La boda de Ángel y Larisa en Gustavo A. Madero, Ciudad de México

La crónica de nuestra boda

¿Por dónde empezar?

Yo quería una boda de 30 personas, mi esposo una más grande, al final tuvimos en lista 100 invitados, decidimos que fuera una boda con toques rústicos en blanco y negro, pero muy al DIY (super recomendable si no trabajas de lunes a viernes). Desde que nos comprometimos comenzamos a ver y comprar cosas, para no estar corriendo, y los gastos no nos sorpredieran (aún así pasó), porque el tiempo se pasa volando.

En genereal, fui yo la que vio todos los detalles, adornos, etc., tuvimos alcancias de cráneo y los muñecos de pastel eran dos catrines. Se nos ocurrió hacer piñatas de novios y juro que son super recomendables y dan un plus de diversión.

Llegado el día y como mencione la boda era DIY, estaba estresada, nerviosa, un día antes no dormí bien, llevo 3 años viviendo con mi ahora esposo, pues ese día vomité de la ansiedad, me sentía como si no lo hubiera visto antes, todo me temblaba.

Pero al entrar y verlo, debo confesar, que era como si nadie existiera, sólo él (qué cursi), tuvimos únicamente una ceremonia civil, pero el juez, se lucío, diciendo un discurso maravilloso, no teniamos planeado decir votos, pero de momento pasó y sólo nos quedamos viendo y comenzamos a reír.