Pétalos para la salida de la iglesia: una alternativa colorida

Muchos recintos religiosos restringieron el uso de arroz para lanzarlo a los novios a la salida de su ceremonia. El motivo principal es la cantidad de basura que generan y la dificultad para limpiarlo entre una boda y otra. Por ello se ha optado por alternativas menos “agresivas” como las burbujas y los pétalos de flores, que, además, aportan color y efectos distintos para las fotos. 

A diferencia del arroz, estos últimos caen con menos velocidad y no llegan a lastimar a los novios si algún invitado se emociona de más y los lanza con fuerza. Si quieren la experiencia que estos pueden brindarles en su gran día, aquí encontrarán inspiración y algunos aspectos que no pueden dejar pasar. 

Tipo y color de pétalos 

Lo primero que deben elegir es el tipo de pétalos que quieren y los colores de los mismos. Los más tradicionales son los de rosas rojas (románticos y elegantes), pero la realidad es que pueden utilizar los que mejor se adapten a su estilo. 

Eso sí, traten de dejar afuera aquellos demasiado pequeños, pues necesitarían muchos más para ser apreciados al momento de lanzarlos y además serían más difíciles de recoger, el mismo problema que sucede con el arroz. Los pétalos de jacaranda son excelentes opciones; bellísimos por su forma y color. Seguro los han visto en algunos parques adornando el piso. 

Otra alternativa son las hojas de olivo, no son pétalos, pero cumplen la misma función y le dan un toque fresco al momento. Y, si prefieren algo más económico, también existen los pétalos artificiales, regularmente de papel o tela. Si se van por este camino, solo les recomendamos buscar unos que sean amigables con el medio ambiente. 

Recipientes para entregarlos 

Lo más común para entregar pétalos de flores a los invitados son los conos o sobres de papel, una opción económica, práctica, linda y versátil. Por ejemplo, si se casan en exterior, en la playa, en un jardín o en el bosque, unos conos o cajitas de papel kraft lucirán muy bien. Si lo suyo es más una boda temática como vintage o campestre, pueden utilizar hojas de libros viejos y hojas de maíz o plátano para darle un toque orgánico. Si la temática va con lo boho, el yute es para ustedes y también pueden hacerse bolsitas sencillas. 

La variedad de papeles para fabricar estos contenedores es infinita, hay muchos grosores, texturas y, sobre todo, colores. Así es que consulten con su proveedor o vayan a una papelería grande donde les permitan ver de cerca todas las opciones para que elijan la que mejor vaya con su boda. Hacerlos tampoco es nada complicado, pero traten de tener ayuda de algunos padrinos o damas para que todo sea mucho más ágil. 

Personalización

Si son amantes de los detalles, no dejen pasar la oportunidad de personalizar los recipientes para sus pétalos de flores. La cantidad de opciones es la misma: impresiones en serigrafía, sellos tradicionales, sellos de lacre, grabado, stickers, foil… sea cual sea la técnica, la idea es imprimir el logo de su boda (si es que tienen uno), sus iniciales, la fecha de la boda, un corazón o toque distintivo. 

También se vale añadir elementos decorativos con lazos, encaje o más de un tipo de papel, como se utiliza en los ramos de flores. 

Presentación 

Lo que sigue es planear la presentación y el medio de traslado para sus pétalos. Lo más común es llevarlos en canastas muy bien acomodadas, pero según su temática y estilo, pueden montarlos en unas rejas o baúles a la entrada del lugar de la ceremonia. Para bodas en exterior también pueden colgarse en cada silla. 

El consejo general es tenerlos preparados con un día de anticipación o, si son naturales, ese mismo día muy temprano, así evitarán que se maltraten y salgan volando antes de tiempo. 

¿En qué momento se reparten?

Una vez que hayan cubierto todo lo anterior, deben saber que la coordinación de los invitados para este momento suele ser complicada. Muchos recomiendan que se repartan los pétalos cuando la ceremonia haya terminado y los novios estén en la sesión de fotos frente al altar, pero otros prefieren que sea haga unos minutos antes del final. 

La realidad es que deben estar preparados para que algunos invitados, por despistados, conserven sus pétalos y no alcancen a lanzarlos. Sin embargo, con las bodas en exterior este no siempre es un problema, pues se pueden colgar en sus sillas y desde que lleguen, tendrán en cuenta que deben prepararse para la salida triunfal. 

Ahora es su turno de elegir los pétalos más lindos para la lluvia de buenos deseos que les espera tras darse el sí frente al altar.

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