La boda de Eugenio y Tanya en Bahía de Banderas, Nayarit

Ya bastante relajada y feliz corrí a vestirme pues casi era la hora de tomarme las fotos con mis damas (pues mi novio no quería verme antes de la ceremonia) así que me vestí en el cuarto de mis abuelos con la ayuda de mi abuela y mi mamá. Los nervios regresaban poco a poco.

Nos tomaron las fotos y los nervios aumentaban pues aunque todo era en el hotel yo no veía nada listo; casi era la hora de la ceremonia y me fui a esconder al spa, que estaba cerca de la capilla, y solo veía a los invitados ya muy guapos pasar por ahí para la misa, estaba super nerviosa y emocionada pero también preocupada pues no sabía si ya estaba todo listo.

Finalmente llegó mi papá por mi y salimos hacia la capilla, nos detuvimos un poco antes pero yo podía ver perfectamente como todos se estaban acomodando y listos para entrar, mi papá estaba muy emocionado y yo, pues bueno, era mi boda.

Empezó a entrar el cortejo y finalmente entré yo, todos estaban muy emocionados pues realmente las personas que nos acompañaron fueron amigos y familiares muy cercanos que quisieron acompañarnos hasta allá, así que todos estábamos muy felices.

Después de la ceremonia salimos de la capilla y nos dirigimos hacia el civil, que sería en una terraza con vista panorámica al mar, estuvo maravilloso, todo muy romántico con la vista preciosa, al final hubo un brindis con todos los invitados y un pequeño coctel con aguas frescas para el calor.

Después de eso y en lo que los invitados se acomodaban sus lugares y en la recepción, nos tomamos las fotos en la playa muy románticas, cuando terminamos hicimos nuestra entrada triunfal a la fiesta en la que entramos con una canción muy divertida así que bailamos y todos estábamos super felices.

En ese momento aprecié la decoración del lugar y fue justo lo que soñé y pedí todo este año. una decoración vintage en la playa con mesas de madera, series de luces y letras gigantes, los centros de mesa estaban padrísimos pues eran regaderitas, marcos, cajitas con flores todo padrísimo y bueno pues de fondo el mar que estaba en su máximo esplendor y el clima no pudo haber sido mejor.

Cenamos y después de eso fue nuestro primer baile, la canción fue “A Thousand Years” y fue super lindo ese momento, después bailamos con nuestros papás y los padrinos, hicimos un brindis muy emotivo y bailamos un segundo vals con la canción “Chasing Cars” y al final de esta salió la pirotecnia padrísimo, duró muchísimo y a todos nos encantó.

Y bueno de ahí comenzó la fiesta y la disfrutamos como nunca con todos nuestros familiares y amigos, de verdad no pudo haber sido mejor, jamás la olvidaré y estoy encantada con mi boda.