Hermoso hotel, lástima de tan mal servicio
Esperaba mucho más de un hotel de esta categoría. Las instalaciones son preciosas, las habitaciones muy lindas y todo el complejo en sí, excepcional. Lástima de tan mal servicio.
Me iré por etapas.
Planeación:
1.Fue un verdadero martirio. Hubo mala comunicación todo el tiempo. Fuimos a la visita de inspección pensando en conocer a nuestra coordinadora y definir o, aunque sea, tener una idea de los proveedores y nada de esto sucedió. La visita fue casi en vano ya que no logramos avanzar prácticamente nada.
2.Nos presentaron a la coordinadora 3 meses antes de la boda (ya es poco tiempo, pero estábamos advertidos de que así operaban), pero lo peor es que los correos y llamadas fueron demasiado escasas, en promedio eran 2 correos o llamadas contestadas al mes durante 3 meses. Me parece bastante poco para planear una boda.
3.En mi contrato estaba estipulado que sería en la playa y 4 meses antes de la boda, en la visita de inspección, me dicen que la playa no está autorizada, estuve peleando con el hotel 3 meses y finalmente la autorizaron, pero no me parece que tuviera que estar en discusión cuando estaba en el contrato. Pasamos por muchísimo estrés en este proceso.
4.No había forma de realizar los pagos, ya que, entre que no nos contestaban ni llamadas ni correos y que no tenían la información sobre lo que se iba a pagar, tuvimos que pagar prácticamente toda la boda hasta ¡una semana antes del evento! Siendo nosotros los que estuvimos presionando con muchísimo tiempo de anticipación para que no fuera el pago de golpe. Al final, obviamente nos vimos super presionados con este tema.
Estancia:
1.Transportación para los huéspedes dentro del hotel. Probablemente esta fue la causa de mayor descontento para nuestros invitados. En el día a día teníamos que esperar hasta 30 minutos para que un carrito nos moviera. El día de la boda, para llegar a la misa, tuve que esperar cerca de 20 minutos para que el carrito pasara por mí.
Para llegar a la recepción, estuve también cerca de 20 minutos esperando, pero bajo el sol de las 4 de la tarde, con el vestido de novia, el maquillaje corriéndose… Es un día en el cual los minutos son demasiado preciados como para estar esperando un carrito por un tiempo tan largo.
Muchos de mis invitados tuvieron que llegar caminando (en tacones) a la misa, porque los carritos nunca llegaron y la mayoría llegó tarde a la recepción por la misma causa. Fue una lástima que se perdieran tan preciado momento por algo así. Ya que es un momento que no se recupera.
2.Servicio del personal. Cerca del 50% parecía estar de mal humor, algunos hasta llegaron a ser groseros (me refiero al día a día, durante el evento fueron todos muy amables y atentos). Esperábamos mucho mejor servicio para un hotel de esta categoría. Como observación, lunes y martes el servicio mejoró muchísimo, quizá no estaban preparados para recibir a tanta gente el fin de semana, pero la mayoría de mis invitados tuvieron alguna mala experiencia.
Coordinación:
Como mencioné antes, la atención fue demasiado escasa, sin embargo, lo más molesto fue que la coordinadora me pidió un check list de todas las cosas que yo llevaba por mi cuenta para decorar (decidí llevar algunos detalles de decoración porque la decoración del proveedor que tienen es bastante cara). Ella me dijo que me apoyaría para colocarlo todo en su lugar correspondiente (a pesar de que yo le mencioné que mis bridesmaids podían hacerlo). Le hice llegar todas las cajas que traía y una maleta con parte de la decoración, pero el día del evento vi que faltaban varias cosas por colocar. Le pregunto y me contesta que varios de los cilindros y peceras que había comprado para los centros de mesa se habían roto. Para empezar, yo se los entregué en perfecto estado. Me parece de muy mal gusto que no hayan tenido el cuidado debido sabiendo que eran cosas de vidrio y que estaban perfectamente empaquetadas, los debieron haber tratado bastante mal, pero lo dejé pasar.
Al día siguiente de la boda, me debía devolver algunas de las cosas importantes (acta de la iglesia, álbum de firmas, letras luminosas, etc..) y no me llegaron. El lunes vuelvo a preguntar y a las 6 pm, me contesta que pase yo por ellas a la oficina porque ella ya se había ido y mi avión salía al día siguiente en la mañana. Me abre otra de las chicas, y me entrega solo los papeles y le pregunto que dónde está todo lo demás. Me contesta que no sabe, pero que pase a ver si logro identificarlo. Me llevo la sorpresa de que varias de las cosas que yo había entregado se encontraban en perfecto estado decorando la oficina de bodas. Y algunas de estas cosas no se colocaron en mi boda. Además, dieron por perdida la maleta que les había entregado. Quedé con un muy mal sabor de boca.
Postboda:
Después de la boda nos fuimos al sportsbar. Mi coordinadora me dijo que avisaría con anticipación para que estuvieran preparados para recibir a toda la gente (lo cual tampoco sucedió).
Llegamos y, para empezar, tenían música super apagada, como música de fondo. Veníamos con toda la fiesta y la energía, un sábado por la noche a las 11:00 pm, sinceramente esperábamos mucho más. No había flexibilidad para cambiar de música en lo absoluto. Me habían comentado que sí se podía hablar con el DJ o el de ambientación y dependiendo de la gente sería la música que tocarían, pero esto no pasó, que ya tenían todo programado y supuestamente nadie lo podía modificar. Más tarde empezó un grupo a tocar, pero había pasado suficiente tiempo para que mucha gente se retirara.
Lo peor de todo es que era el único lugar abierto para comer a esa hora y a varios invitados les negaron el servicio diciendo que ya no había comida, que ¡se había agotado! Solo quedaban unas cuantas cosas en la barra que, por cierto, también estaba desabastecida.
La boda a final de cuentas salió bien, se disfrutó, la comida en el evento fue muy buena y el servicio durante la recepción excepcional, pero todos esos detalles fueron causa de gran estrés y descontento, sobre todo durante la planeación. Ojalá aprendan de los errores, contraten más personal y los motiven a dar una buena cara al cliente.
P. D: Nos salió un escorpión en la habitación. Grande y negro. ¡Pero fue lo que menos me preocupó durante la estancia!