Zonas dominantes del rostro
Con frecuencia escuchamos diversas recomendaciones sobre cómo resaltar aquellas partes del cuerpo que más nos favorecen, entre ellas, las facciones del rostro y hoy te ayudamos a descubrir las maravillas que esconden las tuyas.
Es cierto, no todos los diseños o colores que aparecen en las revistas favorecen por igual; sin embargo, gracias a la versatilidad de las nuevas colecciones, seguro ya tienes en mente el vestido de novia indicado y ahora es momento de revelar las maravillas que esconde tu rostro para lucir un maquillaje y peinado de novia radiantes.
Diversos estudios han demostrado que, en términos científicos, la belleza la atribuimos a las facciones matemáticamente proporcionales a toda la cara y este principio se ha llevado a la práctica en el maquillaje, cirugía plástica, visagismo y estética, tomando como referencia las tres zonas dominantes del rostro que propone la morfopsicología:
Zona superior. Frente
Desde el nacimiento del cabello hasta la ceja, informa sobre la vida mental, la capacidad de imaginación, análisis y toma de decisiones. Entre más grande sea esta zona, mayor es la tendencia hacia la lógica y, por el contrario, al conocimiento empírico basado en la intuición. Ahora bien, si repasar los catálogos de ramos de novia o las miles de imágenes de pasteles de boda están ocasionando que arrugues la frente con frecuencia, toma un respiro, porque es una pista innegable de malestar e inquietud que en algún momento pueden estallar.
Zona media. Pómulos y nariz
Desde la ceja hasta la nariz, está ligada al sistema respiratorio, olfativo y a las emociones. A mayor amplitud, las emociones ejercen menor influencia en el comportamiento, por ejemplo, las personas prácticas; mientras que, la responsabilidad, resiliencia y perseverancia se refleja en zonas pequeñas. Las pupilas se dilatan cuando algo nos gusta y se contraen cuando no, de tal forma que los entornos con poca luz como los atardeceres o los arreglos de mesa para boda con velas no sólo desprenden romanticismo sino que favorecen la atracción mutua.
Zona baja. Boca, mandíbula y mentón
Desde la nariz hasta el mentón, se vincula con el sistema digestivo, reproductivo y los instintos primordiales. Las acciones por inercia, imitación, compulsivas o estereotipadas se atribuyen a las zonas más pequeñas. Si pasas tu lengua por los labios cada vez que concluyes alguna etapa de los preparativos, como completar tu outfit con un lindo ramo de novia natural, este es un mecanismo apaciguador que tiende a calmarte.
La cara es el espejo del alma
Los expertos en esta disciplina, afirman que sobre la base de la herencia genética, vamos moldeando una fisionomía, la cual es el reflejo de nuestro ser, de las actitudes que predominan en nuestra vida y de los sentimientos frecuentes. El tiempo no pasa en vano y las arrugas son el resultado del movimiento repetido de los músculos, tras mantener una misma expresión durante horas y horas. La cara difícilmente esconde la realidad, las emociones forzadas del rostro quedan más marcadas que las expresiones naturales porque la simulación supone un mayor esfuerzo muscular y, pese a este, se terminan grabando y revelando.
¿Sería drástico que las personas decidieran acompañarte con tan sólo ver las invitaciones de boda? Tal vez, pero muchas veces caemos ante el peligro de las primeras impresiones y en la tentación de juzgar una ocasión tan importante por el tamaño de los recuerdos de mesa para boda, en lugar de comprender el gran significado de la unión en pareja. Por eso, la premisa de la morfopsicología es “comprender, y no juzgar”.