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Bodas

6 pasos para elegir la fecha de la boda

¿Les preocupa cómo escoger la fecha de boda? ¡Fuera dudas! Reunimos en esta guía los puntos claves para que acierten en su elección. Así comenzarán con pie derecho todos los preparativos que garantizarán el éxito de su celebración.

fecha de la boda

Todas las parejas se preguntan cuál es la mejor fecha para casarse, pues si bien ya tienen una en mente por lo que significa para su relación, hay otras cosas que considerar, como el presupuesto, el clima, los horarios y las locaciones. Pero no teman, aquí compilamos todo lo necesario para que lo más pronto posible inicien los preparativos y tengan claro cómo elegir el día de la boda.

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Conscientes de que cada pareja planea una celebración especial, compartimos información esencial para que ganen tiempo y eviten dolores de cabeza. Recuerden que la situación actual puede aletargar algunos trámites y reducir los servicios, por lo que hoy más que nunca el tiempo es oro.

1. Elegir la estación del año

boda religiosa

Antes de tomar cualquier decisión sobre la fecha de la boda, es esencial que conozcan cuáles son los mejores meses para casarse en México, eso sí, atendiendo a las circunstancias actuales. Esta guía les dará la luz que necesitan para ampliar sus posibilidades.

Descubre lugares de boda

  1. Temporada alta/baja

Si bien estas temporadas varían según el lugar en el que deseen celebrar sus nupcias, en general dependen de los periodos vacacionales. La temporada alta coincide con los días libres de Semana Santa (marzo o abril), los de verano (en julio y agosto), la segunda mitad de diciembre y algunos puentes (como los de mayo y septiembre) y octubre, dado que hay más personas con oportunidad de viajar o de salir en su lugar de residencia. La ventaja de este periodo es principalmente para quienes organicen una boda destino, pues se asegurarán de que la mayoría de sus invitados podrán asistir sin tener que sufrir por un permiso en su trabajo.

La temporada baja considera los periodos en que poca gente puede movilizarse, y esto aplica tanto para meses del año como para días de la semana. Además del menor número de turistas, y por ende una mayor disponibilidad de servicios, los bajos costos son el atractivo estrella durante noviembre (principalmente), comienzos de diciembre y enero. La clave está en checar qué meses son los idóneos, según sus intereses, en el lugar en que desean casarse, puesto que hay playas, por ejemplo, con alta demanda durante invierno.

  1. Primavera/verano, los más demandados

Para muchos enamorados, las mejores fechas para casarse están entre marzo y septiembre, esos meses cálidos que traen consigo completos días de júbilo. Y es que la naturaleza se convierte en el mejor escenario para un romanticismo vibrante, con sus colores y espectaculares flores para decorar cualquier lugar, lo sabroso de las frutas y frescura de las comidas de temporada, que en gran parte facilitan hasta los menús de bajo presupuesto. Qué decir de los outfits, tanto para novios como para invitados estas épocas sugieren estilos sensuales y minimalistas en los que pocas prendas con escotes, telas frescas y ligeras lo hacen todo.

  1. Otoño/invierno, encanto a menos costo

Una fabulosa oportunidad para aprovechar las noches largas y los intensos colores de la naturaleza es elegir la fecha de matrimonio entre los meses de noviembre, diciembre, enero, febrero y marzo, en los que definitivamente repunta el romanticismo. Los sabores de temporada son más intensos, así que pueden combinarlos de mil maneras, logrando todo un espectáculo visual, sobre todo en las mesas de postres.

Si bien en México el otoño inicia el 23 de septiembre y termina el 21 de diciembre, es importante consultar el clima del lugar en el que se darán el "sí", puesto que algunos meses coinciden con la temporada de ciclones, así elegirán con facilidad la locación en la que celebrarán el ambiente bohemio de esos tiempos. Eso sí, es la época perfecta para que la decoración explote los contrastes entre colores neutros y tonos tierra, o los metálicos dorado, bronce, oro rosado y cobre.

El amarillo, naranja, azul y verde esmeralda serán los tonos favoritos para lucir en la boda. Para los novios habrá más opciones para elegir en cuestión de telas, decoración, zapatos y accesorios, puesto que el clima fresco por la noche, con ligero calor por el día, les da toda la libertad que necesitan.

