La boda de Emmanuel y Isela en Guadalajara, Jalisco
Al aire libre Primavera Vino 3 profesionales
E&I
29 Abr, 2017La crónica de nuestra boda
Querido esposo: te he de amar de una manera tal que te vas a preguntar si antes de mí, alguien siquiera te amó...Con Amor, Isela 29 de abril 2017. Corrían las 7:00 am y yo estaba ya despierta. Me quedé un tiempo para agradecer a Diós haber llegado a tan esperado día y noté que aún no tocaban en la ventana los rayos del sol y me asusté, pegué tremendo brinco y corrí a abrir la puerta de la recámara que da al patio para ver el cielo: ¡Nublado! Mi corazón se aceleró y pedí con toda mi fe que no lloviera si no mi montaje en jardín se vendría abajo y de repente, el sol ya resplandecía en todo el firmamento. Me cambié, y fui a repartir la última invitación que me faltaba y me fui a confesar para poder comulgar. Dadas las 12:00hrs. nos vimos mi marido y yo para llevar al jardín ciertas cosas que nos faltaban. El proveedor de las pérgolas se suponía llegaba al lugar entre 10 y 11 am y aún no llegaba, pero no me asusté pues la recepción sería hasta las 21:00hrs. Entonces me dediqué a seguir con lo mío. Desayuné un poco de huevo con frijoles que hizo mi abuelo en su casa (ahí estaba yo ayudando a mis tías que hicieron el montaje del mueble de postres). 13:00 Me fui rápidamente a casa de mi madre a bañar pues la maquillista llegaba a las 14:00. Cuando llegué sólo estaba mi papá pues mi mamá y mi hermana ya estaban con su arreglo personal en el salón, comenzaban a caer las gotas de la regadera cuando escuché a lo lejos a mi papá que me decía algo sobre que habían llegado unas flores, y no le presté atención y me metí al agua mientras caían las gotas en mi cara y trataba de relajarme, recordé las palabras de mi padre y recordé que a las 13:00hrs llegaba mi ramo, me asusté y grité: ¡El Ramo! y, traté de darme prisa y salí sin secarme a rescatar mi hermoso arreglo floral, pues podría deshidratarse. Ahí estaba, hermoso sólo como él, diferente, despeinado, mechudo, desalineado pero único, con algunas flores marsala precioso y decorado con un listón del mismo color que hacía juego perfecto con los colores de mi boda. Se llegaban las 14:00hrs y mi maquillista no llegaba, le di 15 minutos de tolerancia y ¡No llegaba! así que le marqué y me dijo que estaba con otra clienta (mi prima política que vive cerca de la casa de mi mamá invitada también), y que en 10 minutos llegaba. Llegó 14:45. Comenzó a transformarme, tiempo después llegaron los fotógrafos e iniciaron con el getting ready. Llegó mi mamá y mi hermana y me ayudaron a ponerme el vestido y mi sobrino tomaba fotos con mi iPhone también. Cuando llegó la hora de la bendición, fue cuando me cayó el 20, (me vi vestida de "blanco" y me dije: "¡Isela ya es la misa, llegó la hora!") y mi mamá no podía, se le salieron unas lágrimas y a mí también jeje y que la regaño: ¡Martha, ya! si no ni quién nos pare, le dije, y en eso el primo de Emmanuel (mi marido) Julio, ya nos esperaba en el coche para partir al Templo. Llegamos antes así que Julio decidió dar un par de vueltas por el centro de la ciudad para hacerla de emoción. Faltando 5 minutos a las 18:00hrs. llegamos y Emmanuel ya estaba ahí, dándome la espalda, nuestros padrinos de velación Luly y Chilo, no lo dejaban voltearse. Entonces decidí bajar del coche y pronto Lalo, el novio de mi rommie y una de mis mejores amigas, corrió a ayudarme a bajar. Tomó el ramo con una mano y con la otra me ayudaba y no me fijé y estuve a punto de caer, pero me sostuvo y sólo exclamé con un pequeño grito. Me acomodé el vestido y ahí estaba yo, firme. Y así sentí todas las miradas en mí, así que ya estaba media chiveada y nerviosita, y frente a mí, mi Meño, mi marido, con ese traje azul que se le veía tan bien. Nos acomodamos para el cortejo y daba iniciada la misa. Entraron los niños con el letrero y los pétalos de rosa y enseguida nosotros, mi papá a mi izquierda y mi madre a la derecha, de los nervios no me di cuenta que no la tomé de la mano (si me arrepiento) pero me di cuenta hasta que vi las fotos. Y así nos dirigimos al altar, ahí estaba él impaciente esperándome. Durante todo el tiempo de preparación y organización y leyendo