La boda de José y Erika en San José del Cabo, Baja California Sur
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J&E
16 Oct, 2019La crónica de nuestra boda
Nuestra boda se realizó en Santorini, Grecia, en un restaurante situado en un risco con vista al mar Egeo en el área de Pyrgos, una ciudad que anteriormente era la ciudad principal de Santorini que está justo en el centro de la isla. Toda mi familia nos hospedamos en una villa que estaba a solo 500 metros del lugar de la boda, llegamos con dos días de anticipación a la isla, así que tuvimos algo de tiempo para explorarla.Es un lugar mágico, muy pacífico, sus habitantes son muy amables, de hecho estaban muy emocionados por tener a tantos mexicanos, ya que no están acostumbrados a tener tantos visitantes de aquí, y como al final fuimos 70 personas, varios lugares de la zona nos preguntaban que si veníamos con el grupo de mexicanos que iban a celebrar una boda.
Tuve tiempo de ir a explorar Fira, otra ciudad cercana a Pyrgos y encontrar una pequeña florería local llamada Margarita’s Flowers para poder hacer mis centros de mesa, ya que las flores son bastante costosas en Santorini. El único problema es que no tenían rosas blancas y tuve que jugármela y esperar a que las flores llegaran desde Atenas en barco el mismo día de la boda por la mañana. Entonces así empezó mi día, me bañé y fui corriendo a Fira por las flores, que por suerte estaban listas y hermosas.Cuando llegué de nuevo a la villa, las maquillistas ya estaban ahí, listas para empezar. Había en la Villa una señora griega llamada María, encargada de llevar la propiedad. Fue muy amable, me dijo que era muy raro que en esas fechas hiciera un clima tan bonito en la isla, normalmente siempre está haciendo mucho aire, yo ya me había preparado para eso y también había prevenido a mis invitados, pero por suerte el día estuvo perfecto. María mencionó que nosotros debíamos de estar muy bien con dios, porque nos regaló un clima muy bonito.
Seguir leyendo »Cuando terminaron mi peinado y maquillaje, mi mamá y mi hermana me ayudaron a ponerme mi vestido, y al final el velo de novia. Ya tenía mi ramo y cuando me di cuenta ya faltaban solo 20 minutos para la hora de la ceremonia. Todos se fueron primero, solo quedamos mi papá y yo al último. Cuando me subí al carro fue cuando empecé a ponerme nerviosa y a sentir mariposas en el estómago.Cuando por fin llegamos a Venetsanos (lugar de la boda) me bajé del carro, Kostas, el coordinador el día de la boda, llegó a recibirme y a decirme que todo estaba listo, que no tenía que preocuparme por nada. Yo estaba un poco nerviosa porque la música que había elegido estuviera en el formato correcto, así que volví a preguntarle, ya que en realidad era mi única preocupación. Bueno, eso y que la comida estuviera rica, ya que por el tiempo no hicimos una degustación previa.
Kostas me confirmó que todo estaba bajo control, que en un momento pondrían la música de entrada. Mis hermanas estaban también ahí, ya que entrarían primero. Pasó un minuto y en eso la música, Somewhere over the rainbow comenzó a sonar. Mis hermanas bajaron por las escaleras, y después nos llegó el turno a mi papá y a mí, creo que iba demasiado rápido porque mi papá solo me dijo en voz baja “Más despacio,” pero yo ya quería ver a Pepe y en eso a la mitad del camino, él se voltea y me ve por primera vez, ya vestida de novia. Les dejo la foto para que vean su reacción, es de mis fotos favoritas de la boda.