Las bodas más glamurosas se celebran en invierno, del 21 de diciembre al 20 de marzo. El rojo, vino, blanco, café, dorado y verde le imprimen pasión y elegancia a todo. Es la época de los vestidos con detalles de encaje y pedrería, caudas largas y abrigos. El ambiente es de lo más cálido, tanto por la calefacción que podría volverse necesaria, como por los platillos y las bebidas del menú. Qué decir de los recuerdos de boda, tendrán una larga lista de opciones para apapacharlos con los obsequios más útiles. Verdaderamente se trata de una temporada de ensueño.

2. Evaluar los días de la semana

lugares para boda

Les persigue la duda de ¿qué día de la semana es mejor para casarse? La fecha de la boda también deberá estar basada no solo en sus preferencias personales, también en la disponibilidad de las locaciones y la inversión de dinero según el día.

  1. Sábados, un clásico

La clave para saber cómo elegir el día de la boda está en sus anhelos y presupuesto. El sábado es el más solicitado, dado que la mayoría de la gente está libre y puede cargar pilas el viernes para llegar con toda la actitud. Por ello, es posible que algunos precios no sean los más accesibles y que con mucha antelación deban apartar fecha tanto en la Iglesia como en la locación. Sin embargo, estos puntos se pueden sortear con una buena planeación, dado que se darán el tiempo necesario para conseguir los lugares deseados y contratar servicios que, por fortuna, pueden venir en paquetes para ahorrar unos pesos.

  1. Viernes, ideal para enlazar con el fin de fiesta

Cuando es viernes, el cuerpo lo sabe, ¿qué no? Así que este día será el de la actitud para pasarla de lujo en una gran celebración. Otra ventaja es que habrá una mayor disponibilidad en rentas y servicios, puesto que la mayoría prefiere el sábado. Además, ni ustedes ni sus invitados tendrán que preocuparse por la hora en que termine la fiesta, ya que, por lo general, el siguiente día es de descanso. ¡Tendrán un fin de semana completo para comenzar su nueva vida juntos! Incluso, pueden seguir la celebración con una tornaboda. Eso sí, si son supersticiosos, eviten los viernes 13. Y si planean una boda destino en un puente que inicie este día, seguramente será más costoso para sus invitados.

  1. Domingo, grandes ofertas y fiesta para todos

Sí, el domingo se ha convertido en una fecha de matrimonio ideal para conseguir precios para todo presupuesto con una alta disponibilidad de servicios, dada la baja demanda, una gran oportunidad para lograr la boda de sus sueños. Esto se debe a que la mayoría lo vive como un día para descansar con libertad, si el anterior fue recreativo, o para pasar con la familia. Por eso, es perfecto para las bodas íntimas, esas en las que los más cercanos son testigos de su amor y, por ende, se trata de una celebración más relajada. Es más probable de que todos asistan. El consejo es que sea de día para aprovechar los mejores escenarios al aire libre y permitirles un buen regreso a sus labores al inicio de semana.

  1. Entre semana, las mejores ofertas

Si las fechas para casarse caen entre semana, bien podrían marcar la diferencia. Pocos son los que lo han hecho y lo hacen, eso volvería aún más especial su matrimonio. Encontrarán descuentos de hasta el 50% y disponibilidad para contratar cualquier servicio con poco tiempo de antelación. Y lo mejor, en su lista de invitados estarán los que realmente deseen acompañarlos.

Es importante que consideren fechas de eventos deportivos importantes, finales de temporadas o días festivos, como el Día de la Madre, fechas patrias o Navidad, ya que pondrán a los invitados contra la espada y la pared; si asisten, posiblemente estén pegados al celular. Si son supersticiosos, eviten los martes, “no te cases ni te embarques”, y prefieran los lunes, considerados los mejores para atraer la abundancia y la fertilidad.

3. Identificar los horarios de bodas

ceremonia de boda con invitados en el día

En este paso deben pensar en lo que los motiva más: ¿una celebración con iluminación natural o una íntima recepción en la tarde-noche? Al conocer qué pueden hacer en un horario u otro, podrán elegir la fecha para la boda.

