¿Te invitaron a una despedida de soltera? Evita estas 8 situaciones

Cuando una hermana, amiga o prima se casa, es inevitable pensar en despedidas de soltera, bridal shower y cualquier oportunidad para celebrar el compromiso con la futura esposa. ¿Les pasó que al reunirse las damas de honor y la novia para ver los vestidos de fiesta que llevarán en la boda, ella también estaba al pendiente de los centros de mesa para boda o contestando mensajes del wedding planner? ¡La novia merece un respiro! La despedida de soltera representa un momento de diversión, alegría, pensamientos de amor, buenos deseos y también, por qué no, cierta nostalgia. En cambio, estas situaciones van sobrando...

1. Convocar a personas que no están invitadas a la boda

Saber que una pareja contraerá matrimonio siempre contagia de emoción a las personas de alrededor. Es por eso que nunca faltan las voluntarias a asistir a la despedida de soltera, aun cuando no han recibido la invitación de boda original. Lo más prudente es esperar pacientemente.

Si tú tienes la misión de organizar la despedida de soltera, cerciórate de convocar solamente a aquellas mujeres que están dentro de la lista de invitados. Consulta con la novia quién le gustaría que participara en esta reunión para evitar incomodidades y compromisos y tampoco crear falsas expectativas a nadie.

2. Invitar a personas con las que la novia no se sienta en confianza

Con respecto al punto anterior, aun cuando haya personas que tú sepas que recibieron la invitación para boda civil, es lógico que no todas sean de estrecha confianza para la novia. Habrá algunas a las que invite por compromiso laboral e incluso familiar y otras con las que no le resulte tan agradable o cómodo convivir en un ambiente un poco más alocado que de costumbre. Podría ser el caso de su jefa, algunas tías mayores o las novias de las amistades de su pareja.

Lo más habitual es que la novia entregue una lista de personas a las que quiera tener consigo en su despedida de soltera. Así que, si no te la ha compartido, ten la iniciativa y pídesela.

3. Organizar la despedida sin consultar la fecha con la novia

Es más que probable que quieran que la despedida de soltera sea sorpresa, pero desde la entrega del anillo de compromiso, la novia tendrá una agenda mucho más reducida que meses atrás.

Las citas con la modista, con proveedores, los trámites en el Registro Civil o la entrega de invitaciones pueden cruzarse con la fecha y hora de la reunión. Si se llevará a cabo semanas antes de la boda, puede que hasta los novios estén planeando irse de earlymoon. Pídanle a la homenajeada que les comparta qué fines de semana son más complicados y cuáles tiene más libres para que ustedes bloqueen o faciliten esas fechas.

4. Desvelarse si está muy próxima la boda

Aun cuando falten algunos días para que llegue el día tan esperado, es importante considerar que las ojeras no son fáciles de disimular y en el día de la boda la novia debe lucir espectacular. No se trata de que la reunión termine a las 9 de la noche, pero tampoco de amanecer con ella. ¡El descanso es crucial!

5. Incomodar a la novia con comentarios inoportunos

Si eres una persona cercana a la prometida, es posible que estés enterada de algunos detalles que para ustedes puedan ser divertidos, pero resulten comprometedores delante de otras personas.

Será mejor que esas anécdotas del pasado y frases poco oportunas para decirle a una novia queden guardadas bajo llave o para una ocasión más íntima. Lo mejor es no hacer comentarios que puedan incomodar a la novia y centrarse solamente en el festejo que las reúne. Con eso tienen más que suficiente para divertirse.

6. Insistir en que revele detalles de la boda

Pese a que pueda haber muchas expectativas por saber cómo será el look de la novia, es de mal gusto insistir para que la prometida revele su secreto mejor guardado. Si ella está manejando el factor sorpresa es porque así lo quiere mantener hasta el día esperado.

En el caso de que tú seas una de las personas privilegiadas con esa información, es obvio que ni siquiera deberías sentirte tentada a traicionar su confianza. Por más que insistan las convocadas en la despedida de soltera, ten presente que tú no eres la indicada para decir si llevará un vestido de novia corte princesa o si será rosa en lugar de blanco.

7. Obligar a alguien a tomar bebidas alcohólicas

Para nadie es cómodo sentirse obligado a hacer cosas que no quiere y tampoco es obligatorio que todas las asistentes a la despedida de soltera ingieran alcohol. Cada quien se conoce y sabe cuáles son sus gustos y sus límites, por lo que hay que respetarlos. 

Si todas las participantes son mayores de edad y quieren celebrar con algo de alcohol, es muy válido. Pero forzar a una persona, incluida la novia, a excederse con bebidas embriagantes puede derivar en situaciones desagradables que incomoden no solo a la novia, también al ambiente en general.

8. ¿Show de strippers?

¿Es apropiado? Depende, siempre y cuando se platique con la novia el tono que ella desea tener en su despedida de soltera, qué tan cómoda se siente con eso o si generaría algún conflicto entre la pareja. Hay ocasiones en las que la prometida puede marcar vetos para este tipo de show, poner límites de qué tan atrevido o alocado debería ser y hasta decir con quiénes puede o no interactuar el stripper.

Tanto si son de la opinión de que este tipo de espectáculos cosifican a las personas como si no, lo cierto es que los shows de strippers ya no despiertan el interés de la mayoría.

Ya saben lo que es mejor no hacer, ahora sí: manos a la obra para hacer lo que sí se espera de una despedida de soltera. Preparen a esa persona especial para el mejor homenaje que llevas planeando desde que les compartió la noticia del anillo de compromiso de oro blanco. Consideren también que, así como se obsequian recuerdos para boda, en este tipo de reuniones también se acostumbra regalar algunos detalles, como diademas o playeras que distingan a las amigas de la novia y un regalito para la protagonista. ¿Ya lo consideraron?