La boda de José Carlos y Itzel en León, Guanajuato

En cuanto al atuendo del novio, fue, elegir un traje charro, fue café, portando cada uno de los accesorios, desde el moño hasta un cinturçon bordado en plata.El vestido de la novia, un grandísimo caos, pues la novia quería un vestido único, algo diferente, y se dedicó a buscar alguien que pudieraa bordarle unas flores, si, se escucha raro, un vestido bordado con flores de colores.

A pesar de que fueron dos vestidos los que se bordaron, puesto que el primero no quedó como la novia quería, además de gastar obviamente doble dinero, sin importar, pues lo único que importaba era que mi esposa quedara satisfecha, y claro, cumplir su deseo, pues era su vestido, quedó algo diferente pero para mi ella se miraba hermosa.

Se llegó el dia, sábado 12 de marzo por la mañana, despertamos, nos miramos fijamente y sonreimos el uno al otro, yo por supuesto me fui a casa de mis papás pues habria que ver a la novia hasta el altar, y asi fue.

Lleno de ansiedad, de nervios, mis manos sudaban y mis piernas temblaban, se llegó la hora de partir a la parroquia.

2:20 de la tarde y la novia no llega, comenzaron los comentarios: "no llegó la novia, seguro se arrepintió", bueno yo seguía lleno de nervios.

Por fin llegó la novia, cuando la vi sin duda alguna supe que ella era la indicada, se veia aún más hermosa, y nuestras miradas se encontraron, los dos estabamos muy nerviosos.

La ceremonia religiosa, sin duda, fue la mejor. A la salida, yo tenia una sorpresa para ella, una hermosa calandria, y un par de caballos nos esperaban para llevarnos a la recepción, su reaccion de ella fue darme un beso y logicamente estaba muy emocionada.

Nos subimos y partimos a la recepción, al llegar nos esperaba el mariachi y un arreglo totalmente colorido, una fiesta llena de vida y color. Un hermoso recuerdo a la entrada, las fotografias de las personas que nos dejaron en esta vida terrenal, mi hermano que ya tiene 9 años que nos dejó, su abuelita que tambien tiene 9 años que murió y los más recientes su tia y su abuelo, algo muy triste, pero muy bonito hacerlos presentes por ese medio. Las lágrimas no esperaron y se hicieron presentes en nosotros y en muchos de nuestros familiares, pero todo estaba perfecto, tal como lo queríamos.

Nuestro menú: de entrada sopa azteca, plato fuerte un hermoso chamorro en adobo acompañado de ensalada de lechuga y sopa de arroz, y de postre nos esperaba una charola enorme con dulces tipicos (camote, biznaga, guayabate). seguimos con el típico vals, la vibora de la mar, el muertito, el lanzamiento de ramo.

Pero las sorpesas no terminaban, pues comenzó a encederse el cielo con fuegos artificiales, regalo por parte de mi esposa, me sorprendió totalmente. Que siga la fiesta.

La fiesta siguió, con un poco de musica de banda y tambora, la fiesta duró 10 horas, las cuales para mi y mi esposa fueron sin duda las mejores, de esos momentos inolvidables.

La volvería a elegir una y mil veces.