La boda de Rod y Becky en Naucalpan, Estado México

La crónica de nuestra boda

Nuestra boda sin dudas fue diferente la ceremonia fue celta, con espadas y el tradicional handfasting, con cráneos antifaces, después de 12 años unimos nuestras vidas en día lleno de alegría, felicidad, pero sobre todo amor.

Disfruté cada momento desde encontrar mi vestido que juraba no podría encontrar dado a que tengo gustos distintos no sabía si quería que fuera negro o blanco si era blanco como le daría el toque gótico que deseaba, pero de pronto llegamos a Essence y encontré mi vestido perfecto.

Después empezamos a preguntarnos cual sería el lugar perfecto para que tuviéramos una ceremonia y una fiesta únicas y tuvimos la fortuna de encontrar Jardín Cavalia que desde el día uno nos trataron como un miembro más de su familia y nos brindaron todo el apoyo así como una alta responsabilidad de hacer que nuestro día fuera único.

Desde que empezamos hablar de boda sabíamos que queríamos una canción de David Bowie As The World Falls Down per también queríamos tener las canciones de Annie Lenox Love Song For A Vampire y Leonar Cohen Dance me to the End of love, la solución estuvo en encontrar una maestra de danza y encontramos a G'Ayla Iliria de El Eco Motion Center quien nos hizo la coreografía para la canción de David y las demás decidimos hacerlas como una mascarada ósea con cambio de parejas. Tuvimos la fortuna de contar con Mario Lafontaine como maestro de ceremonias quién le dio un toque humorístico especial y alegre a la noche, incluso canto y nos puso bailar El Baile del Sapo. Nuestra ceremonia era con espadas así que tuvimos ahora la incógnita de donde conseguíamos espadas y de que tipo pues bien decidimos que la mejor opción serían las del Señor de los Anillos la de Arwen y la de Aragón estos en la literatura unidos por muchos años. Otra de las decisiones más importantes eran nuestros anillos pues nuevamente no queríamos que fueran comunes así que después de buscar mucho encontramos anillos negros que los diseñaron para nosotros y son la pareja del dragón hechos de carburo de tuxteno. No pude tener padrinos mas maravillosos Leonardo, Cecilia, Pablo, Raquel, Gabriel, Alda, Jonathan y Claudia quienes me trataron como una princesa y me llenaron de mucho amor en cada momento. No cambiaria nada fue tan perfecto cada instante, cada segundo que incluso no podemos a esperar a renovar nuestros votos.