La boda de Andrés y Claudia en Boca del Río, Veracruz

Muchas saben que para las fechas de mi boda mi papá estaba en el hospital, ya que mes y medio antes había presentado hemorragia subaracnoidea (tipo derrame) y tenía dos aneurismas a punto de reventar y ante la interrogante de seguir o no con los preparativos, acordé con mi familia que todo continuaría igual, y estaba tranquila; sin embargo, ese día no pude evitar sentirme triste ante la ausencia de mi papá. Los momentos más emotivos fueron cuando entré a la iglesia con mi hermano.

Mi hermano fue mi padrino de velación, así que se me hizo mala onda que dejara a mi cuñada sola al momento de entrar, y le dije como la iglesia no es tan grande, entra con tu esposa, y luego te sales y entras conmigo, yo te espero en la puerta de la iglesia, como sea soy la novia y obvio van a esperar a que entre. En ese momento en que esperaba y veía como entraban los demás a la iglesia estaba sintiendo de todo: emoción, nervios, felicidad, tristeza (aún no veía a mi ahora esposo que ya estaba en el altar).

Total llegó mi hermano conmigo y empezamos a caminar juntos, en ese momento, inmediatamente me brotaron las lágrimas, cuando vi el largo del pasillo, mi esposo esperando y a mi hermano también se le salieron las lagrimitas, ambos sabíamos que estábamos entrando juntos porque mi papá estaba en el hospital. Y es que creo que el sueño de todas cuando nos casamos es entrar a la iglesia del brazo de nuestros papás. Yo traté de disimular, pero en una foto se refleja en mi cara todos los sentimientos que traía ese día. Llegamos al altar y mi hermano le dijo a mi esposo, te entrego a mi hermana en representación de mi papá, cuídala mucho y todos con los ojos rojos (fue un momento súper emotivo). Mi mamá lloró toda la misa.

La misa me encantó, el Padre dio un sermón muy bonito acerca de permanecer siempre unidos, teniendo una buena comunicación y sin ocultarnos nada, caminar juntos formando una nueva familia y manteniendo una sana distancia con nuestras respectivas familias. Después vino el momento de los votos, entrega de anillos, arras, el lazo, la biblia y rosario.

Al término de la misa el Padre dirigió unas palabras muy bonitas en agradecimiento a mis papás por haber formado a la mujer que ahora soy (fue otro momento muy emotivo ante la ausencia de mi papá y mi mamá no dejaba de llorar); también agradeció a los papás de mi esposo por haber educado a un buen hombre con buenos principios y valores. Al final le di un abrazo a mi mamá y, aunque la foto se ve triste, es de mis favoritas porque en un abrazo se resumió nuestra unión familiar, no estuvo mi papá ni una de mis hermanas que se quedó a cuidarlo, pero todos estábamos de alguna y otra forma juntos.

(Aquí quiero hacer un paréntesis, durante la misa tocó el Grupo Instrumental Contra Punto, eso hizo aún más emotiva la misa -violín, arpa y piano-. Ampliamente recomendable para las novias de Veracruz-Boca del Río).

Después vino la sesión de fotos dentro de la iglesia y de ahí salimos. A nuestra salida nos aventaron papelitos de colores, se me hizo súper práctico y económico. Mi idea original era que fueran pétalos, pero se hubieran secado y era prepararlos el mero día, imaginé que no me daría tiempo y dije bueno mejor compro hojas del color de la boda y las corto en pedacitos, la verdad el resultado me encantó.

De ahí nos trasladamos al lugar de la recepción, una terraza con vista al mar (Salón Veranda, en Boca del Río, Veracruz). Desde que empezamos a buscar lugares y vimos éste, a mi esposo y a mí nos encantó. Y no nos equivocamos. El día de nuestra boda lucía hermoso, la decoración superó nuestras expectativas, el día estaba súper despejado y el mar y el cielo se veían increíbles. La decoración y el banquete estuvieron a cargo de Tissé.

Cuando llegué al lugar sentí mucha emoción al ver materializados los meses de preparativos (decoración, libro de firmas, los muñecos del pastel, el cochinito, cóctel de bienvenida, mesa de novios, bueno todo). Tuvimos nuestros muñequitos del pastel, el proveedor fue Enamoratte, quedaron padrísimos, muy parecidos a nosotros.

El menú fue de 4 tiempos: fussil con salsa de quesos al vino, crema de elote, lomo el salsa de cacahuate con guarnición de souflé de papá y calabacitas gratinadas, pastel de tres leches de Carlos V (decidimos que el 4to. tiempo sería el pastel de bodas). Las porciones muy bien servidas, el sabor delicioso; a nuestros invitados les encantó este menú, recibimos muy buenos comentarios.

Durante la comida cantó una estudiantina (Estudiantina de la UDLA), y amenizó el momento bastante bien, interactuando con los invitados. Fue de los momentos divertidos de la fiesta.

Después de la comida vino el momento del brindis, mi hermano nos dirigió unas hermosas palabras donde en primer término nos felicitó, después nos recordó que el matrimonio es un trabajo en equipo, caminando juntos. Inmediatamente, proyectaron un video con fotos de mi papá mientras se escuchaba la canción de “Yo Primero la Amé” de Gilberto Gles, fue la forma de tener presente a mi papá y por eso le pedí a los fotógrafos que preparan un video especial.

Continuamos con la fiesta y ahora tocaba el primer baile de novios, la canción que elegimos fue la de “Rest of my Life” de Bruno Mars. He de confesar que a mi esposo no le gusta bailar, y nunca en la vida habíamos bailado juntos, así que literal fue nuestro primer baile juntos, él hizo el esfuerzo ese día.

Posteriormente, ahí mismo en el salón hicimos nuestra sesión de novios (ahí nos perdimos un poco de la fiesta, pero aprovechamos también hacer sesión con las damas) y el resultado nos encantó.

Regresamos a la pista de baile hasta que terminó la fiesta. Yo me divertí mucho en mi boda, la disfruté al máximo. Sí nos faltaron algunas personas, pero al final estuvo quien quiso compartir con nosotros esos momentos, así que a pesar de las circunstancias familiares puedo decir que mi boda fue perfecta.

Perdón si las aburrí con tanto rollo, finalmente aquí les dejo las fotos oficiales de mi boda. Mis fotógrafos fueron Yery & Ruy (hacen un excelente trabajo desde las sesiones previas hasta el mero día).

Y recomendación para todas las novias y aunque suene repetitivo porque todas las que ya vivimos ese día decimos lo mismo: disfruten su día al máximo y no dejen que nada ni nadie se los arruine.

Gracias por leerme y por haber compartido conmigo todos los preparativos de mi boda, el día de mi boda y ahora mi crónica. Saludos.