  1. De mañana

Casarse por la mañana equivale a disponer de los bellos escenarios que regala la naturaleza. Las bodas a estas horas suelen celebrarse en espacios abiertos, ya sea la playa, un jardín, el campo o una terraza y, por lo general, se organizan enlaces de estilo coctel o brunch. El menú podría ser bastante sencillo y económico. Todos tendrán energía, por lo que bien podrían alargar la fiesta para disfrutar al máximo de la comida, la pista de baile, los juegos o espectáculos sorpresa. El ambiente relajado privará, de manera los invitados no sufrirán con los atuendos tan formales ni pesados. Ojo, revisen el pronóstico del clima para que nada empañe el gran día.

  1. A mediodía

Este horario es perfecto para salvar parte del presupuesto, pues encontrarán precios accesibles en todos los servicios. Además, tendrán algunas horas para entregarse al arreglo personal sin desveladas. Qué decir de la luz natural, bien se puede aprovechar para las mejores fotografías. Al igual que en las bodas por la mañana, este horario permite planear festejos largos en los que se asegura la energía de los invitados. Eso sí, es importante checar el clima según la región en que se casarán, pues ello determinará si la locación debe ser un espacio techado para protegerse del sol o con aire acondicionado para sobrevivir al calor.

  1. De tarde

¿Qué hay más romántico que casarse al atardecer? Este horario será el mejor para tener lindas fotos con hermosas combinaciones naturales de fondo, por lo que se aconsejan locaciones que tengan espacios cerrados y abiertos, según las temperaturas. La decoración brindará una magia distinta, sobre todo si utilizan pequeñas luces led o velas. Sus invitados se pondrán creativos a la hora de armar su outfit, ante la necesidad de llevar prendas dos en uno o conjuntos que les permitan estar cómodos cuando caiga la noche. Lo mismo aplica para los novios. Prevalecerá el ambiente romántico, aunque también relajado. Las bodas casuales o informales quedan perfectas, incluso para considerar un food truck en el servicio de catering.

  1. De noche

Casarse de noche amerita una boda elegante en la que los invitados luzcan vestidos largos, peinados elaborados, zapatos formales y accesorios brillantes. Sin embargo, esto depende del lugar y la época del año, pues no será lo mismo una celebración glamurosa en la playa, que en un Pueblo Mágico del norte del país. Este horario permitirá ¡entregarse de lleno a la fiesta! Aunque esa preferencia incrementará la demanda. Oscuridad y luz serán el contraste perfecto para generar un ambiente de ensueño con decoraciones vistosas y la perfecta iluminación, ya sea en espacios cerrados o abiertos. Además, habrá tiempo de sobra para el arreglo personal y solo se ofrecería una comida con alimentos ligeros. La planeación será la clave para encontrar la locación y contratar los servicios deseados con suficiente antelación y a precios razonables.

4. Definir el tipo de ceremonia

ceremonia simbólica

Escoger el día para la boda también se basa en saber si lo harán en Iglesia, civil o ambas en el mismo día, de cualquier manera será indispensable que cuenten con el tiempo suficiente para reunir la documentación que necesitan en cada caso.

  1. Religiosa

Por fortuna, en México son libres de casarse bajo cualquier ritual religioso. Así que, organícense con tiempo suficiente para conseguir el templo y los servicios deseados, según sus creencias. Hay hermosos recintos cuya demanda obliga a los novios a apartar fecha con un año de antelación. También los hay muy estrictos en los que no permiten celebraciones fuera del horario establecido, puesto que en esta parte también deben cumplir con ciertos trámites. Ante estos panoramas lo más viable es informarse sobre las reglas y agendas de su recinto predilecto para que busquen la fecha para casarse que les agrade. Si la boda será en la locación, definitivamente tendrán el sartén por el mango; el reto será conseguir el oficiante y tener el presupuesto necesario.

