Navidad y Fin de Año saludables: 9 tips para cuidarse de los excesos
Diciembre y sus platillos de temporada hacen que muchas parejas caigan en la tentación de dejar en el olvido la dieta, el ejercicio y los buenos hábitos. Si no quieren perder la forma que tanto esfuerzo les ha llevado mantener, sigan estos tips.
Nada como cerrar el año con broche de oro intercambiando pensamientos de amor entre sus seres queridos y orgullosos de llegar a estas fiestas con una salud envidiable. Para que la época navideña no los deje con algunos kilitos de más que los obliguen a hacerle modificaciones al traje y al vestido de novia, sigan estas sencillas recomendaciones. Traten de poner moderación para no excederse en estas fechas, porque después faltan todavía la prueba del menú, la degustación de la mesa de dulces para boda y las probaditas a más de un pastel nupcial. ¡A cuidarse!
1. Cuiden la alimentación cuando no haya reuniones
Por más que lleven una vida social muy activa, no todos los días de diciembre se tienen posadas. Y eso es perfecto porque les permite continuar con su rutina de alimentación saludable la mayor parte del tiempo. ¿Qué significa? Que si de lunes a viernes no tienen en su agenda ninguna reunión, entonces esos días debe predominar una dieta baja en grasa y sales, que incluya frutas, verduras y cereales. Esto les permitirá darse un gustito cuando sea necesario, pero manteniendo a raya las medidas de su vestido de novia corte sirena o del pantalón del traje.
2. Prueben de todo, pero no se llenen
Cuidarse no quiere decir que se queden con las ganas de comer los exquisitos platillos que se ofrecen en diciembre, como los buñuelos y el ponche. Cuidarse quiere decir comer con moderación, probar bocados y quedar satisfechos sin sentir malestar. Además, si el resto de los días se cuidan, ¡no hay nada que temer!
3. Sustitutos más ligeros
Usen leche descremada o light en sus recetas en vez de su versión entera. Aderecen sus postres con miel o azúcar mascabado en lugar de con azúcares refinados. Descubran que las carnes frías bajas en sal y los productos sin azúcares añadidos pueden ser igual de sabrosos. No es necesario que se priven o se restrinjan demasiado el menú de estas fechas; encontrar sustitutos más ligeros puede ser de gran ayuda.
Las brochetas de fruta pueden ser suculentas alternativas para el postre. Incluso bañadas en chocolate negro o acompañadas de una nieve artesanal se convertirán en un snack mucho más saludable que la mayoría de los panes dulces, que suelen estar muy procesados o llevar excesiva mantequilla. ¿Y si en vez de acompañar las carnes y los pescados con papas fritas incrementan las raciones de verduras hervidas? Si les parecen desabridas, opten por las salsas de chile caseras o las especias y, de ser necesario, escondan la mayonesa y cualquier otra salsa que los invite a pecar.
4. Respeten los horarios de comida
Dedicar tiempo a la decoración navideña, la compra de regalos, la búsqueda de los centros de mesa para boda sencillos y hasta pensar en el menú de Navidad y Fin de Año puede distraer la atención y provocar que se salten algunas de las comidas. ¡No lo hagan! Aunque se llenen de tareas, estén agobiados por cerrar bien el año en el trabajo o su agenda esté repleta de citas con proveedores de la boda, procuren traer consigo algo saludable. Tal vez una manzana, unas nueces, unas galletas de cereal o hasta una lata de atún pueden salvarlos en la oficina.
Si no les da suficiente tiempo de sentarse a la mesa, que al menos el estómago no resienta por la falta de comida, pues la repercusión puede ser doblemente perjudicial. Por un lado, la ansiedad podría hacer que comieran alimentos ricos en calorías y bajos en nutrientes. Y por el otro, cuando tengan oportunidad de comer, lo harán con un apetito desproporcionado a lo que su cuerpo necesita. Asimismo, dedíquenle tiempo a masticar bien sus alimentos; esto ayudará a absorber mejor los nutrientes ¡y a bajar de peso!