los debates de la comunidad, trataba de imaginarme qué pasaría o sentiría cuando caminara hacia el amor de mi vida y ya estaba ahí, caminando lentamente y Emmanuel jamás me volteó a ver, y cuando llegamos a él mi papá se quedó mudo y no supo que decir, y me miró y reí y le dije sólo dale mi mano y no me escuchó y tuve que inventarme algo para que no se notara y sostuve la mano de Emmanuel, me miró, tampoco supo que decir, yo sólo sonreí. Mientras caminaba hacia el altar, oré con todas mis fuerzas, con toda mi fe, que las cosas nos salieran bien, tanto la boda como lo relacionado con nuestro matrimonio y alguna que otra vocecilla me susurraba diciéndome "Isela derecha, no te caigas, firme." Comenzó la ceremonia, fue un poco larga, pero linda, siempre estuve serena, porque cuando los nervios me traicionan parezco mensa y sólo estoy riéndome o mordiéndome los labios así que traté de estar tranquila para verme bien en las fotos, (cosa que no me salió). Cuando iba entrando a la iglesia la vi vacía y me puse un poco triste, pero en ciertos momentos de la misa voltee a verlos y la iglesia estaba llena y es que todos entraron detrás de mí. Me puse mega feliz, ver ahí caras que no pensé ver, y a los que nunca me abandonan. Hubo un momento que me sentí perdida en el tiempo y fue a la hora de colocar los anillos, ahí fue cuando me dieron ganas de llorar al vernos a los ojos y decir los votos, yo no titubee ningún momento y Emmanuel también lo hizo bien. Mi madrina de lazo colocó mi velo sobre los hombros de Emmanuel y lo agradecí infinitamente. Terminaba la misa y yo esperaba el "puede besar a la novia" y nunca llegó, así que fuimos entonces a llevar el ramo a la virgen y ahí fue donde derramé un par de lágrimas ¡le pedí tanto! Nadie salía del inmueble, todos nos veían y esperaba a que saliéramos primero así que cuando salimos había poca gente a fuera que nos recibiera pero si nos alcanzaron a arrojar los pétalos de rosa que mis pajes llevaban, aun así nos llevó alrededor de 20 min. llenarnos de abrazos por todos, y comenzaron las fotos y no estaban ni mis papás, ni abuelos ni los papás de Emmanuel, así que no hubo fotos con ellos. Después ya no nos alcanzaba el tiempo para la sesión de novios, así que salimos a la recepción después de media hora, dimos algunas vueltas por la ciudad. En ese inter, Emmanuel me dijo que había recibido una llamada del banquetero y ahí comenzó mi estrés. Le dijo que el proveedor que nos montaría las pérgolas de madera aún no terminaba de montar, me preocupé y rápidamente le marqué a ese proveedor y me tranquilicé cuando me dijo que sólo se había entretenido en colocar una tela porque estaba haciendo mucho aire pero que ya estaba arreglado, para ese entonces ya eran pasadas las 20:00 y yo había citado a la gente a las 20:30. Entonces recibí una llamada de una tía que el de la puerta no los dejaba pasar que hasta las 21:00, y la gente empezaba a desesperarse por entrar, en seguida entró otra llamada de mi prima que fue madrina de ramo y me dijo: Isela, aún no está montado el mueble de postres ni hay papel ni luz en los baños, y me estresé, llamé al banquetero y me mandaba a buzón, a buzón, a buzón y le marqué al de las pérgolas, y me dijo que me calmara que el banquetero estaba ahí con él, me lo pasó y algo estresado me dijo: Ya, ya están dando el coctel de bienvenida, todo bajo control yo me encargo. Hablé con el del grupo musical y me dijo que él no estaría ahí que llegaba más tarde pero que ya estaba todo montado, no me pareció porque él es el mero mero y a quien le confié mi boda pero le creí en que llegaba después. A mi hermana se le olvidaron las hojas dode estaba el acomodo de las mesas así que eso fue una locura también pero entre dos de mis mejores amigas y mi hermana arreglaron el desorden de mis mesas. Pues total que la entrada fue hasta las 21:30 llegamos, y el lugar se veía muy lindo, la calidez de las velas, mis damas y madrinas y algunos de los invitados nos recibieron con las luces de bengala y aplausos, sonaba el himno de la Champions League la versión larga así que más me emocioné. Pero, como en todo esto, noté que el montaje tenía ciertos detalles que no debía, me faltaban luces, telas, en