La boda de Bernardo y Kary en Cuernavaca, Morelos
Al aire libre Invierno Fucsia 7 profesionales
B&K
17 Dic, 2016La crónica de nuestra boda
Hola chicas
La verdad pensé mucho en escribir esta crónica, pero me di cuenta que sería la mejor forma de recordar tan maravilloso día.
Debo decir que aún no creía que yo fuera la novia. Durante todo ese día, mi ahora esposo y yo nos la pasamos separados por que aún había muchos detalles por terminar, la compra de la bebida, pagos que realizar, y hasta actividades de manualidades. Teníamos planes de ese día pasar todo el día juntos relajados, pero el tiempo nos comió un poquito.
Así llegó el día. La mañana del 17 de diciembre. Desperté temprano, porque debía irme a casa de mi madre donde había elegido arreglarme y pasar la mañana más linda de mi vida. Antes de salir de casa mi adorado esposo volvió a colocar mi anillo de compromiso en mi mano pidiéndome nuevamente que me casara con él; y otra vez estaba completamente segura que es el con quien quiero pasar el resto de mi vida.
Me llevó a casa de mi madre y ahí nos despedimos diciéndonos nos vemos en nuestra boda.
Seguir leyendo »Me metí a bañar y comencé a relajarme repitiendo en mi cabeza, hoy es el gran día. La cita con la maquillista era a las 10 am, y llegó más que puntual, ahí comenzó todo, no creía que yo era la novia, no me la creía. Mientras la maquillista hacia su trabajo, comencé a tener hambre y fue entonces que mi hermana me dio de comer, no quería estar enojada por no haber comido y fue lo mejor que pude haber hecho. Ya habían pasado 2 horas y casi estaba lista, las 12 del día y me estaban colocando mi velo, no puedo explicar la sensación que tenía; ya faltaba menos. La maquillista terminó antes de lo previsto por mí; así que según mi itinerario tenía unos minutos libres, en los que los nervios llegaron a mí, pero nervios bonitos, tenía ansia de que ya llegara la hora. Me relaje y me senté en la sala, pero mi corazón estaba tan acelerado que no podía relajarme daba vueltas en la casa y de la ansiedad sentía hambre de nuevo, pero eran los nervios.
Había citado a los fotógrafos a las 1:30 de la tarde, así que siendo la 1 decidí en ya ponerme mi tan añorado vestido, mi madre y mi sobrina fueron quienes me ayudaron, mi corazón se aceleraba aún más y no podía con tanta felicidad. Cuando terminé de ponerme el vestido fue que llegaron nuestros fotógrafos, en verdad no pudimos haber encontrado a mejores personas para capturaran el mejor día de nuestras vidas. Jehu Camacho y su esposa Janai. Comenzaron con las fotos de mi preparación; mi hermana me ayudó a verificar que el vestido estuviera bien colocado y a colocarme los accesorios que me acompañarían ese día. Esos minutos transcurrieron con infinitas risas y carcajadas de la felicidad que se sentía.
Llego la hora de trasladarnos a la sesión de fotos de boda, que nosotros elegimos fuera antes de nuestra ceremonia para disfrutarla al máximo y poder capturar el momento en que nos veríamos por primera vez vestidos de novios. (Además de no hacer esperar a los invitados en la recepción por que los novios están en su sesión fotográfica)
Mis adoradas damas tuvieron contratiempos así que no pudieron llegar a mi casa y estar conmigo en la preparación, así que nos vimos en Jardín Borda donde fue la sesión fotográfica. Unas de ellas llegó cuando justo estaba de salida de mi casa, así que fue quien me acompañó en el trayecto lugar mágico. Al igual que Janai quien no dejaba de fotografiar cada detalle. La amé.
Mientras íbamos en el carro platicábamos de los nervios que sentía y de lo cómoda que se sentía, realmente estaba tan feliz que había olvidado que al florista se le olvidó enviarme los ramos de mis damas y que me dijo que llegaría a mi casa a entregarlos, pero cuando salimos no había llegado, así que le dije a mi hermana que por favor cuando llegara los llevara a la iglesia aunque ya mis damas no salieran en las fotos con sus ramos. En el trayecto sentía las miradas de las personas que me veían. Cuando yo veía a una las admiraba y decía “wow que padre debe ser el día de tu boda”, y ahora yo era la novia; yo era quien robaba esas miradas.
Llegamos a Jardín Borda; para entrar hay que cruzar una avenida y me veía tan chispas cruzando la calle vestida de novia y parando el tráfico, “solo escuchaba mira una novia”.
Cuando entramos Jehú y Janai fueron a preparar la locación y al novio que ya estaba esperándome, mientras tanto yo me preparaba con las damas. Llegó el momento, llegó la hora de vernos por primera vez vestidos de novios, me di cuenta de ello cuando Jehú me dijo; “ya puedes, ir te está esperando”. Caminé y no sabía qué hacer, me acerqué y ahí estaba de espaldas esperándome, esperando a su futura esposa y tan solo 3 pasos del él me detuve y le dije ya llegué. Fue ahí cuando volteó a verme, yo no sabía si reír o llorar pero ambas cosa eran de felicidad, me dijo lo hermosa que me veía, le dije lo guapo que se veía, nos abrazamos, por fin había llegado el momento que tanto anhelábamos, que durante 7 años imaginábamos. Durante ese momento solo estábamos él y yo, solo existíamos él y yo. Cuando volvimos a la realidad ahí estaban capturando ese momento. ¡Fue tan mágico! Continuamos con la sesión, no podía estar más feliz. Espero ansiosa ver el resultado.
