Para obtener un presupuesto de acuerdo a nuestras necesidades y que se adaptara, tuve que realizar varias llamadas internacionales, ya que me encontraba fuera del país, y no me gustó la atención que recibí. Aún mencionando que hablo de fuera del país, la señorita me pidió un momento para atender algún otro asunto y me dejó esperando por varios minutos. Después de este primer incidente, algunos otros le siguieron, como que no respondieran mis correos pronto, y tuviera que llamar nuevamente. Después de todo cuando fui presencialmente al negocio, me atendieron muy bien y me dieron la información que necesitaba para la renta del material. Acordamos el tiempo de entresaca y detalles finales. Se suponía que me entregarían el material el día antes de mi boda, pero como estaba lloviendo no subieron al parque hasta pocas horas antes del evento. Lo cual me tuvo tan mortificada todo el tiempo, que no fuimos capaces de organizar como nos hubiera gustado, por falta de tiempo, y porque no tuve manera de mostrarles como quería las cosas, donde sí o donde no, porque el día de la boda no salí del cuarto, por obvias razones. Esto me trajo mucho estrés y también mucho disgusto durante la boda, especialmente durante la recepción ya que yo pude notar que hubo muy poco tiempo y mucho estrés para organizar todas las mesas, sillas, mantelería, cristalería y cubiertos, porque las personas encargadas de organizar no tuvieron suficiente tiempo para hacerlo, todo por no haber recibido el material alquilado al tiempo que ellos se comprometieron. Al final del día tuvimos sillas mesas manteles, y todo el material que se alquiló de la empresa, en aceptable calidad, e hicimos uso de ello, pero nuestra experiencia pudo haber sido muy diferente si nos hubieran cumplido en el tiempo de entrega.