La boda de Efren y Fernanda en Acapulco, Guerrero

La crónica de nuestra boda

La unión de dos personas ante Dios suele ser maravillosa, nuestra gran día comenzó así.

Desperté muy temprano porque los nervios no me dejaban descansar, quería que ese día durara el mayor tiempo posible, era nuestro gran día, así que lo primero que hicimos fue terminar de ordenar las mesas ya que un día antes personas que no iban a asistir terminaron por confirmar su asistencia y teníamos que agregarlos, queríamos que todos estuvieran sentados con las personas que más se sentían agusto para que la cena fuera más amena, bueno eso de las mesas nos quitó como 3 horas, después comenzamos a subir al coche todas las cosas que faltaba llevar al hotel, entonces me bañé y nos fuimos al hotel, no podia creer que ya fuera en camino al gran lugar. Llegamos y fue super padre porque en la recepcion comenzamos a encontrarnos con nuestros invitados, la familia, amigos (personas que habian viajado horas para estar ese día con nosotros) fue muy bonito verlos y que dijeran.. ¿ya listos? No, no estabamos listos. En ese momento me despedí de mi ahora esposo ya que él se fue arreglar a una habitacion con sus mejores amigos y yo me subí a otra habitación con mi mamá y mejores amigas, ya no nos veríamos hasta el altar (nervios), el tiempo pasó rapídisimo, llegó mi maquillista, el de mi mamá y todas nos estábamos arreglando al mismo tiempo, yo cuando podía escaparme me asomaba por el balcón y observaba que todo estuviera como yo lo habia pedido ¿y qué creen? los sillones de la mesa de novios no eran los que había pedido, así que llamé a mi decorador y me dijo que en el traslado se habían dañado y que no podia llevarlos, ya se imaginarán, todo un año de planeación amando mi mesa de novios para que los sillones no me gustaran, mi prima no lo permitió, volvió a llamarlo y afortunadamente es un excelente proveedor, se movilizó y me consiguió unos muy parecidos que me encantaron (solo fue el susto). Eso me provocó mucha hambre y mi mejor amiga super linda bajó a la costera y me llevó una hamburguesa (mientras comia me arreglaban) pero llegó el momento. La playa estaba llena de nuestros invitados, ya todos me estaban esperando y yo no queria bajar del nervio. Mi padre subió por mi a la habitación junto con mi hermano y tuvimos que bajar, la Marcha Nupcial se escuchó como 3 veces seguidas y yo no entrababa, llegué y él estaba esperando por mi, llorando al verme, (nunca lo voy a olvidar) nos abrazamos llorando juntos y la ceremonia empezó, me encantó, fue un momento en el que los nervios no nos dejaban hablar. Terminó la misa y llegó el juez, no se tardó tanto y eso nos dio más tiempo en la recepción, entramos antes de los invitados así que pudimos tomarnos unas fotos solitos y otras con nuestras damas y damos. Nos sentamos en nuestra mesa, el lugar ya se encontraba totalmente lleno, a las 9:00 pm se sirvió la cena y mientras las personas cenaban publicamos un video de como nos conocimos, a todos les encantó. A las 10:00pm comenzó el programa, iniciamos bailando nuestra canción No Existen Límites de mi amado Luis Miguel y escrita por Armando Manzanero. Mientras bailamos me cargó y salieron los chisperos por la pista, fue mágico. Al terminar seguimos con el baile familiar únicamente con nuestros padres para que no se alargara y así fue como terminando realizamos el brindis. Mi prima que fue nuestra cupido fue quien dio las palabras así como un tío, al terminar de brindar el cielo se iluminó de fuegos pirotecnicos, todos estábamos inmensamente felices, al terminar, bailamos un poco con todas las personas y aprovechando que ya estaban entrados en ambiente hicimos La Víbora de la Mar, primero la de las mujeres y luego la de los hombres, la más pesada, a mi esposo lo cargaron y encima se subió otro amigo de él, entre todos los aventaron, fue muy divertido. Después aventé el ramo y se lo ganó mi tía... y la liga se la ganó el novio de una de mis mejores amigas después de que mi esposo aventó el liguiero.. ¿qué creen?: comenzó a bailarme sobra la silla y haciendo que se quitaría la ropa fue super divertido, (obvio yo no le bailé) después de eso comenzó la batucada, el baile, el alcohol... hasta que llegó la hora de cerrar la noche, la gente no se quería ir, todos estaban bailando contentos, pero ya era muy tarde y al día siguiente teníamos torna boda, así que nos despedimos y subimos a la suite, llegamos y la habitación nos esparaba con una botella de champagne y rosas, entonces nos sentamos en el balcón, miramos la playa (el lugar que nos había unido) y brindamos por haberlo logrado, porque para ambos había sido una noche inolvidable y maravillosa.