Tips para el maquillaje de novia ideal
No busques más: la guía más completa para tener el maquillaje ideal en tu gran día está aquí. Toma nota de los mejores tips para tener una apariencia luminosa en tu boda, y consiéntete mientras te embelleces.
El maquillaje es una herramienta para disimular las imperfecciones del rostro y resaltar los mejores rasgos. En el caso de las brides, el maquillaje del día de la boda, además de favorecer la apariencia de la cara, debe ser armónico con el vestido de novia, los accesarios y el peinado para boda. En general, el mejor maquillaje de novia es el que genera brillo y te da una impresión de frescura, así que ya sabes, no solo tu ramo de novia debe lucir fresco y natural.
Además, puede transmitir algún efecto particular, como sofisticación o festividad. Pero esto es solamente un plus, ya que se prefiere que el maquillaje de novia sea lo más natural posible.
Para que tu maquillaje sea perfecto en el gran día, es importante que cuentes con la asesoría de un profesional: los expertos garantizarán tu satisfacción y te guiarán para tomar las mejores decisiones. Además, debes programar sesiones para ensayar tu maquillaje: pruébalo con tu vestido de novia corte princesa, con los complementos, así como con el peinado recogido o bien con algun tipo de trenza, para que te familiarices con él y lo perfecciones. También puedes hacer pruebas con una iluminación parecida a la que tendrás el día de la boda, y comprobar tu imagen en fotografías.
De esta manera sabrás si necesitas un poco más de color o algún acabado particular. Eso sí, ¡no vayas a quemar la sorpresa de tu look publicando selfies en tus redes sociales! Lo más importante es que uses un maquillaje que te haga sentir cómoda y segura. No exageres ni transformes por completo tu imagen cotidiana: ¡adapta tu look a tu estilo!
Tu imagen
Cuando se trata de tu rostro, tu salud y tu imagen están en juego, así que utiliza sólo productos de buena calidad. Conoce tu tipo de piel y las reacciones de tu metabolismo que pueden alterar tu cutis. Puedes acudir con un dermatólogo para que te informe mejor, si así lo deseas. Si todavía cuentas con algunos meses antes de la boda, implementa una rutina diaria de cuidado de tu piel, para que llegues al gran día más fresca que nunca. No exfolies tu cara una semana antes de la boda y procura utilizar productos no irritantes, sin perfumes y con componentes naturales. No uses nada que no hayas probado con anterioridad.
Un día antes de la boda puedes usar una mascarilla humectante. También puedes aplicar crema desinflamante, rodajas de pepinos, bolsitas de té de manzanilla o toallas húmedas, para lucir más descansada. Si tienes un barrito inesperado, utiliza sólo productos naturales para desinflamarlo… Y haz lo posible por aceptar que se quedará allí, porque tocar mucho tu rostro antes de la boda puede alterar tu cutis.
Cosméticos
Al elegir tus cosméticos, ten en cuenta el clima y el horario de la boda: la humedad y el calor pueden afectar tanto los colores como los productos que utilizarás. Los colores más oscuros son mejores para las bodas nocturnas o invernales. Tu maquillaje debe durar el mismo tiempo que tu boda, lo cual puede ser difícil, porque todos tus invitados van a querer abrazarte y besarte, y tal vez no puedas contener las lágrimas de emoción. Además, vas a bailar y a sonreír mucho. Todos los factores cuentan, así que utiliza maquillaje de larga duración y a prueba de agua.
Tu piel
Ahora sí, ¡lista para maquillarte para el día de tu boda! Primero lo primero: prepara tu piel. Unos veinte o cuarenta minutos antes de empezar a arreglarte, lava tu cara y tu cuello con un gel o jabón especial y enjuaga con abundante agua. Seca dando golpecitos con una toalla suave. Puedes usar un algodón para aplicar leche limpiadora: frótala con suavidad con movimientos circulares y eliminarás muchas impurezas. Después, utiliza un tónico equilibrante que refresque tu piel. Por último, hidrata tu rostro con una crema suave. Usa una crema especial para humectar tus ojos. Espera a que tu piel la absorba por completo y empieza a aplicar tu maquillaje. Si tu crema humectante no tiene filtro solar incorporado, aplícalo antes de humectarte.
