La boda de José Antonio y Karen Dayanira en Culiacán, Sinaloa

La crónica de nuestra boda

El gran día había llegado, estaba muy nerviosa y al mismo tiempo emocionada, por la mañana fuimos a llevar los recuerdos al salón, cuando entramos y vi la decoración, me moria de nervios y a la vez ya queria que llegara la hora.

Los nervios y la emoción aumentaban conforme pasaban las horas, ¡por fin!! mi mamá y mis hermanos me ayudaron a ponerme el vestido, accesorios y demás cosas, en ese momento sentía que se me saldría el corazón ya estaba ansiosa por ir a la iglesia. Me fui en carro acompañada de mi familia (padres y hermanos), cuando llegamos a la iglesia, salió el Sacerdote nos dió la bendición y caminamos hacia el altar donde estaba el hombre de mi vida.

La ceremonia fue grandiosa rodeados de familia y amigos, la fiesta ni se diga, disfrutamos cada momento y nos divertimos como nunca, hubo algunos detalles que no salieron como esperábamos en cuanto al salón que contratamos pero era nuestra noche así que no dejamos que eso nos opacara el momento. Al final nos fuimos a nuestra casa y hasta hoy seguimos emocionados y muy felices, vemos las fotos y el video casi todos los días.