fin, pero eso sólo lo sabía yo, la demás gente ni lo notó todos se veían felices. Entonces tomé de la mano a mí ya marido y caminamos a la pista, sonaba el himno en la estrofa que todos conocen y entre risas (porque no es normal una entrada así con esa canción) recibíamos vítores, fue un momento bien padre. El programa tuvo que modificarse, eran las 22:00 y el chef no llegaba, por lo que no había entrada y mis invitados ¡no habían comido nada! Entonces para distraerlos adelantamos el baile de novios, fue un lindo momento, mis damas se acercaron con otras luces de bengala a acompañarnos, sonaba el grupo con la canción en balada Sólo con verte, y Emmanuel se puso a llorar, sentí tan lindo, ver sus ojos llenos de lágrimas me parte en miles de cachitos, así que lo limpié y yo me aguanté (ya saben cómo siempre yo de "fuerte") y le dije que lo amaba y en eso me dijo, cantemos nuestra canción, y ahí me perdí en el tiempo. Recorrí todo nuestro noviazgo, desde que lo conocí hasta el momento en que me pidió matrimonio, y es que la química entre él y yo se dio desde ese beso que me robó y no me creía estar bailando con él esa que es nuestra canción. Terminado el baile, abrimos pista con la canción "Yo no sé mañana" y ahí también nos acompañaron nuestras damas y comenzaron a acercarse los invitados para dar inicio al baile. Después llegó el chef y ¡a cenar! para esto, parte de mi familia se me acercó para decirme que hacían falta dos mesas de comida, que aún no les llevaban, y una tía comenzó a calentarme la cabeza en buen plan: falta esto, falta lo otro y dile al banquetero que eso qué y blablablá, medio nos molestamos (más) Emmanel y yo, pues nos había quedado muy mal el del banquete, pero dije ya está la cena, cenemos. Y por las prisas, no se transmitió la semblanza, se me olvidó por completo por como andaba y ya hasta después me acordé. Fue el único momento que me senté, y ahí me puse a observar todo. Los niños jugando en el brincolín y el las praderas del jardín, ellos estaban felices con su pizza, las pérgolas le dieron un toque bohemio al lugar, cada pérgola estaba entretelada y con luces vintage que volvían aquello más romántico y original, la alberca nos falló un poco junto con el aire que volteó los arreglos florales que mi tía pretendía poner a flotar, así que sólo decoró con unos globos como mamparas de luz, pero se veía lindo, mi mesa, fue la mejor, montada sobre una cama de bloques de madera (que por alguna razón la forraron con una tela blanca eso yo no pedí, pero no se veía mal) rodeada de bombillas de luz y flores, sobre ella el hermoso arreglo floral que mi tía me hizo y como cereza en el pastel mi letrero dorado de Mr. & Mrs. y mis copas y vino fungían como decoración. Como back tuvimos unas repisas de madera con velas que nos sirvió de muro para las fotografías, aquello se veía ¡chulo! Las mesas de los invitados no se quedaron atrás, unas lindas mesas cuadradas con un mantel beige con diminutas líneas doradas y tintas con toques rosa palo la cubrían, como plato trinche unos de color nogal, de madera, y en el centro un arreglo floral hechos por mi tía, y cada mesa numerada. Al centro la pista de baile de madera con puntos de donde se desprendía una tenue luz, le dio un toque mágico, al fondo el escenario. Después de comer, comenzó la música e iniciamos el baile con nuestros papás y padrinos. Y fue lindo pues yo nunca en la vida había bailado con mi papá, y es que es súper raro y amargado, así que nunca pensé que se animara, mi idea era bailar una de su grupo favorito pero con el temor de que no se animará mi idea se fue a la basura, pues se animó y bailamos, después siguieron mis suegros, ya medio ebriecitos, mi suegro payaseaba (bailando tipo cantinflas) para quitarle el tedio al momento y se escucharon unas risas y porras de la familia, siguieron mis padrinos y siguió el baile. El representante del grupo nunca llegó, así que ya sabrán, los integrantes no estaban haciendo bien su chamba, unos hasta a sus familias llevaron, no tocaban mal pero los vocalistas no se sabían las letras de algunas canciones y hasta sacaban la letra del celular y detalles de eso que más me molestaban. Pero yo veía que todo marchaba "bien" con los