La boda de Montse y Edson en Cancún, Quintana Roo
Elegantes Primavera Blanco 2 profesionales
M&E
07 Jun, 2014La crónica de nuestra boda
Nuestro sueño por mucho tiempo fue realizar una boda íntima con nuestras familias y amigos más cercanos. No una boda tan grande donde termina asistiendo el vecino del tío del abuelito de tu prima segunda. Sino realmente personas que conocemos, pero sobre todo que apreciamos. Por ello siempre nos habíamos inclinado por hacerlo en otro destino diferente, además de que nos encanta viajar, sería el pretexto perfecto para un viaje “familiar”.
Pues bien, elegimos Cancún porque nos encanta su playa, sus vistas. Queríamos casarnos en abril, cuando en marzo iniciamos los planes, queríamos que fuera lo más pronto posible puesto que ya estábamos casados por lo legal, no le veíamos caso a esperarnos más, pero se prolongó un poco por los permisos de la Iglesia de Monterrey y por la iglesia en Cancún. Tuvimos que alargar la fecha, y el gran día en que sonarían las campanadas fue el 7 de junio. El día 7 significaba para nosotros festejar un mes más de noviazgo. Nuestro 7 de la suerte.
Algo que nos angustió fue que el pronóstico del clima 20 días antes no cambiaba, la probabilidad de lluvia era del 80% y todo se había planeado para una boda al aire libre con la vista al mar, cerca de las piscinas. El hotel de nuestra boda nos ofreció dos alternativas como plan B, un restaurante o el salón multiusos. El lado negativo de ello es que en ambos predominaba mucho el color azul, pues es el color del hotel. Y todo en nuestra boda era en color Ivory. Pero los del hotel se portaron muy lindos y nos ofrecieron modificar ciertas cosas para que no predominara ese color, como cubrir con color ivory los castillos, muros, quitar cortinas azules y poner unas beige, etc.
Seguir leyendo »Pues bien, llegamos el miércoles antes de la boda para descansar pero resultó que hicimos todo menos eso, principalmente nos dedicamos a ver cuál sería el escenario ganador, falta mencionar que el día que llegamos estaba el cielo negro y las calles inundadas puesto que acababa de caer tremendo aguacero. Ya para ese entonces no nos angustiaba que lloviera, sino que pudiéramos realizar con tiempo los cambios al nuevo escenario. Se tuvo que cancelar decoración especial para las piscinas que estarían justo al lado de las mesas. Los centros ya no se pudieron cambiar, serían con leds y queríamos poner en su lugar velas. Pero no se pudo. Ni cambiar el tipo de pista.
Muchos de nuestros invitados decidieron llegar desde antes para poder realizar lo que les dije antes, “un viaje con pretexto, todos juntos”. El jueves nos fuimos al Coco Bongo a festejar nuestra despedida mixta. Y el viernes una “cena de ensayo” como acostumbran en otros lados, nosotros coordinamos con el hotel el menú y la decoración de las mesas. Se sirvió pozole de langosta, arrachera norteña (no podía faltar, somos del norte) y de postre crepas de cajeta con helado de vainilla. Todo delicioso y desde ahí ya se sentía el ambiente relajado y pachanguero.
Pues bien, el gran día llegó. Nos despertamos a las 9 AM. Yo me fui a desayunar con mis padres algo así como mi último desayuno de soltera. Mi amado estaba nervioso y dijo que traía el estómago revuelto así que prefirió dormir más, pobrecito, le angustiaba que no pudieran hacerse las cosas como las planeamos por el cambio de escenario. A las 12:30 llegó mi maquillista, mi mamá y yo estábamos listas para que hiciera su magia y quedáramos más hermosas que siempre. Para las 2:30 ya estábamos casi listas, con todo lo necesario a la mano para cambiarme. A las 3 llega nuestra fotógrafa con todo su staff de video. Querían realizar tomas del “antes”. Los últimos retoques, ahora sí, el vestido. Mi mamá decidió ponerse uñas postizas pero no está acostumbrada a traerlas y no podía abrocharme el vestido, así que la ayudante de la fotógrafa tuvo que entrar al rescate. Ahora se van los chicos a la habitación del mejor amigo de mi amado (ahí se iba a arreglar para no ver a la novia antes de tiempo) y le hacen las tomas de su “antes”. Nos llevan por separado al área de las piscinas y jardines para la toma de nuestra primera vez juntos todos guapos como novios. Fue alucinante. Se veía guapísimo con su traje color arena y su corbata. ¡Guapísimo! De verdad, no exagero. Y aunque en está relación la chillona soy yo, yo anduve de lo más tranquila todo el tiempo, pero él si traía el nudo en la garganta, así que apenas me ve y se le empiezan a llenar los ojos de lágrimas de la emoción, ¡mi vida, hermoso! yo traté de calmarlo, por cierto, las probabilidades de lluvia eran ese día de 60% ¿y que creen? Eran las 4 pm y estaba nublado levemente pero no había caído ni una sola gota de agua.
