Una boda vibrante, colorida y hermosa en Singapur

Al iniciar los preparativos de nuestra boda incluimos nuestras tradiciones, personalidad y estilo, y la boda real que elegimos para esta semana narra la vida en conjunto de una pareja fuera de serie.

Desde el inicio del noviazgo, su romance lo han marcado los minutos, segundos, horas, y días juntos, una etapa como de adolescencia, en  donde las mariposas recorriendo constantemente los corazones de Haripreet y María del Mar son evidentes desde 2008 cuando él llega a Madrid en el mes de septiemprey la conoce. El amor, cada vez más intenso, se hacía presente en la vida de ambos, recreando momentos únicos e irrepetibles.

Los novios realizaron un viaje a París, en el 2012, a la basílica del Sacré Coeur coronando el barrio de Montemartre, bajo un clima cálido y agradable, se compraron unos refrescos y sentados admiraron lo bello de París.

María del Mar cuenta que no pensó lo que más tarde sucedería, ya que Hari de rodillas en el césped y con una cajita entre sus manos, le pidió que se casara con él, a lo cual ella aceptó feliz de la vida y muy emocionada.

Por ser de dos culturas distintas, debía ser una boda fuera de lo común, así que iniciaron los preparativos, y la búsqueda de ajuares, lugares, fotógrafos, entre otros.

María del Mar cuenta que al ser una boda fuera de España sería un poco más complicado reunir todo lo necesario para llevar a cabo su boda de ensueño, sin embargo nada es imposible.

La boda se llevó a cabo por el rito punjabi, en el mes de abril en Singapur. Buscaron un fotógrafo el cual no tardó mucho en encontrar, ya que por medio de internet el primer nombre que saltó a la vista de María fue el profesional y ahora amigo Adrián Tomadín, el cual enseñó a los novios que una verdadera historia se puede contar por medio de imágenes especiales, inolvidables y únicas.

Cuentan que Adrián fue parte esencial de la culminación del amor de la pareja, ya que lo hicieron participar en cada uno de los momentos más íntimos y felices, así como en cada uno de los ritos que tiene la cultura india, la cual es muy colorida.

Se inició con la ceremonia de purificación en casa por medio de ingredientes como el yogurt, cúrcuma, y aceite, en donde amigos y familiares purificaron los cuerpos de los novios.

Posteriormente se hizo la sesión de henna, en donde las mujeres dibujan sus pies o manos a la novia.

Un día después se casaron en un templo Sikh, donde en todo momento estuvieron rodeados de luz y color. Cuentan los novios que fue un día muy largo, pero que al estar tan contentos por los momentos que estaban presenciando, y llenos de adrenalina al máximo se fueron realizando las constantes ceremonias.

La novia dijo que una de las ceremonias más emocionantes fue cuando se hizo el recibimiento en la casa de Hari como marido y mujer, ya que nunca olvidará a toda la familia del novio dándole la bienvenida.

Otro momento único fue la entrada triunfal al salón, ya que la combinación de las emociones con la música recibiendo a los nuevos esposos fue causal de suma alegría, pues combinaron las castañuelas españolas con una fusión de música india, indescriptible narrar aquella noche llena de folklore y emociones unidas.

Finalmente se despidieron de los invitados por medio de una cena, que recreó una noche de bellos recuerdos, bailes indios como españoles, fotografías con los invitados entre risas y abrazos de felicitación para los novios.

Actualmente los novios tienen un mes de casados, y a través de las fotos reviven una y otra vez la historia de una etapa previa y una historia posterior que comenzará a escribirse basada en el regalo más preciado para los novios que es el amor ahora como marido y mujer.

Fuente: bodas.net