Boda en mayo 2022
El servicio de C es bueno, sin embargo, su equipo no le ayuda suficiente y ella termina encargándose de todo; el servicio que recibes no es realmente lo esperado por lo que pagas. Planeamos el evento con un año un mes de anticipación, nuestra boda fue en mayo 2022, y dentro de las quejas están: dejaron sin alimento al menos a 7 invitados, no pusieron la mesa de niños a tiempo, prometieron una habitación nupcial para nosotros y el día anterior al evento me informan que no tengo habitación, sin embargo, lo resolvió enseguida (punto a favor), no pusieron las canastas de botiquín en los sanitarios que se solicitaron.
Les pedí que repartieran 3 tipos de recuerdos, uno u otro para cada invitado, y pedí apoyo con una amiga para que ella pudiera tener más control sobre esto, sin embargo, los del jardín le dijeron de manera muy grosera que no, hicieron lo que quisieron, y hubo gente que no pudo llevarse ni un recuerdo, otros con 2 o hasta 3… tremendo relajo.
No están acostumbrados a eventos con muchos detalles como fue planeado el mío. El día anterior que llegaban invitados al hospedaje, se les trató mal, y no sólo a ellos, sino a nosotros como novios, la asistente E fue de cero ayuda en todo lo que le pedía, fue sarcástica, cínica, y grosera conmigo. El lago artificial no fue llenado, las pantallas luminosas para el mismo, fueron colocadas hasta que se insistió por 5a vez.
C nunca estuvo en la ceremonia religiosa, ni al finalizar. La misa dio inicio a las 2 pm, se equivocaron en la música y fue un momento incómodo. De igual forma es importante saber que la misa la ofició un diácono, cuando con quien hablamos era un sacerdote. No me pareció correcto que cambiaran de oficiante sin antes consultármelo, porque tampoco tenían listas las lecturas.
Menos mal que ya les habíamos dicho qué lecturas iban a leerse y tuvieron que hacerlo desde el celular. Para mí sí era importante que quien oficiara la ceremonia religiosa pudiera realizar los sacramentos, sin embargo, entiendo que esto no es cuestión del jardín, pero debieron prevenirme y también estar preparados al menos con las impresiones de las lecturas, mucha falta de comunicación en general.
Considero que vale la pena casarse en la iglesia del pueblo y después desplazarse al jardín, porque tampoco estaban preparados para recibir a mis 150 invitados, mi suegra y mi mamá tuvieron que preguntar de dónde sacaban más sillas porque sólo habían puesto 30. Hubo gente de pie en el sol y se les negó el agua simple o de sabor al finalizar ambas ceremonias, y eso que el paquete contratado (paquete Royal) incluía bebidas ilimitadas. Me echaron la culpa diciendo que la novia no permitió salida de bebidas antes de los alimentos (cuando se había contratado coctelería aparte a partir de las 3 pm).
El agua de sabor duró nada, sólo tenían 1 jarra por mesa, pésimo. El pasto era de mis mayores preocupaciones, dijeron que según iban a poner nuevo, y los rollos que colocaron no estaban bonitos. Mi peor miedo hecho realidad, al igual que la florería, que debía ser premium y a mí, no me pareció gran cosa, yo lo considero florería normal. La vi hasta escasa, con las coronas de la carpa y los arcos muy pobres. Les pedí que las rosas fueran lo que menos hubiera, porque preferiría otras flores y el 90% fueron rosas.
Detrás del menú habíamos pedido un mensaje específico para que los invitados tuvieran un código QR y que ellos compartieran sus fotos con nosotros, y lo pusieron mal. Los chisperos por los cuales pagamos $1200 extras, eran de risa, los prendieron ellos mismos interrumpiendo nuestro primer baile de esposos, y uno ni siquiera prendió. Muy mala calidad, se me hizo carísimo.
El desayuno el día del evento no estuvo listo a la hora que se solicitó (8 am), sin embargo, la chef Tania nos apoyó en tener los alimentos a la brevedad y con un par de desayunos extras que no estaban contemplados. Los invitados se quejaron mucho que nos les daban respuesta sobre el hospedaje, o bien, tardaban más de 2 días en responder mensajes o llamadas. El paquete Royal incluía 2 wedding planner, iniciamos con R y C y a los 4 meses ya sólo era ella, con sus asistentes que realmente no tienen buena comunicación.
También faltaron los 5 calentadores que ofrecían, al ser un lugar boscoso, eran completamente necesarios. Dentro de los puntos a favor: C apoyó a invitados a buscar hospedaje a pesar de que se pidió hacerlo con más de 15 días de antelación, resolvió inquietudes con el provedor externo de coctelería, pedí 3 pasteles individuales para invitados que cumplían años y fue un excelente detalle; adornaron la habitación nupcial que consiguió de último momento, con algunos pétalos, flores, velas en las escaleras y la prometida botella de vino espumoso, pero no la botella de ginebra Malfy que el otro wedding planner le había prometido en compensación al novio.
Me sentí tranquila de que casi todo se resolvió de la mejor manera, sin embargo, en el momento es muy incómodo y te desespera no recibir lo que has pagado con tanto esfuerzo. Y sobre todo la manera en que el equipo te contesta o desafía. Nos pidieron designar a alguien que pudiera tomar decisiones importantes en el evento para que los novios no fuéramos molestados, y aún así una de las asistentes cuestionó más de 3 veces a esta persona para abrir la mesa de dulces a las 7: 40 pm cuando en el itinerario decía 7 pm. Y no sólo eso, sino que también fue a preguntarme si era verdad que yo lo había autorizado… muy incómodo para todos. Por algo se designa a una persona de total confianza para tomar decisiones.
En general puedo decir que todo se atrasó y no me gustó que no siguieran el itinerario acordado. Ellos nos recomendaron al equipo de fotografía y video (que sí recomiendo) y al equipo de estilistas (que no recomiendo para novia, para invitadas tal vez). La comida muy rica, igual que en las pruebas de menú y el pastel exquisito visualmente pero sobre todo de sabor, ni siquiera sobró. Fue lo más rico.
Pagamos $8 mil extras por pirotecnia y fue de los momentos más memorables. Cansino, uno de los organizadores fue muy amable con nosotros y estuvo muy al pendiente de que a los novios no nos hiciera falta nada. El lugar es hermoso y de ensueño, pero la experiencia deja mucho qué desear. Yo no volvería a contratarlos para ningún evento, les hace falta experiencia.
El hospedaje dentro del jardín es aceptable. Al final, disfrutamos la boda lo más que se pudo, y el ambiente que los invitados hicieron fue lo mejor.