Cuenta con dos jardines, ambos HERMOSOS y un salón abierto techado, era justo lo que estábamos buscando. La dueña es súper amable, detallista y atenta a tus solicitudes, la comida deliciosa, el lugar tanto de día y de noche es bellísimo. Cuenta con un riachuelo natural lo cual lo hace súper fresco, además de que siempre lo están mejorando. Definitivamente lo recomiendo al 100% no pudo haber mejor lugar para nosotros.

Desde que fui al jardín a una boda hace como 7 años, amé el lugar. En varias ocasiones fui a más bodas y siempre había algo nuevo en el jardín, nunca ninguna decoración es igual... Y bueno, qué puedo presumirles de la mía, cumplió con todo lo que le pedí, e incluso fueron muchísimas cosas más. La atención completamente personalizada, muy amable y accesible para que todo saliera a la perfección el día tan esperado.

Nos consintió de tal manera que nos sentimos como en nuestra casa, con todas las facilidades y seguridad de que nuestras pertenencias se quedarán a resguardo y disponibles para el momento en que sería usados. Es un magnífico lugar para llevar a cabo un evento tan bonito, inolvidable y especial como lo es una boda y cualquier otro tipo de evento.

¡Feliz de haber contratado un jardín con salón que incluye todo! No tuve que preocuparme por nada, y la atención excelente. Si me vuelvo a casar volvería a ser ahí.

Durante el evento mi esposa y yo no tuvimos que preocuparnos por nada más que sólo por divertirnos y pasarla bien con nuestros invitados.

No creo que exista un lugar mejor para celebrar un momento tan importante. El lugar simplemente es hermoso y la comida deliciosa. Además, la señora Norma es una mujer hermosa... la atención que brinda es de primera, es muy servicial, atenta, flexible y muy dadivosa. Se interesa por tu evento y siempre esta ahí para lo que necesites dando todo de sí.
En el salón Blue y Jardín Madrigall dan el 100% en esfuerzo para que tu boda sea genial. Estamos muy agradecidos y felices, ya que hicieron que nuestra noche fuera maravillosa, todo fue perfecto... aún mejor de lo que imaginábamos.

Es la segunda vez que contratamos los servicios de la Sra. Norma, la primera vez en los quince años de mi hija en el Salón Bluee y ahora para nuestras bodas de plata en el Jardín Madrigall. Los dos eventos superaron lo que nos habíamos imaginado, estuvieron increíbles y tanto nosotros como nuestros invitados disfrutamos al máximo. El lugar, el montaje y flores muy bonitos, la cena riquísima, muy buen trato y cuidado de cada detalle, muy accesibles. Los recomendamos ampliamente.

Muy atenta y cálida nuestra coordinadora de inicio. Atendió nuestras peticiones y facilitó inquietudes y supo dar con todos los arreglos de todo el evento, me sorprendió ya que pasó mis expectativas. La comida de inicio a fin muy rica, desde las degustaciones que tuvimos hasta el día del envento. Todos las decisiones y acuerdos se respetaron, desde elecciones básicas hasta cuando sobró la bebida se regresó todo.

Se nota que lo suyo son las bodas y lo disfruta realizar y cualquier detalle que surja el día del evento lo resolverá para que sea un día inolvidable para los novios. Para terminar con la cereza del pastel nos regaló un detalle muy rico y lindo de su parte. Estamos agradecidos ya que es un día memorable para todos los que disfrutamos ese día.

El jardín quedó hermoso, la comida muy rica. El servicio muy bueno. Agradezco mucho que hayan hecho de mi día especial lo mejor.

Me gustó mucho cómo se adornó mi boda, fue buena la atención de la sra. Norma. La atención por parte de los meseros fue bueno aunque si puede mejorar, recomendaría mejor organización logística del evento y apego a los tiempos. También mejorar la seguridad del lugar.

El lugar es muy bonito, me gustó mucho el montaje de mis mesas y lo precioso que se veía de noche el jardín, sin embargo, debo decir que hubo algunos detalles que le restaron puntos a la calidad, como por ejemplo uno de los dos platillos fuertes y una crema que se sirvieron en la boda estuvieron salados y obviamente es imperdonable eso ya que la comida es de lo más importante de una boda, los centros de mesa no eran tal como se me mostraron el día de la de gustación y ya en el momento de la boda no puedes hacer ningún reclamo, ya que no hay tiempo para eso, el servicio del DJ que viene incluido al pagar el paquete estuvo un poco deficiente ya que no estaba al pendiente y de pronto se ausentaba, la comida se sirvió 40 minutos tarde de la hora prevista en el itinerario que se entregó al contratar el servicio. En lo general serían esos los detalles que hubo en mi boda, sin embargo, me gustó el lugar y si volvería a contratar solo que esta vez exigiría se ponga atención en este tipo de detalles.

Excelente el lugar, Norma es una persona muy profesional y dedicada en su trabajo. ¡Mis invitados quedaron fascinados con la comida el lugar y el ambiente! 100% recomendable para que sus eventos sean inolvidables.