5. Algo de ejercicio es mejor que nada
Regresando a la idea de que no todos los días son de fiesta, lo ideal es seguir con la rutina de ejercicio que hasta el momento llevan. Si ya están inscritos en un gimnasio, si salen a caminar al parque o practican alguna disciplina en particular, ¡sigan haciéndolo!
Si no hay oportunidad de ir tres o cuatro veces en la semana, será mucho mejor ir un día o dos que ninguno. De igual manera, si las reuniones de la temporada les impiden mantener sus tablas de ejercicios de hora y media, adáptenlas al tiempo de que dispongan con ayuda de su monitor.
También puede servir abandonar hábitos sedentarios en pro de la actividad física y esto les servirá como propósito para el año nuevo. Por ejemplo, dejar el carro unas cuadras más del lugar al que se dirigen para caminar o evitar escaleras eléctricas y ascensores. Junto con el cuidado de la alimentación, diciembre y los postres de este mes solo les darán risa.
6. No beban copas de más
Diciembre representa el pretexto perfecto para las reuniones entre amigos y en estas no pueden faltar el vino, la cerveza, la champaña y muchas otras bebidas con alcohol. En nuestra cultura, se tiende a celebrar con mucha comida y tantito de alcohol, pero no dejen que la inercia los lleve por un camino de excesos.
No es el mismo efecto si acompañas una pizza con una copa de vino tinto o un corte con una rica cerveza artesanal que si se terminan la botella o un six completo. Además, puede tener efectos colaterales, como un accidente por manejar ebrios, que pierdan algún objeto de valor o el dinero destinado para las flores para boda y hasta modificaciones en la conducta de quien consume alcohol.
7. Cuiden las horas de sueño
Tratar de dormir por lo menos de seis a siete horas cada día es lo más recomendable y es tan importante como alimentarse bien. Un mal descanso tiene consecuencias negativas: a nivel cerebral, afecta a la psicomotricidad, así como a la falta de atención y concentración. En cuestión emocional, se es más susceptible a caer en depresión, estados de ansiedad e irritabilidad.
Corporalmente, el organismo queda vulnerable para el desarrollo de enfermedades. Por si fuera poco, tu cuerpo va a querer obtener la energía que no consiguió durmiendo de cualquier manera. ¿Adivinas cuál? Sí, consumiendo alimentos más calóricos.
8. Sobremesas cortas (o alejadas de la comida)
Después de las comidas y las cenas navideñas, es común quedarse a conversar, sobre todo, en estas fechas llenas de emoción y con la gente a la que uno quiere y no siempre ve con la frecuencia que desearía. Aunque es difícil resistirse, acortar las sobremesas o permitir que las pláticas se alarguen, pero sin recalentado, debería ser cosa de todo el año. Mantengan las manos ocupadas con algún juego de mesa por equipos o conversen mientras salen a caminar un poco.
9. Hidrátense bien
El agua es el principal componente del cuerpo humano, por lo que hay que hidratarlo constantemente. Beber diario dos litros de agua es lo más recomendable. Además, recientes investigaciones han confirmado que incrementar la toma de agua acelera el metabolismo, porque obliga al organismo a consumir más energía. Tomar un vaso de agua o dos antes de las comidas también servirá para saciarte antes y evitar ingerir platillos de la estación con muchas calorías.
¿Tomaron nota? Como podrán darse cuenta, no es difícil cuidarse ni en las fechas en las que la algarabía está por doquier. Para sentirse motivados todo el tiempo, basta con tener en cuenta que quieren lucir como nunca ese vestido de fiesta para Fin de Año ¡y el botón no debe apretar más! Traten de cumplir juntos con una rutina saludable y, si es preciso, incentívense con pensamientos de amor cortos entre ustedes o acciones románticas como darse un beso por cada kilómetro conseguido en la bici o a pie. ¿Cuántos besos lograrán darse al terminar las fiestas?