La boda de Antonio y Alejandra en Guadalajara, Jalisco

La crónica de nuestra boda

Por lo nerviosa que me encontraba dormí un poco más tarde, tomé un rico desayuno en casa de mi madre y antes del medio día llegaron la maquillista y peinadora a casa para maquillarnos a una de las damas, a mi madre y a mí. Fue emocionante compartir eso con ellas, moría de nervios conforme iba transcurriendo el día. Llegó el chófer a casa, mi primo Diego, ya para esa hora me invadía la emoción y los nervios. Llegamos tanto mi esposo Antonio y yo casi al mismo tiempo al salón, ya que la ceremonia religiosa y la fiesta fueron en Mansión Magnolia, un lugar precioso, super romántica y espiritual. Los invitados super alivianados y divertidos, el lugar muy elegante, me encantó la decoración y el servicio del lugar. La verdad el día más feliz de mi vida, fue maravilloso.

¡Con el apoyo de nuestras familias y amigos fue grandiosa! Después a los dos días nos fuimos de luna de miel a Cabo San Lucas, wow por su puesto también fue maravillosa.