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Bodas

¿Usar o no usar lentes en tu boda?

¿Usas lentes y no sabes qué hacer con ellos el día de la boda? Si llevarlos o no es el dilema, ¡lee este artículo y encuentra la clave para tener el look ideal!

Los accesorios son el sello del estilo de cada persona: sin importar el tipo de ropa que elijamos, son los accesorios la elección más personal en nuestro atuendo, una muestra de lo que nos gusta y de nuestra manera de construir nuestra propia imagen. Los lentes rara vez son usados como mero accesorio: un alto porcentaje de la población mundial padece algún defecto en la vista y, sin el uso apropiado de anteojos, las dificultades en la vida cotidiana y los problemas de salud son inevitables. Sin embargo, los lentes pueden volverse parte del estilo de quien los usa, convirtiéndose en el broche de oro de su presencia. ¿Qué opinas, usarás tus lentes en tu boda?

En las bodas de antaño se estilaba que, una vez que la novia retiraba el velo que cubría su rostro, su semblante debía permanecer libre, enmarcado únicamente por los accesorios y el peinado. El maquillaje debía ser suave y natural, en tonos neutros, para provocar una apariencia más inocente o jovial. Que la novia usara lentes el día de su boda, por lo tanto, podía considerarse incluso antiestético, además de que los lentes desentonaban con la estricta etiqueta de la ocasión.

Mientras exista un protocolo estricto y clásico, fijo para cada ocasión, habrá también experimentación y transgresión: ninguna tradición puede sobrevivir sin renovarse. Por lo tanto, usar lentes en la boda es una decisión que le pertenece únicamente al novio o la novia. Dependerá de sus personalidades y del estilo que le darán a su gran día. Si así lo desean y lo planifican eficazmente, los lentes de los novios no sólo pueden armonizar con su vestuario y crear un look espectacular, sino que incluso pueden volverse el sello de la boda.

Si tus lentes, por cuestión de estilo o por cuestión de salud, te son imprescindibles, hay muchas formas de adaptarlos para tu boda. Lo más importante es que cuides de tu cuerpo y que te sientas cómoda; sacrificarte en nombre de la moda puede ocasionarte malestares durante el día B, como dolores de cabeza o mareos, e incluso complicaciones para el futuro. Sin importar el tipo de lentes que utilices, la clave para portarlos con éxito es que los vuelvas parte de tu look.

Empieza por decidir si quieres que tus lentes se vean, es decir, que tengan armazón y micas, o si quieres ocultarlos y llevar lentes de contacto. Esta segunda opción puede ser la más adecuada si quieres seguir el protocolo o si tu boda será clásica y elegante. Si así lo deseas, incluso puedes cambiar por un día el color de tus ojos. Eso sí, asegúrate de que los lentes que uses estén hechos a tu medida y de que un doctor los recomiende.

Si quieres lucir tus lentes o no puedes usar pupilentes, personaliza las micas y el armazón. Si tu boda será elegante o clásica, elije lentes sin moldura: un modelo delicado y sencillo, de cristales claros o ambarinos, harán lucir tu maquillaje y tus accesorios y le darán distinción a tu look.

Si tu boda será glamurosa, busca lentes con molduras llenas de brillos o con formas divertidas. Una moldura gruesa y cuadrada, pero de tu color favorito, puede funcionar a la perfección y se lleva con casi todo tipo de ocasión. Debes elegir con cuidado los materiales, colores y formas de tus lentes, y coordinarlos con tus accesorios, tu peinado y tu escote.

Recuerda que de tu elección depende la luz y la atención que llamará la parte superior de tu rostro, especialmente tus ojos. No excedas tus accesorios y busca la simetría en tu rostro. Tu maquillaje no debe quedar opacado por los lentes, sino que debe destacar y favorecer tus facciones y causar una vista armónica. Si tu boda será en verano o en la playa, puedes usar gafas con armazón que se oscurezca o, si no usas lentes, pero quieres darle un giro a tu look, puedes usar gafas oscuras y hasta sombrero. Para coordinar el color de tus lentes con tu boda, puedes buscar colores neutros y discretos, o contrastantes y vibrantes.

Si quieres que tus lentes destaquen tus rasgos, busca los que vayan mejor con la forma de tu rostro: para caras ovaladas, son mejores las figuras que se alarguen a hacia los lados, pero si tu rostro es redondo te vendrán bien unos lentes cuadrados o rectangulares. Si tu cara es rectangular, usa lentes ovalados, y si es triangular, usa rectángulos o círculos. Si tu rostro tiene forma de diamante, usa lentes ovalados, y si es alargado, cualquier modelo te vendrá de maravilla.

Debes tomar en cuenta el peso de tus lentes y el movimiento que tendrás durante la boda, para elegir los que te hagan sentir más cómoda. También debes imaginar qué efecto causarán en las fotografías, para que tengas control sobre tu imagen siempre. No olvides llevar un kit con gotas para los ojos, líquido humectante, repuestos, toallitas húmedas o de franela, gel antibacterial, y todo lo que necesites para cuidar de tus lentes y de tu salud visual.