invitados, así que seguí bailando con mi marido. Llegaba la hora de bailar lanzar el ramo, así que aproveché pasa sacar los flats para las chicas que participarían en la víbora, todas alcanzaron perfectamente, tomé 7 flores que adornaban mi mesa y fueron las 7 que arrojé, pero eran margaritas así que al llegar a las manos de mis chicas llegaban pelonas sin pétalos. Y que se me olvida darles los ramitos a las ganadoras, todo pasa tan rápido que lo que menos quieres es perder tiempo así que terminado el lanzamiento del ramo mi marido seguía con un sexy baile para quitarme la liga, que como recordarán tenía una botellita de tequila. Fue un momento divertido pues me vuelve loca mi Meño y creo que las fotos lo dicen todo, y es que mi marido me encanta y aparte ¡tiene mega pompa! así que se meneó con cachondez y gracia, se hincó frente a mí y sacó primero la botella de tequila y luego me quitó la liga. Se suponía que la botellita era para el ganador de la liga pero Meño se la tomó. Seguía la víbora así que mis amigos y los de Emmanuel, así como sus hermanos hicieron un desastre con la fila, tumbaron a Meño y mi cuñado que fue mi padrino de lazo, se subió a la silla conmigo a sostener el velo y los chicos junto con mi marido hicieron una especie de "slam" y ya pasado esto Meño se volvió a subir a la silla y lanzó la liga que la ganó mi amigo Miguel, que ya es casado, así que la volvió a lanzar pero ahora a un amigo que está próximo a casarse pero no quiso levantarla del suelo y que se avienta un hermano de Emmanuel, fue algo muy divertido. En ese momento, agarraron a Emmauel para lanzarlo, pobres, ¡No podían! y es que está pesado mi gordito, lo lanzaron 3 veces, después lanzaron al que se ganó la liga, parecía muñeco pues está flaquito se parece a Goofy y literal, voló, y luego a mi padrino pero a él no lo pudieron y se cayeron, fue muy chusco. Seguimos después con el baile, y salió un zanquero que jugó un poco con los niños que también bailaron, repartieron props y yo repartí los cilindros. Se tocó las típicas canciones de caballo dorado etc. Se repartió el café y los postres. Unos deliciosos postres que mi hermana me hizo, estaba montado en un mueble viejo de mi abuela que pintamos, cada repisa tenía gelatinas, cupcakes y otras galletitas y postrecitos, así como mi pastel, un red velvet que también me hizo, relleno de queso crema con frutos rojos y adornado con flores naturales, ¡riquísimo! le dio un toque padrísimo al mueble decorado con flores y velas, se veía precioso. Y se hicieron las 2:00 am. El final de nuestra fiesta. Aún quedaban invitados, la mayoría nuestra familia y mientras desmontaban, hicimos el brindis, creo que era desde antes pero me encantó porque fue un momento muy íntimo, nos dedicaron unas lindas palabras algunos tíos y padrinos y partimos el riquísimo pastel, lo que no me gustó es que ya no estaban los fotógrafos, pero mi primo estrella grabó todo así que no me preocupé. Y así fue que estuvo mi día, creo que me hizo falta disfrutar más, me preocupé demasiado por los detalles, mi cabeza sólo pensaba en que mi gente estuviera bien, pero, lo mejor llegó cuando recibimos miles de felicitaciones porque a pesar de que los músicos la regaron y se sirvió tarde de cenar, todos quedaron encantados con nuestra boda, los sorprendimos con el cambio que dio el lugar. Recibí una felicitación especial del dueño del lugar porque nunca se había hecho algo así en su terraza y pidió tomar miles de fotos para el recuerdo, de mi familia porque todos me preguntaban ¿cómo le hiciste?, incluso mi jefe cuando llegué de la luna de miel me dijo que le encantó, que fue una boda muy mía y muy a mi estilo y que en cada rincón se respiraba mi esencia. Mis padrinos y sus hijos me dijeron que la comida había estado riquísima y que se la pasaron de maravilla y así miles de comentarios. Y ya no le sigo porque me emociono, lo único que les puedo decir es que disfruten hasta de los tragos amargos, porque cuando llegan los dulces se disfrutan más. Y así se termina la historia del mejor día de mi vida. Y recuerden que todo se puede si se hay amor.
Otros Proveedores
Otras bodas en Jalisco
Ver todas
Inspírate con estas bodas
107 comentarios
Deja tu comentario