  1. Civil

Para elegir la fecha de matrimonio al civil el mejor consejo es hacerlo con gran antelación, sobre todo porque cada Registro Civil pueden tener una apretada agenda o atención reducida. Por lo regular, el servicio es de lunes a viernes, y en horario de oficina, así que en días extraordinarios tendrá un costo más alto tanto por el tiempo del juez como por el pago de viáticos. Ojo, si también se casarán por la iglesia católica, es muy probable que les pidan el acta de matrimonio como requisito, y deben considerarlo en su agenda nupcial. La ventaja es que todo puede quedar en una celebración muy íntima, ya sea con una comida informal o un brindis, con atuendos sencillos. Si desean conocer los trámites y requisitos en cada estado, pueden ampliar la información en nuestra sección de boda civil.

  1. Simbólica

Dado que esta ceremonia tiene un significado espiritual para los enamorados, las fechas para casarse son más flexibles y pueden hacerlo en privado. Aquí todo dependerá del ritual que desean, pues en ocasiones es necesario desplazarse a algún sitio y deben cumplir con todos los requerimientos en días y horarios específicos. Las bodas mayas, por ejemplo, son oficiadas por un chamán en lugares emblemáticos como los cenotes sagrados, concentrados en la Península de Yucatán. Hay parejas que dejan esta ceremonia para la luna de miel o para renovar sus votos matrimoniales después de años de casados.

Por último, analicen juntos si tendrán una boda civil y religiosa, el mismo día o fechas distintas. Pues tendrán que considerar temas de logística durante la planeación.

5. Tener en cuenta la luna de miel

destinos para casarse

Si sus planes son tener un viaje de novios después de su celebración, la fecha de la boda también influirá en esta tarea, pues todo se reduce a tiempos de ejecución, reservas y presupuesto. Analicen juntos si lo harán inmediatamente después de su celebración o prefieren esperar.

  1. El destino marca una época del año ideal

No es obligatorio que después del brindis salgan directos a su luna de miel, puesto que el lugar determinará la fecha. Aquí es necesario considerar precios, conectividad, disponibilidad y el clima para tomar la mejor decisión. Si aman el calor, pero se casaron en noviembre por cuestión de presupuesto, la playa será el sitio perfecto. Si su sueño era una boda en invierno, pero la celebraron en verano para que asistieran más seres queridos, bien valdría la pena irse de viaje en la primera oportunidad para disfrutarse en su temporada favorita. Ahora que también es posible planear todo con antelación para tener todo en las fechas que desean.

  1. Permiso de vacaciones por boda

Pedir no empobrece, dice el dicho. Si bien la ley no establece un permiso con goce de sueldo por contraer matrimonio, pueden solicitarlo en su sitio de trabajo. Ya sea que acumulen días libres o los repongan después, hagan horas extra o pidan sus vacaciones, el punto es negociar y comprometerse con lo necesario para tener claros los días libres y comenzar a organizar sus nupcias. De estas fechas se determinará el resto de su agenda.

Exploren destinos de luna de miel

6. Fechas para casarse según la astrología

manos de novios con anillos de bodas

Y si son una pareja supersticiosa y quieren saber cómo los astros influyen en el desarrollo de una boda en días específicos, podrán tomar como referencia el calendario lunar.

  1. ¿Cuál es la mejor luna para casarse?

El ciclo lunar tiene un significado especial para muchos enamorados porque consideran que según la fase, esta influye de cierta forma en el futuro de su relación. Si estos fenómenos determinarán la fecha de su boda, tengan a la mano el calendario del año en que será el enlace y tomen nota.

Luna llena: es el símbolo de la fertilidad y el buen augurio; promete abundancia y prosperidad.

Luna nueva: fase perfecta para iniciar nuevas relaciones, dado que representa el momento para comenzar proyectos o hacer algo que se había postergado.

Cuarto creciente: representa una gran actividad y tiene dos etapas. Se recomienda la segunda, después de la luna llena, puesto que todo crece y se desarrolla.

Cuarto menguante: es la fase final del ciclo y también tiene dos etapas. La mejor para las parejas es la primera, que invita a disfrutar la vida y anunciar los éxitos alcanzados.

Incluso, hay parejas que se basan en la numerología para elegir la fecha de la boda, sin embargo, como han podido comprobar, lo mejor es conocer los tiempos de planeación y cuánto les llevará realizar cada tarea, además de tener clara la disponibilidad de la locación para el banquete, los días de atención del Registro Civil o la Iglesia, y todos los aspectos personales que consideren necesarios. Solo así escogerán la mejor para ustedes.

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