivo en la piel.

Es un spa natural en cuyo paisaje contrastan el azul blanquecino de sus aguas con los campos negros impregnados de lava y cubiertos de musgo. Ideal para olvidarse de todo el estrés que generó la búsqueda del vestido de novia corte sirena y de los preparativos en general, ¿qué opinan?

Círculo de Oro

Esta ruta es una de las más solicitadas por los turistas. El recorrido es cercano de la capital y un día es suficiente para hacerlo. En el trayecto se conocen diversos puntos, entre los que destaca el Parque Nacional de Thingvellir.

Allí pueden acercarse a la formación de Silfra, la fisura que separa las placas tectónicas norteamericana y euroasiática. La brecha se inunda de una particular belleza y se suma a las cuevas, cascadas, los géiseres y cráteres de la región.

Aunque la separación es perfectamente visible desde la superficie, se recomienda recorrer la grieta practicando snorkel en sus aguas turquesas y cristalinas. Así que olviden el vestido de fiesta corto y mejor renten un traje de neopreno.

Valle Thorsmork

No, no leyeron mal, este valle recibió el nombre de Thor, el Dios del Trueno y así, con ese mismo ímpetu y fortaleza, sus paisajes naturales los recibirán para practicar trekking. Será una aventura romántica, además de divertida, que les permitirá descubrir rincones naturales aún poco explorados. Volcanes, glaciares colgantes y ríos, así como fauna y flora ajenas a sus ojos los cautivarán. Traten de que su ruta pase por detrás de la impresionante cascada Seljalandsfoss, será una experiencia única.

Lago Mývatn

Este lago cerca de la ciudad de Akureyri no puede ocultar su origen volcánico. Se formó hace más de 2 mil años y aún tiene actividad geotérmica. Al recorrerlo, podrán ver los cráteres de Skútustaðagígar, así como un sitio llamado Dimmuborgir, que está invadido por sorprendentes formaciones rocosas y un paisaje surrealista integrado por cuevas y figuras caprichosas, como la escultura de hielo natural de Lofthellir, la más larga dentro de una cueva.

Laguna glaciar de Jökulsárlón

No importa si prefieren contemplar la laguna desde la orilla para intercambiar pensamientos de amor cortos con brillantes icebergs como testigos o si se pasean en una lancha neumática para ver de cerca cómo las focas se divierten entre los huecos que deja el hielo. Esta laguna les arrebatará suspiros de cualquier forma.

Si quieren ver un espectáculo natural sin igual, en esa misma zona pueden visitar la Playa Diamante, donde el contraste del blanco de los icebergs con lo negro de la arena es impresionante.

¿Y las auroras boreales?

Inspiración de artistas, las auroras boreales suelen ser impredecibles. Y aunque tienen una base científica, que se produzcan depende de que se den unas condiciones ambientales muy específicas. Según la Agencia Espacial Europea, se forman cuando las partículas suspendidas en la atmósfera tienen carga eléctrica y chocan con el campo magnético de la Tierra. Sin duda, quienes presencian este fenómeno siempre quedan impactados ante su belleza.

Si viajan a Islandia en otoño o primavera, tendrán buena probabilidad de ver auroras boreales sin pasar demasiado frío. Dado que el invierno es la estación con las noches más largas, también en esa época hay muchas auroras boreales, pero las bajísimas temperaturas disuaden a muchos de los viajeros.

La mejor hora para verlas es en torno a la medianoche y cuando el cielo esté suficientemente despejado, ya que las auroras boreales son un fenómeno que se da a una altitud por encima de las nubes. Tal vez no llevarán un look tan elegante como cuando partieron el pastel de fondant para boda, pero el momento será igual de romántico. 

¿Qué han decidido? Compartan aquí si piensan que este destino llenará sus expectativas o si seguirán buscando qué tipo de recuerdos para boda entregarán a los presentes. Si Islandia es uno de los países con más posibilidades para su luna de miel, pueden estar más cerca de hacerlo realidad si incluyen el paquete del viaje de novios en la mesa de regalos. También pueden comunicar en una tarjeta añadida a las invitaciones de boda que les haría mucha ilusión reemplazar los clásicos regalos por aportaciones para la luna de miel. ¡Seguro que sus familiares y amigos los apoyan encantados!