Hola, quiero contarles mi experiencia respecto al Servicio prestado por parte de la señora Norma (dueña) del Jardín Madrigall. Para que a otros novios no les pase lo mismo que a nosotros. Para empezar, el día que fui a ver el jardín, me atendió una chica llamada Fernanda, me explico todo muy bien sobre el jardín y decidimos quedarnos con ese jardín. Durante el transcurso de los días me comunicaba con Fernanda para ver detalles, pero un día me comentó que no iba a seguirme atendiendo porque ella daba mal los precios y la información, me dijo que me daría el número de la dueña y que tratara con ella. Me pasó el número de Norma y estuve tratando con ella, pero es una persona que le tienes que estar repitiendo que es lo que quieres, cómo lo quieres ¡todo el tiempo! Aunque ella lo tenga en las conversaciones, no busca lo que ya le has pedido. A la hora de la degustación, no tenia los platillos que le solicité, tampoco el montaje acordado. Me molesté y me respondía “no te preocupes, todo va a salir bonito”, al querer pedirle que me dijera que colores tenía o que mesas y ese tipo de cosas, me contestaba “vamos a poner lo que tú quieras”, “no te preocupes”, “verás que todo saldrá bonito”, pero jamás me daba las opciones que tenía. Como no quedé conforme con esa degustación, ofreció otra degustación, comentando que esa solo era un ensayo y que la otra degustación sería “la buena”. Accedimos y la segunda degustación quedó mejor, pero era desgastante estar lidiando con la señora Norma al estarle repitiendo una y otra vez lo que quería. Por esa situación, llegue al grado de decirle a mi ahora esposo, que él hablará con ella porque a mi ya me tenia fastidiada. El día del evento: Lo único que puedo reconocerles es la decoración del lugar, me gustó como se veía. Pero todo lo demás fue un servicio mediocre y de baja calidad, no valía lo que pagamos por sus servicios. Los baños estaban sucios, se inundaban, tampoco había agua y no los limpiaban hasta que nosotros íbamos a decirles que los limpiaban. En la contratación, estaba incluido la limpieza de los baños. Las “hostes” ni siquiera sabían que hacer y mis cuñadas tuvieron que estar haciendo su trabajo. A la hora de servir los alimentos, fueron muy lentos, la comida llegó fría. Para servir el siguiente platillo se esperaban que todos terminaran para servir a todos, siendo que podían empezar a servir a los que ya terminaran. Al servir el alcohol, les dimos la indicación que podían servirlo desde el coctel, cosa que no hicieron, ni siquiera ofrecían las bebidas que había, solo decían que había refresco y agua; por ello, nos quedaron cajas de alcohol y otros cartones de cerveza, pero al momento de que los meseros nos entregaran la cerveza, no dieron la cerveza que habían dicho que sobró dieron muchísimo menos de lo que comentaron y la persona encargada les reclamó y le devolvieron la mitad del cartón, la persona ya no quiso reclamar lo demás porque el mesero se puso grosero y pesado. Había torna fiesta, eran tacos al pastor para el 60% de los invitados. A la hora que se repartieron los tacos, no les tocó a todos, mis invitados eran menos del 60%, y no les tocó porque los meseros guardaban en un recipiente la carne. Cuando los invitados pedían tacos, decían que ya no había y veían a los meseros estar comiendo tacos, siendo que no les debe tocar tacos a ellos porque ya se les dio comida y la preferencia la tienen los invitados, no los meseros. También se ponían pesados y groseros con los invitados diciendo que a esa mesa ni siquiera les iba a tocar tacos, siendo familiares directos. Pero a la hora de la propina estaban muy amables. Se fue la Luz y nadie hizo nada, me comentaban que hasta que llegara, que no se podía hacer nada, se veían luces a los alrededores, pero en el jardín no había nada de luz. Y nos tuvimos que esperar hasta que llegara y ese tiempo muerto, no lo repusieron. Se pagaron 20 platillos para niños, llegaron menos de los 20 niños y al final, una "encargada" se acercó a mi diciéndome que le debía platillos de niños, que se dieron más de lo que se pagó, le contesté que no era cierto, que pagué 20 y los niños no llegaron. Me di la vuelta y me fui. La señora Norma prometió estar durante el evento por cualquier cosa, nunca se apareció. Los centros de mesa nos los cobró más caros y no tuvieron la calidad que prometió. No volvería a cometer el error de contratarlos. Fue una muy mala experiencia y espero que toda esta experiencia les sirva para tener cuidado al momento de contratar los servicios y que su opción no sea el Jardín Madrigall.

Nos gustó mucho el servicio que nos ofrecieron, siempre nos trataron excelente y en lo personal la Señora Norma es muy profesional y dedicada.
Los precios son muy buenos, se adaptan a diferentes presupuestos y valen la pena.
Muy bonito lugar, 100% recomendado.

Un jardín bonito, con precios adaptables al presupuesto. La señora Norma Elena y su equipo siempre estuvieron resolviendo nuestras dudas. Nuestros invitados quedaron muy complacidos por el servicio y trato que les ofrecieron. El DJ adaptable a nuestras peticiones. Todo quedó muy bien.