¿Se pasaron del presupuesto para la boda? 8 remedios para reajustarse
¡Que no cunda el pánico! Si se les ha ido un poquito la mano con sus compras para la boda, aquí tienen ocho tips que los ayudarán a volver al buen camino. Disfruten al máximo de su boda y los preparativos con estos planes para cualquier emergencia.
Si pensaban que hacer su presupuesto para la boda iba a ser lo más complicado, prepárense, porque ahora tienen que seguirlo. Es muy difícil resistirse. En la búsqueda de trajes y vestidos de novia, el menú, la coctelería, la iluminación, la decoración floral, los centros de mesa para boda y todos los detalles encontrarán grandes sorpresas que querrán para su celebración. Pero no todas serán una ganga. Después de todo, quién no quiere darse un capricho para el coctel de bienvenida o el pastel de boda. Si cayeron en alguna o en todas las tentaciones y rebasaron su presupuesto inicial, ¡no se angustien! Aquí tienen algunos tips para recobrar el control.
1. Listar los gastos pendientes
Si el desajuste se debe a una falta de previsión, (casi) nunca es tarde para remediarlo. Una de las primeras cosas que deben hacer al comienzo de la planeación es una lista de las cosas que necesiten para su boda, asignándoles una cantidad tentativa o real que les han cotizado, que han gastado o que prevén gastar.
Ordenen los rubros por el monto o por la fecha en la que hicieron o harán el gasto. Deben tomar en cuenta de cuánto dinero disponen para saber qué gastos pueden realizar de inmediato y cuáles deberán aplazar para un momento más propicio, según su calendario de ahorro e ingresos. ¿Aún no conocen la herramienta del presupuestador de bodas de nuestro portal? Les evitará más de un dolor de cabeza.
2. Prioridades claras
Si ya están adelantados en sus adquisiciones y contrataciones y sienten que su presupuesto está en apuros, es hora de reformular. Den prioridad a los artículos más costosos o los más necesarios; después, a los que más les gustaría tener y, por último, a las cosas que no son imprescindibles. Por ejemplo, el menú y la locación pueden ser muy costosos, pero son lo primero que deben contemplar. A partir de ahí, pueden sumar o restar a los otros elementos.
La misma operación se puede aplicar a la lista de invitados. Si no podrán permitirse una boda con muchos invitados, pongan filtros: asegúrense de que aquellos con los que mantienen una relación más cercana tendrán su sitio y eviten invitar por compromiso. Son ajustes relativamente sencillos que pueden salvarlos en una emergencia.
3. Hacer búsquedas exhaustivas
De la mano con estos ajustes está buscar precios accesibles. Si ya compraron sus recuerdos para boda originales o sus decoraciones y sienten que se están pasando del presupuesto, realicen una nueva investigación para los productos y servicios faltantes y comparen minuciosamente la relación entre calidad y precio.
Deben ser estrictos y realistas: por más que quieran los mejores arreglos de mesa para boda, en algunos casos será necesario ser flexible y buscar alternativas algo más económicas. En el caso de que estén en una fase muy inicial y de que, cuando apenas empiezan a buscar salón, se den cuenta de que su presupuesto no alcanzará para el tipo de boda que quieren, quizás puedan recorrer un poco la fecha de su boda.
4. Negociaciones efectivas
Recuerden que las relaciones con sus proveedores siempre deben ser profesionales para llegar a acuerdos que sean justos para ambas partes. Por ejemplo, pueden preguntar por paquetes especiales que les permitan economizar. Si sus proveedores proporcionan varios productos, también pueden buscar precios preferenciales, descuentos o facilidades de pago. Quizás, por ejemplo, consigan un descuento con el proveedor de arreglos florales para bodas si además del salón y el ramo de novia, le confían la ambientación de la ceremonia.
En algunos casos, quizás puedan intercambiar un tipo de servicio por otro: por ejemplo, cambiar el menú por una opción con menos platillos o por un bufete o cambiar el postre por una mesa de dulces para boda o solo ofrecer pastel. ¡Platiquen y pidan opciones adaptadas a su bolsillo!
5. Detalles económicos con mucho estilo
Seguro han visto y admirado las bodas que tienen diseños extraordinarios. La forma más rápida y fácil de conseguir una ambientación totalmente personalizada es comprando elementos creados específicamente para la ocasión. Pero, si necesitan economizar y hacer ajustes de último momento en su presupuesto, pueden comprar o rentar artículos básicos y personalizarlos ustedes mismos.
¡Atención! No todos tienen la misma destreza con las manualidades ni todos se desenvuelven igual de bien con los tutoriales DIY. Pero hay detalles fáciles de asumir para la inmensa mayoría de parejas. Por ejemplo,ustedes mismos pueden escribir a mano los nombres de sus invitados en los sobres de las invitaciones para boda originales que les entregarán. O si repartirán pétalos y arroz par el final de la ceremonia, se pueden ocupar de los conos de papel donde los repartirán: economizarán sin sacrificar su estilo.
6. El vestuario, a revisión
Una de las tentaciones más grandes es el outfit nupcial: ¿quién no sueña con un espectacular vestido de novia de encaje de última colección? Si no se lo pueden permitir, concéntrense en el auténtico significado de su boda: compartir su amor y su felicidad con todos sus seres queridos. Por eso, puede valer la pena sacrificar una parte del presupuesto preparado para el outfit.
Es importante que conozcan cuáles son las firmas de vestidos de novia de todos los precios y cuáles pueden encontrar en boutiques cercanas a su ubicación. Asimismo, también pueden buscar en los directorios de tiendas de novia cuáles disponen de outlet con modelos del año anterior o servicio de renta de vestidos. También pueden investigar opciones para vender el vestido o el traje después de la boda y recuperar una parte de ese desembolso.
7. ¿Posponer la luna de miel?
Otra alternativa es recortar el presupuesto de la luna de miel o disponer de él completamente para utilizarlo en la boda. No es forzoso que la luna de miel se celebre exactamente después de la boda. Pueden posponerla un poco y ahorrar después de casarse para realizar su primer viaje de casados cuando su situación financiera lo soporte mejor. Entre tanto, su boda contará con ingresos extra.
Si por nada del mundo se plantean aplazar el viaje de novios, recurran a destinos cercanos o periodos más cortos. También pueden pedir cotizaciones a una agencia de viajes profesional y estudiar si sería viable pagar el viaje a crédito sin comprometer su economía familiar.
8. Un poquito de ayuda
Si la situación económica es difícil, es momento de llamar a los mejores aliados. La familia y sus amigos puede ayudarles con donaciones u obsequios. Seguro más de uno de sus seres queridos se ofrecerá gustoso a ayudarles si les explican su situación: ¡más de uno querrá ser padrino o madrina!
Si en un inicio pensaron en costear los vestidos de fiesta largos de las damas y los complementos de los best men, pero resultó dificultarse este gasto, conversen con ellos para ver quiénes estarían dispuestos a asumir una parte de esta partida. O, si necesitan recuperarse de todos los gastos, pueden pedir a los invitados que cambien sus obsequios por regalos en efectivo. vestuario damas y pajes
Recuerden que, desde las invitaciones de boda hasta la iluminación, cada parte de la boda tiene una función importante en la celebración. Por eso, con independencia de que hayan escogido unos centros de mesa económicos y originales o se hayan gastado unos cuantos miles de pesos, disfruten de la ceremonia y el festejo junto a sus seres queridos y compartan con ellos lo mejor de lo mejor. ¡Las emociones son gratis!