La boda de Chris y Viky en San Francisco, Nayarit

La crónica de nuestra boda

Bueno, pues no sé ni por donde empezar.

Fue todo tan mágico, tan bonito, tan romántico, tan de ensueño, que qué pena que ya pasó. Fue un momento que me hubiera encantado perdurara para siempre.

Fue boda en la playa, super mexicana, mi esposo es alemán, y casi la mitad de nuestros invitados eran extranjeros, así que quisimos mostrarles lo más dentro de mi y mi cultura. Para mi fue algo super fuerte, por que fue un momento donde mi pasado y mi futuro hicieron convergencia. Los dos países que más amo estuvieron juntos festejando con nosotros. Fue inmenso, fue grandioso.

Tuvimos una taquiza de cena, super mexicano, con un trompo de pastor, ensalada de nopales, manteles de tergal, piñatas en las mesas, cantaritos de regalo y para sus tequilas, papel picado volando entre las palmeras, unas guirnaldas de focos para una iluminación ligera y no podía faltar la grandiosa iluminación natural por la luna.

Tuvimos una ceremonia católica, que fue hermosa, donde tuvimos un conjunto musical que tocó música clasica super hermoso, como el Ave María, Melody y obvio las tradicionales. Teclado, soprano y violín nos acompañaron en nuestro matrimonio.