La boda de Daniel y Laura en Ciudad Juárez, Chihuahua

En cuanto terminó mi sesión de belleza, me fui a mi casa rápido, ya que nada más me daría tiempo de cambiarme, además quería saber cómo iban las cosas en mi casa, si ya todos estaban listos. Como que empezaba un poco el nervio. Gracias a Dios en mi casa ya casi estaban todos listos. Me cambié y vámonos para la iglesia. Llegue exactamente a las 4 pm (a esa hora fue mi misa) cuando iba llegando alcance a ver a mi novio de lejos, empezó mi corazón a latir más fuerte. Pues ya se metió mi novio a la iglesia se acomodó la corte y ahora si a entrar a la iglesia del brazo de mi mamá.

Es una emoción y alegría caminar por el pasillo, al llegar al altar vi a mi prometido con los ojos llenos de lágrimas y le dije me vas a hacer llorar. Pues la misa se desarrolló de lo más bonito, había mucha familia y amigos, eso nos hizo sentir muy queridos y bendecidos. Hubo momentos en que sí estuve muy nerviosa, sentía que no podía respirar, que en cualquier momento me caía, pero respiré profundo me tranquilicé y todo fluyo mejor. Decir los votos fue de los mejores momentos, estábamos nerviosillos porque el padre dijo que los debíamos de aprender de memoria, y a penas en la noche anterior los habíamos estudiado. Saliendo de la misa, pues ya saben los aplausos y abrazos al por mayor.

De ahí teníamos que irnos a la sesión de fotos, así que ya teníamos reservado un restaurante para comer y que ahí fueran las fotos. El caso es que comimos alrededor de 70 personas ahí, un lugar para nada barato y aparte nos cobraron 300 pesos por las fotos. El caso es que si salimos decepcionados ya que nos habían recomendado mucho ese lugar. En fin, la verdad no quisimos darle la importancia debido a que apenas empezaba nuestro día, y no teníamos que arruinarlo con eso.

Después de todo ese show, nos fuimos a la casa de mi novio a esperar un poco para irnos a la recepción. Cuando llegamos al salón de eventos, nos tomaron algunas fotos, el salón estaba muy hermoso, tanto que no nos dimos cuenta de que no habían puesto los manteles que pedimos y cuando nos dimos cuenta ya era muy tarde para poderlos cambiar La gente empezó a llegar, felicitándonos y deseándonos lo mejor.

Empezó la presentación oficial, pasó primero toda nuestra corte, que era un poco grande. Eran 9 parejas de amigos y familia que formaron parte de nuestra historia. Posteriormente tenían que presentar a los papás y que se equivoca el DJ. Bueno el caso que no salió nadie hasta que nos presentaron bien. Bailamos el vals y empezó el baile. Sentí que todo se fue rapidísimo, a las 11 pm habíamos contratado a un mariachi, que a todo la gente les encantó. Estuvo una hora tocando en principio como 2 canciones románticas para bailar los novios, después empezó a cantar canciones para bailar, así que estuvo muy divertido. En cuanto se acabó el mariachi, empezó todo lo de la liga, el ramo. Bailamos otro vals. Y luego nuestro fotógrafo nos regaló un video para la media noche. Estuvo hermoso, todo mundo lloró, se rio, simplemente les encanto. En el video aparecemos nosotros presentándonos, hablando un poco de nuestra personalidad, como nos conocimos, de nuestra familia. El caso es que yo no conocía lo que había contestado mi prometido. Y fue muy divertido, además que escribimos nuestros propios votos y los leímos en el video. Eso me hizo llorar, al escuchar las palabras de mi esposo. Fue hermoso, definitivamente uno de los mejores momentos de la boda.

Después de eso a bailar como locos en lo poco que nos quedaba de la noche. Por cierto el pastel también se partió y se hizo el brindis. El pastel fue de zanahoria, estuvo delicioso. Bailamos mucho, sacamos todas las cosas para animar más la fiesta. Pues como todo inicio debe terminar. Se acabó la fiesta, pues a recoger todo, a despedir a la gente. De ahí mi esposo y yo nos fuimos a una habitación de hotel que nos había regalado el salón de eventos. A disfrutar de nuestra noche de bodas. Al día siguiente hicimos una comida en la casa de mi cuñado, recordamos los momentos de la boda. A pesar de que hubo cosas que no salieron como quisimos, nosotros disfrutamos cada momento, y compartimos con nuestra familia y amigos.

Ahora tenemos ya un mes de esposo, cada día aprendiendo uno del otro.