La boda de Miguel y Luz en Escuinapa, Sinaloa
Al aire libre Otoño Azul 1 profesionales
M&L
05 Oct, 2014La crónica de nuestra boda
Un desastre que se volvió perfecto: así calificaría la unión civil con mí ahora bella esposa.
Aclaro que no soy muy bueno para escribir pues las palabras a veces no son suficientes para expresar todo lo que uno siente, soy más bien un hombre de acción, y vaya que nuestra relación ha llevado mucha acción.
Siempre lo dije desde que era un niño "esa niña va a ser mi esposa", y lo que digo lo cumplo. Mi amigo aún se ríe y se asombra de que las cosas así hayan pasado. Nos conocimos desde niños, crecimos juntos como amigos aun en la distancia hasta que llego el día en que me anime a pedirle que fuera mi novia. Desde ahí, nuestras vidas cambiaron y nuestra relación nos llevó por muchas pruebas, buenas y malas pero que nos han unido más que nunca. Cuando le pedí matrimonio, las cosas cambiaron aún más, era imaginarse que todo estaba más cerca de ese momento donde despertaría teniéndola a mi lado por siempre. Nuestra primera unión fue el 5 de octubre del 2014, justo el día de mi cumpleaños para que fuera doblemente especial que mejor regalo que tener a mi esposa a mi lado.
Seguir leyendo »Centrándonos en la boda, les puedo decir que lo que parecía un desastre al inicio por tantos contratiempos, problemas y cosas que se nos salieron de control, termino siendo perfecto. Para empezar, decidimos hacerlo nosotros mismos desde la decoración del lugar hasta los centros de mesa. Pero no contábamos con que el mueble llegaría tarde, la bebida igual y que hasta se nos perderían las llaves del carro lo que ocasiono que el tiempo se fuera volando y que la ceremonia empezara 2 horas más tarde.
La boda civil fue intima, solo estuvieron las personas más cercanas a nosotros para poder convivir con ellas tranquilos y relajados. Ellos nos ayudaron muchísimo, pues se encargaron de la comida, cada uno llevaba un platillo diferente que termino siendo un buffet para todos desde mariscos hasta carne y mesa de dulces y frutas. El local donde fue la unión es un centro recreativo con jardines, tobogán y alberca así que los niños y los no tan niños estaban alegres refrescándose bien divertidos incluyéndonos nosotros. La ceremonia fue sencilla (propia de una civil) corta por los tiempos, pero bonita para todos. Tras declararnos marido y mujer ante la sociedad, tuvimos sesión de fotos con invitados y una extra de nosotros dos como recuerdo.
Comimos después de no tener ningún alimento en el estómago por las prisas y el alma volvió al cuerpo. La música empezó y todos al centro a bailar, un baile que termino a las 9 de la noche en el local y que se prolongó hasta las 6 de la mañana después de llevarnos la fiesta a mi casa. Solo puedo decir que todo valió la pena. Hubo muchos gastos pero el día lo ameritaba y con sacrificios y esfuerzo todo se puede. Acabamos rendidos otro día pero felices de estar legalmente unidos y esperando ansiosos la boda religiosa que sería en diciembre para estar siempre juntos. Dos bodas, dos fiestas, doble gasto. Pero cuando se quiere se puede, eso hay que tenerlo en mente.
Servicios y Profesionales de la Boda de Miguel y Luz
Otras bodas en Sinaloa
Ver todas
Inspírate con estas bodas
4 comentarios
Deja tu comentario