La boda de Jean y Marielys en Toluca, Estado México

La crónica de nuestra boda

Fue hermoso, tuve la oportunidad de que mi papá viera mi vestido justo antes de salir de mi casa. No sé ustedes, pero a mí me dio hambre en el camino y me iba comiendo unas deliciosas galletas. Llegamos temprano entonces estuve escondida un ratito en un cuartito que nos prestó el salón para guardar nuestras cosas.

Mientras caminaba al altar mi papá y yo veníamos contándonos chistes para salir espectaculares en las fotos. Cuando llegué enfrente me puse nerviosa, todos nuestros invitados mirándome y uno que otro limpiándose la lágrima. Quisimos hacer una ceremonia totalmente distinta, mi papá me dio un anillo de promesa hace 12 años. En la entrada él me dijo unas hermosas palabras y me puso el anillo como collar, después comenzamos con la entrega de la biblia (lo más importante para nosotros dentro de una ceremonia cristiana, por eso la pusimos al inicio). Después... comenzamos con la predicación, al finalizar trenzamos el cordón de 3 dobleces mientras nuestros padrinos nos leían Ecl. 4:9,12, para la unión familiar decidimos plantar un arbolito hermoso y nuestra familia le puso muchas flores al rededor, no olvidemos los anillos ... El momento más especial en el que Jean y Yo leímos nuestros votos y nos reímos un poquito, al terminar la ceremonia comimos unos deliciosos esquites, le pegamos a la piñata e hicimos nuestra entrada triunfal al salón. Ccenamos unos deliciosos platillos y comimos un pastel de naranja, bailamos un poco y nos tomamos muchísimas, muchísimas fotos, mi momento favorito... Cuando vi los hermosos ojos de mi esposo al leerle mis votos.