La boda de Carlos y Monse en Veracruz, Veracruz

La crónica de nuestra boda

El día tan esperado llego lleno de nerviosismo y expectación, los últimos detalles emergían de la nada y el tiempo parecía avanzar más rápido. Llegada la hora dela ceremonia religiosa la ansiedad se hizo presente para ambos.

Es realmente indescriptible la manera en que todos esos miedos, toda la presión y toda ansiedad desaparecieron. Una mirada bastó para poner fin a todos esos sentimientos y remplazareis por uno mayor: felicidad. Al mirarlo a los ojos supe que todo iba a estar bien, no hubo nada que decir simplemente sentir todo se amor que nos profesamos junto con todo el cariño de nuestros familiares y amigos.

Una vez finalizada la bendición partimos juntos al jardín donde con ellos celebraríamos nuestra unión. Allí firmamos legalmente nuestro compromiso uno con el otro, realizamos nuestro primer baile ahora como esposos y brindamos por el inicio de una vida juntos. El festejo duro hasta avanzada la noche y cuando despedimos a nuestro último invitado. Fue cuando dimos inicio a esta gran aventura que es el matrimonio. En el cual vivimos aprendiendo uno del otro y siendo tolerantes, apoyándonos y perdonando nuestros errores.