La boda de Ricardo y Raquel en Morelia, Michoacán
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R&R
02 Ene, 2016La crónica de nuestra boda
No seré nada breve y no me ahorraré detalles, no fue nada glamoroso, ni costoso, sino milagroso. Dios nos ha echado la mano en todo momento y no nos dejó de lado en este proceso. Desde hacía ya un año y medio le había dado el anillo de compromiso a mi novia, pero por diversas cuestiones no podíamos echar en marcha la boda. Una serie de eventos desafortunados impedían ponerla en marcha, eventos desafortunados que no lográbamos concebir.
A mediados de abril con un trabajo nuevo, pudimos empezar a costear la boda. Comenzamos sin saber en dónde estábamos parados, cotizamos con mil coordinadores, mil proveedores, el presupuesto era aproximado de 100,000 de mi dinero y un poco más del dinero de mi novia. Poco a poco nos íbamos dando cuenta que no nos alcanzaba para nada, que después de ocho años juntos había sido un error no ahorrar para ese momento, pero ¿quién lo sabría?
Seleccionamos una fecha que se acomodara a la familia que estuviera lejos, que era en su mayoría la de ambos, más la de ella que todos viven en Sinaloa y Sonora. Siendo así, fijamos el día para el 2 de enero del 2016 y mucha familia comenzó a ofrecer su apoyo en cuanto supieron la noticia. ¡Cuidado con eso! se agradece el esfuerzo pero es peligroso al momento de contemplar dinero o ayuda que aún no se tiene en las manos.
Seguir leyendo »La música y el vestido eran importantes parta mi esposa por lo que procedimos a buscar al Grupo Alfil, quien se encontraba ocupado para esa fecha. Conociendo el costo pero sabiendo que era lo mejor de Morelia, contactamos a MAKESH pero contemplando el presupuesto que teníamos era imposible (ocupábamos la mitad del mismo para únicamente pagar la música). Una tía de mi ahora esposa (madrina de velación), nos ofreció su apoyo para el gasto de la música por lo que procedimos a contratarlo dando un anticipo mínimo.
Raúl el dueño del grupo, increíblemente accesible y dispuesto a dar la mano, derivado de esta contratación nos contactó con un wedding planner puesto que es muy amigo de Raúl. Desconfiados accedimos a atenderlo y para nuestra sorpresa, era conocido de la familia de Sinaloa de mi esposa ¡qué pequeño es el mundo!
Siendo así procedimos a escuchar todas sus propuestas y regalos, y accedimos a contratarlo. Música u organizador, excelentes elecciones. Su empresa se llama MOV, está en Facebook y si ocupan sus datos no duden en pedirlos. Nos ofreció a muy buen precio la Quinta María José, un lugar increíble. De verdad gracias a dios nos ofreció ese lugar tan maravilloso con un buen descuento y a un precio que pudimos pagar, porque si no fuera así no hubiéramos podido.Ya con lugar, banquete y música, venía lo más importante para mi esposa: el vestido de novia. Yo había podido ahorrar aparte durante un tiempo para regalarle algo bonito, ya que siempre fue su sueño casarse con un buen vestido y dando vueltas en internet fuimos a parar a Querétaro a ver a una casa de novias que maneja vestidos de diseñador a buen precio por ser de temporadas pasadas.
Pero desgraciadamente los vestidos no eran lo que esperaba la novia, incluso estaban llenos de maquillaje siendo que los vendían como nuevos, posiblemente de tanta probada. Ninguno le gustó. Ella tiene mucha familia en Querétaro, por lo que se imaginarán todas sus primas y su mamá en las tiendas. Creo que debió haber sido algo muy bonito para ella que todas estuvieran ahí.
Me llamó para avisarme que irían a Palacio de Hierro a ver los vestidos de la diseñadora española Rosa Clara, nada más para darse una idea de qué quería. Mi novia ya me había comentado de que esa diseñadora le fascinaba pero pues no podíamos costearlo. Yo me fui con un amigo a tomar unos tragos mientras ella estaba en Palacio y al cabo de tres horas me marcaron para que fuera a pagar, algo que me asustó pues únicamente traía conmigo 40 mil pesos y no creía que fueran suficientes para un vestido así.
Al llegar la sorpresa fue que el gerente general del palacio había estudiado con una prima de mi novia, por lo que eran viejos conocidos y procedió a darnos un buen descuento tipo empleado. Increíble porque de los sesenta y tantos que costaba el vestido nos salió a un precio que podía pagar; vestido de sus sueños listo.
En fin, poco a poco dábamos anticipos pequeñitos de diez mil pesos o incluso menos. Logramos liquidar con anticipación todo y agregar detalles de lujo a la boda y el organizador nos regaló varias cosas que hicieron que quedara increíble. Lo importante es que mi esposa estuviera feliz, lo malo es que el estrés del dinero de los planes, de los invitados, de la familia, puede tirar hasta a la relación más fuerte.
Nunca habíamos peleado tanto como en aquellos días ¡tengan mucho cuidado! Como consejo respiren y respétense siempre, es algo muy feo manchar con peleas algo tan padre. Lloramos, gritamos, nos contentamos, nos desesperábamos uno al otro tanto que tirábamos la boda por la borda. Pero al final de cuentas, es algo que se quedará con nosotros toda la vida, tanto lo bueno y lo malo y de verdad les digo, no cambiaría ni un solo momento, ni un solo momento malo, ni un solo error porque eso para nosotros la hizo perfecta.
En resumen, dios provee y si quieren hacerlo reír, cuéntenle sus planes. Nunca imaginé que se nos darían las cosas de esa manera, todo fue hermoso por lo menos para nosotros. Siempre lo recordaré, desde el primer momento en que nos llegó la primera cotización por correo, hasta el momento en que la vi enfrente de mí con su vestido de novia.
Les dejo un pequeñito highlights del video de nuestra boda.https://www.youtube.com/watch?v=0-COsEVWFaI
Espero que nuestra historia les sirva de algo. Saludos.
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