Luna de miel en Alemania
Elegir Alemania para la luna de miel es sinónimo de variadas y fascinantes regiones, impresionantes ríos, mucha historia por descubrir y paisajes montañosos sorprendentes.
Información sobre Alemania
Alemania es un país que ofrece muchos lugares por descubrir desde la cosmopolita Berlín hasta sus pueblos medievales y su gastronomía. Un viaje para disfrutar de paisajes inolvidables con castillos, casas de madera, palacios entre las montañas y monasterios. Te damos algunas propuestas para una luna de miel única.
Berlín. Es la capital de Alemania y algunos de sus lugares imperdibles como la Puerta de Brandeburgo testigo de infinitos acontecimientos históricos, la estación de Hamburgo, convertida en sala de exposiciones de arte contemporáneo, la Nueva Guardia, el Palacio de Charlottenburg, el mítico muro de Berlín, la Columna de la Victoria o las ruinas de la Iglesia del Emperador Guillermo. Un plan muy romántico es disfrutar de una cena en la cúpula del Reichstag, que se encuentra muy cerca de la puerta de Brandeburgo.
Múnich. Es el hogar del famoso Oktoberfest y la capital de Baviera. Múnich es una ciudad sofisticada, lo notarán simplemente caminando por sus calles, verán una cantidad de tiendas, atracciones culturales y mucho movimiento nocturno. No olviden acompañar una de sus cervezas con una de sus salchichas bratswurt. A unas horas al sur de Múnich se encuentra el Castillo Neuschwanstein, uno de los castillos más populares de Europa, sólo hace falta verlo de lejos para sentirse inmersos en un cuento de hadas.
Heidelberg. El destino ideal para los que disfrutan de los paisajes pintorescos. La ciudad antigua de Heidelberg se reconoce por la belleza de sus casas con techo rojizo y la cercanía con el río Neckar que le pone todo el encanto a este lugar. Su hermoso castillo es una visita obligada.
Viñedos del Valle Mosel. Para una visita tranquila y en medio de la naturaleza les recomendamos visitar los viñedos del Valle Mosel. Alemania tiene 13 regiones de vino y esta es una de ellas, no se cansarán de tomar fotos de las panorámicas llenas de hermosos cultivos.
Quedlinburg. Cuando lleguen a Quedlinburg sentirán que se han trasladado en el tiempo, esta población del renacimiento fue nombrada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Aquí podrán admirar las casas más antiguas de Alemania, el casco histórico reúne más de 1300 maderas pintadas de diferentes colores y calles adoquinadas.