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Bodas

Maritza y Adrián viven el mejor día de sus vidas

Cuando Maritza menos lo esperaba, Adrián llegó a su vida; aunque no estaba segura de aceptarlo, su insistencia la convenció de tener al menos una cita. Nunca imaginó que ese encuentro bastaría para empezar a enamorarse y no separarse de él jamás.

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Adrian & Maritza

Un gran amor atesora momentos inolvidables que lo nutren y hacen crecer, por eso es que Maritza y Adrián recuerdan con emoción el inicio de su relación marcado por la primera cita, momento en el que decidieron no separarse jamás.

Aunque Adrián tuvo que insistir para que la bella joven saliera con él, supo perseverar y a la tercera invitación –la tercera es la vencida- obtuvo la ansiada respuesta. Así, en el verano de 2008 comenzó una relación que han sabido complementar con el amor, el respeto y la confianza.

Ocho años después, en Jamaica, Maritza recibió una gran sorpresa. Estaban de visita para celebrar el cumpleaños de Adrián, así que nunca imaginó que durante una memorable cena le propondría matrimonio en medio del mar, entre pétalos de rosa y velas.

El gran día

Los momentos mágicos en esta bella relación no dejaron de ocurrir: llegado el día de su enlace matrimonial, la pareja vivió un día maravilloso. Su boda fue perfecta, tal como la imaginaron. Contaron con el apoyo de Celestial Eventos Religiosos para que no se escapara ningún detalle y todo fuera perfecto. 

Oriundos de Mérida, Yucatán, los jóvenes honraron sus raíces y eligieron una sede sin igual, la Hacienda San Diego Cutz, a donde llegaron familiares y amigos cercanos para ser testigos de su unión.

Maritza lució más hermosa que nunca con un vestido muy sofisticado de corte sirena y escote Reina Ana que estilizaron su silueta. Era un día muy especial, así que usó un par de prendas de su abuela materna con gran valor sentimental: unos aretes con diamantes y zafiros, y argollas que hacían juego con sus anillos de compromiso. Su madre la ayudó a vestirse, y antes de salir hacia la iglesia, le dio la bendición.

Andrés eligió un traje tipo frac con chaleco y corbata de lazo blancos; su padre lo auxilió mientras se vestía para asegurarse de que estuviera presentable para uno de los mejores días de su vida. 16 damas acompañaron a la pareja en esta grata experiencia; todas lucieron vestidos iguales en violeta, color que destacó en los adornos y detalles de la fiesta.

Ceremonia de amor

Uno de los momentos más emotivos fue la ceremonia religiosa; todos los presentes esperaron con ansias la entrada de Maritza al templo. Conmovida por las palabras de su padre al entregarla ante el altar, la joven no pudo evitar que sus ojos se llenaran de lágrimas de agradecimiento y felicidad.

Adrián la esperó atento con una sonrisa que no se borró de su rostro; con una profunda y tierna mirada siguió sus pasos mientras se acercaba: fue exactamente como ella lo había soñado, el momento más especial.

Mientras ambos escuchaban el mensaje del sacerdote, de vez en cuando el novio volteaba con sus padres como si no pudiera creer que su sueño de amor se estaba haciendo realidad.

Al salir del templo, las damas ya esperaban a los esposos para cubrirlos de pétalos de rosas color lila.

Especial celebración

La Hacienda San Diego Cutz fue el escenario apropiado para que este evento luciera en toda la extensión de la palabra. Entre sus altos árboles e históricos portales, los esposos se pasearon felices de haber sellado su amor.

Por ser parte de este gran acontecimiento, los invitados fueron convidados a una cena en la que destacó el buen gusto y la elegancia. Lindas flores en blanco y tonos violeta y púrpura adornaron las mesas.

El festejo se sintió con mayor intensidad después de que los novios abrieran la pista con su primer baile, ya que la música y el buen ambiente reinaron hasta lograr que todos los presentes se divirtieran.

Hubo momentos en que las risas estallaron, pues según las canciones, a los novios les tocó usar vistosos sombreros, mientras que los caballeros no se escaparon de usar mandiles con mensajes como: “Yo no soy mandilón, soy obediente”.

Al llegar el momento en que la novia arrojara el ramo, nadie se esperó que lo atrapara una pequeña, así que entre risas la novia pidió que se repitiera para que llegara a las manos indicadas. Después tocó el turno a los caballeros, quienes compitieron por atrapar la liga de la novia, así que se colocaron estratégicamente detrás de Adrián. El suertudo fue levantado en hombros por su osadía.

Sin dudarlo, Maritza asegura que ese fue el mejor día de sus vidas; como prueba está la galería de Cinema HD.

Nuevo comienzo

Con una gran alegría de haberla pasado muy bien, los novios se prepararon para salir de luna de miel. Entusiasmados por esta nueva etapa, emprendieron el viaje hacia Europa, donde visitaron ciudades como Roma, Venecia, París, Praga, Viena, Zermatt y Brujas.

Adrián, con un envidiable sentido del humor, ha logrado que todos los días de Maritza sean divertidos y relajados, pues nunca faltan las bromas y las risas, como tampoco faltan los detalles que destacan lo importante que es uno en la vida del otro.

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