La boda de Néstor y Monique en Guaymas-San Carlos, Sonora
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N&M
29 Oct, 2021La crónica de nuestra boda
Estábamos tan emocionados de finalmente tener una fecha para nuestra boda: octubre 2020. Estábamos radiantes cuando la organizadora de la boda en el hotel revisó todos los detalles y logró que firmáramos el contrato. Además de organizar un presupuesto, la única preocupación que teníamos era averiguar qué mis familiares y amigos de Inglaterra podían viajar a México para la boda. Esto fue a finales de 2019.
Luego, el COVID-19 llegó a México alrededor de marzo 2020. Esperamos ver cómo se desarrollaba la pandemia y, con gran pesar, decidimos posponer la boda civil (la más grande para nosotros) hasta 2021, ya que pensamos que las cosas deberían volver a la normalidad para entonces. Decidimos que seguiríamos adelante con la boda religiosa en octubre 2020, pero con una pequeña cantidad de personas. Dos semanas antes de lo que se suponía que sucedería, ambos contrajimos COVID. Cuando mejoramos, decidimos tener una pequeña ceremonia religiosa en enero de 2021. Fue difícil no tener al menos a mi familia inmediata allí debido a las restricciones de viaje, y fue difícil para Néstor no poder invitar a su gran familia extendida debido a el límite del número de personas. Aun así, tuvimos una ceremonia hermosa e íntima con solo nueve invitados (la familia inmediata de Néstor). Transmitimos la ceremonia y celebramos en el campo después.
Seguir leyendo »Para la ceremonia civil nos preocupaba tener que volver a posponerla, o que mi familia no pudiera venir, o mil restricciones más que se podrían haber puesto en el último momento.
Llegó el día. Mi familia inmediata pudo volar a México. Pudimos celebrar la boda en el hotel en el jardín junto a la playa durante las horas contratadas. Mientras caminaba por el pasillo con mi papá, sorprendí a mi esposo cantándole una canción en español. Yo estaba muy nerviosa, pero a él le encantó e incluso derramó una lágrima. Intercambiamos nuestros propios votos durante nuestra ceremonia simbólica, tuvimos una hermosa sesión de fotos y disfrutamos de una deliciosa comida. Luego bailamos toda la noche y nos divertimos con nuestros amigos y familiares.
Aunque hubo algunos cambios en nuestro plan original, y definitivamente hubo algunos problemas en el día, afortunadamente pudimos tener la boda que soñamos con la compañía de nuestros seres queridos.
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