8 motivos que te harán desear una luna de miel en Maldivas

Aunque aún están a unos meses de la boda, la espera pasa rápido. Pero entre la revisión de la lista de invitados, el diseño de las invitaciones de boda e ir a la boutique para empezar a probarte vestidos de novia, la luna de miel no se va a planear sola. Y menos, si todavía no escogen el destino. ¿Conocen Maldivas?

Hay que reconocerlo: en la organización de la boda, habrá días en los que desearán que la tierra los trague y los aviente por algún rincón paradisiaco. ¿Y cómo imaginan ese paraíso? Tal vez conformado por mil 200 islas de coral, con arena blanca, arrecifes coloridos, aguas turquesas y palmeras tropicales… Resulta que existe y pueden conocerlo. Este hermoso lugar, ubicado en el Océano Indico, les promete descanso y relajación al máximo. Hoy viajamos a Maldivas.

1. El entorno perfecto para un descanso

Después de elegir el color de los vestidos de fiesta cortos para las damas de honor y de las largas noches en vela para hallar recuerdos para boda útiles, se merecen un descanso en hamaca frente al mar. Aterrizados en Maldivas, sus sentidos se suavizarán, en especial el tacto. La suave arena les ofrecerá paz, mientras su olfato se deleita con el aroma natural de la flora. Disfruten de las espectaculares vistas y déjense arrullar por el murmullo del vaivén de las olas. 

2. Sus profundidades marinas 

Tortugas, mantarrayas, tiburones, ballenas y horizontes coloridos se convierten en un acuario natural para los amantes del snorkel y el buceo. Las aguas cristalinas del Océano Indico son fabulosas. Las mejores islas para poner en práctica y adentrarse al mundo marino son Kuramathi o Maafushivaru, donde también podrán poner en práctica el yoga y taichí.

¡Consejo! Morirás por llevar los mejores vestidos de fiesta para playa, pero será mejor que se protejan de los rayos del sol. Utilicen protector solar, sombrero, lentes para el sol y beban constantemente agua para mantenerse hidratados. 

3. Caminatas para los sentidos en Malé

Vaguen unas horas por las calles isleñas de la capital de Maldivas, contemplen el paisaje y piérdanse en las calles estrechas. Por la mañana, refrésquense con un coco o visiten alguno de sus comercios locales. O vayan a comer pescado fresco en busca de las embarcaciones pesqueras llamadas “dhonis”, visiten el Museo Nacional de Malé o acérquense a conocer las diferentes mezquitas. ¡Conozcan el paraíso más allá de los resorts vacacionales!

4. La gastronomía Maldiva

Es momento de sacar de la maleta el vestido de coctel y sumergirse al mundo marítimo. Conozcan el primer restaurante submarino del mundo: se llama Ithaa, está en Maldivas y es todo un sueño. Además, deberán probar los platillos tradiciones: el atún es básico.

El rihaakuro es un platillo tradicional de pasta con atún; la ensalada mashuni se prepara también con atún, coco, limón, cebolla y chiles y la guardia es una sopa de atún cocido con pimientos y arroz sazonado con especias. Por otra parte, encontrarán diferentes frutos tropicales, pero por nada olviden degustar la bebida nacional: la raa es una bebida alcohólica que tiene su base en el jugo de la palma y tiene el nombre de uno de los atolones del archipiélago. 

5. Noche bajo las estrellas

Si se trata de consentirse, no existirá nada más romántico que dormir bajo la luz de las estrellas con su pareja. La isla Vaadhoo de por sí ya es hermosa, pero su belleza se multiplica al caer la noche. El espectáculo de bioluminiscencia (fenómeno por el cual algunos organismos emiten luz) a las orillas del mar transforma a la isla en uno de los destinos más mágicos y románticos. Sin duda, una gala natural para sacar a ventilar los más románticos pensamientos de amor: una de las mejores experiencias que se pueden vivir. 

6. El mejor lugar para ver la puesta de sol 

Por ser el país más plano del mundo, Islas Maldivas tiene el reconocimiento de ser el mejor lugar para ver una puesta de sol. Ver su esplendor reflejarse sobre el mar es un espectáculo mágico. Los atardeceres y amaneceres harán de la luna de miel un viaje insólito.

¡Consejo! Aprecien el atardecer desde una moto acuática. Tomen sus trajes de baño, chalecos salvavidas, lentes de sol; abrácense y disfruten el impulso de olas y de la vista.

7. ¿Alguna vez viajaron en hidroavión?

¿No taxis? ¿No autobuses? ¡Para nada! Al llegar al aeropuerto, los trasladarán en un hidroavión, una experiencia autentica. Este transporte los hará disfrutar la fabulosa vista desde lo más alto. Quedarán enamorados de las vistas panorámicas y coloridas. ¡No olviden tomar fotografías para que, al llegar de la luna de miel, puedan compartirlas en Wedshoots con sus invitados! 

8. Una isla, un encanto

Tomados de la mano, descubran más islas vírgenes como Reethi Raat o Fuamulaku, que les ofrece una de las playas más espectaculares. También la isla Kandholhu es preciosa. Llegarán a sentirse un poco náufragos, ¡pero nada de qué preocuparse! Nadar con tortugas ayudará. Posibilidades hay miles, encuentren el mejor día, preparen un picnic y gocen de las islas más cotizadas y hermosas del mundo.

¿Les agrada? Entonces dialoguen sobre las posibilidades de irse de luna de miel a Islas Maldivas. Elegir el sabor del pastel de boda y decidir si alguno de los tres que llevarás será un ramo de novia artificial puede esperar. Como todos los viajes largos en destinos remotos, la planeación y el tiempo para organizarse son fundamentales si no quieren acabar reservando a última hora a precio de riñón. ¿Hacemos las maletas?