Nos dimos cuenta que ya eran las 4 así que decidimos partir para la iglesia que estaba literal a 10 minutos. Los que salimos y nos fuimos al estacionamiento se nos fue el tiempo, pero moríamos de sed así que decidimos parar por un agua de lo cual también habrá fotografías. Mi carro ya estaba listo así que rápido salí del estacionamiento, pero el del novio estaba encajonado y tardo más. Cuando llegamos a la iglesia llegue yo primero por este motivo, llegue 10 minutos tarde. Pero el novio no llegaba, el sacerdote estaba desesperado, tanto que me hizo bajar del carro sin que el novio llegara, ahora sí que la novia esperó el novio pero no tardó ni in minuto en llegar, esta historia me la contaron; la llegada del novio fue de película llegó rápido y furioso dejó el carro a media calle y corrió a la entrada de la iglesia, mientras que una de mis damas lo estacionaba.
Y ahí fue cuando el sacerdote nos acomodó para hacer la entrada. ¡Wow! Qué momento, camine del brazo de mi madre; mi más grande motor. Que alegría poder compartir este momento con la personas más importante en nuestras vidas. Llegué al altar y mi madre me entregó al hombre que amaré por el resto de mi vida y ahí comenzó la ceremonia, fue tan especial, durante toda la misa no parábamos de sonreír y mirarnos. Llego el momento de hacer nuestros votos, colocarnos nuestros anillos y jurarnos amor eterno. Será un día que jamás olvidaremos.
Para la salida de la iglesia planeamos nos recibieran con burbujas, y ¡fue lo mejor! ahí estaban todos los que habían sido testigos de nuestro juramento, las personas más especiales en nuestras vida.
Ya completamente relajados empezaron los abrazos y buenos deseos. Para estas horas del día ya moríamos de hambre así que no perdimos la oportunidad y comimos pan del que estaba vendiendo afuera de la iglesia, ¡qué cómico! (por cierto también habrá fotos de ello).
Ahora sí, siendo marido y mujer viajábamos en el mismo auto con destino a la recepción, la fiesta que habíamos planeado por mucho tiempo. Cuando llegamos habían llegado muy pocos invitados de los que asistieron a misa, nosotros llegamos antes que ellos, así que mientras llegaban nosotros esperamos en el auto. Después de un rato llegó la hora de nuestra entrada triunfal, mis adoradas damas fueron quienes organizaron el momento mágico. ¡Ahí estaban esperándonos con luces de véngala! ¡Amé ese momento! Mientras que nuestra sobrina nos cantaba "A thousand years" de Christina Perri, ¡lloré de la emoción! ¡Y como no hacerlo!
Después de saludar a todos los invitados, procedimos a cenar, de menú escogimos pasta Alfredo y pechugas de pollo en nogada acompañada de verduras a la mantequilla y papa alemana. ¡Riquísimo!
Después de cenar hicimos el brindis, y posteriormente la partida del pastel, no podíamos esperar más para probarlo, el montaje estuvo hermoso y que decir de nuestros muñecos de pastel en donde habíamos incluido a nuestro fiel compañero de vida nuestro gato.
Podrecimos a realizar nuestro primer baile de esposos, bailamos llegaste tú de Juan Luis Guerra y Luis Fonsi, y de repente cambio la canción por la de tu sonrisa de Elvis Crespo y continuamos con la de la mordidita de Ricky Martin y para finalizar música disco, nuestra coreografía quedo genial y nuestros invitados no se lo esperaban, fue nuestro momento. Y así comenzó el baile toda la noche nos la pasamos bailando, no sé de dónde sacábamos tanta energía. Por cierto olvidaba la parte del lanzamiento del ramo donde 3 amigas fueron las afortunadas, también hicimos el lanzamiento de la corbata; nosotros elegimos fuera eso porque el momento del ligero se nos hacía algo incómodo así que la corbata fue aventada y entregada a un codiciado soltero.
Y continuó la fiesta, entre baile y fotos se nos fue el tiempo así nos dieron las 3 am donde nuestro cuento de hadas de terminaba para dar paso a la mejor de las aventuras por vivir. Nuestro matrimonio.
Nuestra boda no pudo ser más especial, sin duda un día que quedara guardado en nuestros corazones. Los planes de Dios son perfectos, aún más perfectos de lo que nosotros pedimos.
Gracias por tomarse unos minutos para leer nuestra historia.
Servicios y Profesionales de la Boda de Bernardo y Kary




Otros Proveedores
Otras bodas en Jardín Marz
Ver todas
Otras bodas en Morelos
Ver todas

Bajo La Montaña

Punta Luna by Grupo Paraíso

Jardín Fuentes 22
Inspírate con estas bodas
Deja tu comentario