Cuando terminó la ceremonia, brindamos con champagne con nuestros invitados y empezó el cocktail, mientras Pepe y yo íbamos a hacernos las fotos. Duramos unos 50 minutos en la sesión y cuando regresamos ya estaba lista el área de la recepción. Nos presentaron y caminamos juntos para saludar a todos y sentarnos en nuestra mesa. Mi papá dió un pequeño discurso a la hora del brindis, del que seguimos Pepe y yo, agradeciendo a todos por habernos acompañado tan lejos en nuestra aventura o en nuestra locura, que nos sentíamos muy contentos y muy afortunados de contar con personas que nos quisieran tanto.Después de eso ya todo pasó muy muy rápido, se abrió el banquete, la comida estaba deliciosa, aunque a mí la verdad la comida me encanta y casi siempre digo que todo está muy bueno, pero al final del día recibí muchos comentarios que confirmaron que efectivamente sí estuvo deliciosa. La mayoría de los invitados me lo mencionaron, y mi papá que ama la comida como yo, no paraba de decirlo. Todavía si le mencionamos el tema de la boda, siempre repite que todo estuvo riquísimo. Siguió el corte de pastel y justo cuando terminamos de cortar el pastel y las fotos, comenzó a sonar la música de nuestro primer baile: "Pasos de Cero" de Pablo Alborán, creo que nos quedó muy bien y eso que solo la ensayamos una sola vez.
En el momento cúspide de la canción se lanzaron fuegos artificiales, esto fue una sorpresa para los invitados, ya que nadie sabía, solo Pepe, mi mamá y yo. Todos se emocionaron mucho y empezaron a aplaudir, y nosotros estábamos tan contentos. Siguieron los tradicionales bailes de padre e hija, y madre e hijo.Cuando terminaron estos bailes el DJ abrió la pista, la verdad nunca me imaginé que toda la gente se pararía a bailar, la pista siempre estuvo llena, me sorprendió muchísimo que todos mis hermanos (tengo 2 hermanas y 1 hermano) se pararon a bailar conmigo. Mi abuela, mis tías, mis papás, en fin, todos estábamos bailando y no paramos en toda la noche, hasta que llegó la hora de despedirnos.
Obvio no pudo faltar la cancinó de "Payaso de rodeo". Les dejaré fotos también de la fiesta para que puedan ver las caras de los invitados, cuando veo estas fotos no puedo evitar que se me forme una sonrisa en la cara. Me divertí como nunca, creo que ni en mis mejores sueños me la habría pasado así de bien.No cambiaría nada, bueno, tal vez dos cosas, la primera, es que por andar bailando ya no repetí cena, jaja, y además por lo mismo no me di cuenta en qué momento sirvieron el postre, así que no me tocó. La segunda es que en verdad, llevé 3 ligas diferentes ya que no podía decidir cual ponerme, y una vez que ya había tirado el ramo, de repente me habla una tía de Pepe y me dice “Erika, ¿cuándo vas a tirar la liga?” Ahi fue cuando me di cuenta, que no me la había puesto, y le dije, “¡Se me olvido!”, en eso se queda buscando y me dice, “Ven, te voy a amarrar esta servilleta.”
Me dio mucha risa, pero si me la amarraron y después, no se quien se dio cuenta de esto pero empezó a sonar la música, ya tenían una silla puesta para mí y Pepe estaba hasta el otro extremo. En eso se voltea y empieza a hacer un show, siempre le ha encantado bailar, y dar su espectáculo y este momento no fue una excepción. Fue muy chistoso, se tiró al piso y gateó hasta llegar a donde yo estaba, a mí me dio pena y risa. Cuando quiso sacar la liga me quería subir el vestido, y yo le decía, “¡Amor, cuidado!” También les dejo la foto de este momento para que vean las caras de todos.
Y así fue este día tan especial, nuestros invitados se divirtieron muchísimo, y nosotros ni se diga. No puedo creer todavía lo rápido que se pasó el tiempo. Abrí la aplicación de bodas con más de 500 días de antelación, elegí mi vestido con 1 año de anticipación y el momento se pasó en un abrir y cerrar de ojos. Lo bueno es que lo disfruté, me relajé, dejé que los coordinadores hicieran su trabajo y yo simplemente me sentí como una reina, todos estaban al pendiente de mí, preguntando si todo iba bien, Kostas, los meseros, en fin, todo fue magnífico, no puedo pedir más. Ahora estamos planeando reanudar votos cada 10 años, para viajar a un lugar diferente, solo que esta vez Pepe y yo solos, o quien sabe tal vez con nuestros hijos.
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