La base
Aplica un primer para que tu maquillaje dure intacto más tiempo. Utiliza corrector para disimular las ojeras e imperfecciones; aplícalo con tus dedos dando suaves toquecitos, y nunca arrastrándolo. Puedes aplicar iluminador debajo de tu ceja y en tus mejillas, para intensificar estas zonas. Enseguida, aplica una base que cubra el brillo, y maquillaje líquido de tono mate, natural, que sea lo más parecido posible a tu tono de piel.
Polvos
El siguiente paso es utilizar polvos compactos para asentar la piel y darle un toque aterciopelado. Coloca rubor en dirección diagonal sobre tus pómulos para afilarlos e iluminar tus mejillas, pero recuerda no abusar. Debes ser cuidadosa con estos toques de color, ya que tu apariencia debe ser natural y no pálida o sobrecargada.
Sombras
Utiliza una sombra base para unificar el tono de tus párpados, y después aplica un tono claro pastel o pastel debajo de tus cejas, para perfilar tus ojos. Marca las cuencas y los extremos de tus ojos con una sombra de tono medio para abrir más tu mirada. Combina los colores de la sombra que usarás como color principal con el rubor y el labial. Usa la misma gama de tonos para iluminar las diferentes partes de tu rostro. Opta por tonalidades que sean armónicas con el color de tu piel y de tu cabello. Procura no crear contrastes, a menos que sean muy sutiles. Delinea tus ojos con líneas muy suaves y delgadas. Usa tonos ligeramente oscuros para dar profundidad a tu mirada.
Si quieres un efecto particular, ajusta la paleta de colores a tu estilo: los acabados en tonos claros son ideales para novias románticas, los tonos bronceados para novias sofisticadas; una mirada ahumada puede ser muy moderna, mientras que un poco de glitter exalta la actitud festiva. Los tonos metalizados son perfectos para conseguir un look vibrante sin sacrificar la naturalidad. Evita mezclar demasiados colores: si consigues una apariencia natural, lo detalles más sutiles bastarán para revitalizar tu apariencia.
Máscara de pestañas
La longitud y el volumen de tus pestañas dependerán de tu gusto: puedes usar tanta mascara como quieras, o incluso pestañas postizas. Entre más naturales sean tus pestañas, más inocencia transmitirán tus facciones. Tus cejas pueden estar muy bien perfiladas o conservarse totalmente naturales: es un aspecto que se ha vuelto tendencia en los últimos años.
Labial
Utiliza bálsamo labial para humectar tu boca. Para iluminar tus labios, delinéalos con el mismo color que tu labial. Si son muy finos, delinéalos por fuera del contorno para darles más volumen. El color de tus labios puede combinar con la paleta de colores del resto de tu maquillaje y de tu ramo de novia natural, o bien contrastar un poco. Los colores claros son los más naturales, pero si quieres proyectar una imagen más intensa, utiliza tonos oscuros. Los tonos nude se han vuelto una tendencia para el maquillaje de novias; considéralos para una imagen sobria y romántica. Lo recomendable es usar una barra de labios mate y añadir brillo labial. Recuerda utilizar labial de larga duración para que no te despintes cuando comas del pastel de fondant para boda y para que ningún beso te lo agote.
Para finalizar, puedes utilizar un poco de fijador de maquillaje para que la emoción y lagrimas no te jueguen una mala pasada como en la entrega del anillo de compromiso. No está de más preparar un kit de emergencia para llevarlo a la boda: coloca en una bolsita los cosméticos esenciales para retocarte cuando lo necesites. Puedes encargar a tu dama de honor que la lleve en su bolso, para que tú tengas las manos libres. No olvides cargar agua de rosas o agua termal, para refrescarte cuando lo necesites y que tu única preocupación sea recordar los pensamientos de amor que tienes preparados para tu futuro esposo.