Nos fuimos entonces a la Iglesia. Rentamos un autobús para trasladar a todos nuestros invitados, ellos salieron primero. Llegamos nosotros a los pocos minutos y el padre salió a recibirnos. Por cierto, ese padre es un amor. Desde que lo conocimos nos cayó súper bien. Hizo que todo fuera relajado, muy emotivo. Lo amé. La celebración religiosa inició puntualita a las 5 pm. Ingresamos mi amado con su mamá, mi tía y mi prima como “damas” de cojines. Los pajecitos de 5 y 6 años, sobrina de él, sobrino mío. Mi “comadre” de rosario y Biblia junto con mi comadre de ramos y mi papi y yo al final, él también se veía guapísimo, iba con traje también arena y corbata azul. Iba tan formal porque dijo que no se entregaba en el altar a su única hija todos los días. Nuestros papás serían los padrinos de arras y anillos por ello es que no hubo mucha gente en el cortejo.
Paréntesis: Todos nuestros padrinos “compadres y damas” fueron simbólicos, nosotros pagamos todo, ellos solo se encargaron de hacernos la entrega ahí en la ceremonia. No quisimos que realizaran más gastos siendo que tuvieron que pagar hotel y avión para acompañarnos.
Pues bien, ¿si se fijaron que no mencioné lazo? Es que mi hermano con mi cuñada llegaron a Cancún a las 3 PM, pues no pudieron por trabajo llegar antes. Y llegaron barridos a bañarse y alistarse. Ellos no alcanzaron a tomar el autobús, tomaron un taxi y llegaron tal cual, barridos a la hora de ponernos el lazo. Fue chistoso porque el padre dice, pasen los padrinos de lazo, no se oía nada, ni un solo ruido, nosotros volteamos para atrás en búsqueda de nuestros padrinos y en eso por la puerta lateral vienen literal corriendo para ponernos el lazo, mi cuñada ya colorada por lo que tuvieron que correr. De verdad fue chistoso. El padre también se rio. E hizo bromas al respeto. Les digo, fue muy ameno el padre.
La iglesia está hermosa, si alguien desea casarse en Cancún, se las recomiendo, está muy ad hoc, está abierta, no existen ventanas. Y afuera hay palmeras, todo muy playero. La iglesia es blanca y muy grande. De verdad bonita. Se llama Cristo Resucitado. Ah y el padre se llama Alejandro.
Terminó la ceremonia, el padre se tomó fotos con nosotros después de poner el ramo de la virgen y se hacían las firmas. Al final, unas cuantas fotos con nuestros invitados y de vuelta al Hotel. Cabe mencionar que pedimos en las invitaciones de la boda que la vestimenta fuera: colores claros y hombres con guayabera. Entonces, todos cumplieron con la solicitud, todos como que combinados, se veía muy elegante todo.
Ya que tuvimos que cambiar el lugar de playa por un lugar cerrado, decidimos hacer una hora de cocteles y canapés al aire libre, viendo que no hubo lluvia estuvo perfecto. Se aprovechó para tomarnos fotos con vista al mar y refrescarnos ya que si se sentía un poco el bochorno. Los canapés fueron un éxito, ya que los invitados me veían y me decían que todo estaba exquisito.
A las 730 inició el pachangón. Entramos al salón con la canción de Marry you de Bruno Mars. Todos ambientados aplaudiendo y de pie. Fue emocionante. Nos dirigimos directo a la pista, para nuestro primer baile como esposos: Estar contigo de Alex Ubago y Lena. Al mismo tiempo que bailábamos, pusieron en una mega pantalla un video con fotos de nosotros desde que nos conocimos hasta el día anterior en la “cena de ensayo”. Siguió el video durante cada baile siguiente.
Con mi papi bailé Close to you de The Carpenters. Y dejen les cuento porque elegí esta canción. A mis papás les encantaba este grupo y esa fue su canción de vals en su boda hace mil años. Mi papá cada que le deja notas a mi mamá le pone al final en vez de atentamente o con cariño: Close to you. Y es una canción que para mí significa mucho también porque sé lo que representa para ellos, el tono de mi celular cuando me llaman ellos es precisamente esa canción. Bueno, han de saber ustedes que ellos no lo sospechaban ni tantito, les dije que la que bailaría con mi papá sería la “quien es él” o algo así. Así que los agarré desprevenidos al 100. Termina nuestra canción e inicia esa mi papá que estaba parado junto a la pista con mi mamá, se le llenaron sus ojitos de lágrimas. Eso sin dudas, no tiene precio para mí. Me dice mi papá que obvio le encantó la sorpresa, casi lloró yo también pero llegó la fotógrafa a distraernos, pidiendo una foto de nosotros, ¡qué bueno! porque no quería llorar. Mi mamá y mi amado se abrazaban ya que mi mamá también estuvo a punto de llorar, dice mi amado que le dijo que es como volver a recordar su gran día. Se imaginan. Hasta se me ponen los pelitos de punta de la emoción.
Servicios y Profesionales de la Boda de Montse y Edson

Otros Proveedores
Otras bodas en Quintana Roo
Ver todas

Dreams Jade

Mía Restaurant & Beach Club

Ak'iin Beach Club
Inspírate con estas bodas
7 comentarios
Deja tu comentario